Asesina

5K 295 16
                                    

-Veo que es digno...- Murmuré al ver su foto.- Dos mil millones de yenes.

-¡¿Qué?!- Queda sorprendido mi cliente y sólo suspira y deposita el dinero en mi cuenta, mi celular llega el mensaje y sonreí.- Sólo mátalo.

-Es un placer hacer negocios contigo.- Dije para después irme a los preparativos.

Era sábado por la noche, tenía que asesinar a Karma Akabane, el mejor burócrata de Japón. Iría a una fiesta donde él estaría, me preparaba mientras preparaba mis cuchillos y armas.

Al terminar de arreglarme, me miré por última vez, el vestido era rojo con un hermoso escote y con un corte en la pierna, permitiendo que sea muy flexible (imagen multimedia, sólo que si las mangas). Salí y me dirijo a la fiesta.

La gente pasaba por todos lados, unos me miraban raro, otros trataban de ligar conmigo, etc. Cuando llegué me infiltré por otra entrada y el lugar era elegante, los calendabros eran gigantes.

-Bienvenidos sean todos a la 8va. Reunión de Burócratas en Japón, espero y les sea de su agrado.- Dijo un tipo que enrealidad no me interesaba.

Caminaba y caminaba pero no encontraba a Akabane. Duré por lo menos unos 10 minutos buscándolo, hasta que lo encontré. Por fortuna, estaba solo y podía hablar con él.

-¿Akabane Karma? Un placer conocerte.- Dije estirando mi brazo para un saludo, él sólo me mira y besa mi mano.

-Sí, el gusto es mío. Te ves bien.- Responde con su voz ronca y sonríe.- ¿Gustas algo de beber? Yo invito.

-No, gracias.- Dije con una sonrisa y tomo asiento.

[...] Terminamos casi rompiendo la puerta con locura, Karma me tomaba de la cintura y yo de su cuello. Cerré la puerta y lo tiro a la cama.

-Karma...- Murmuré seductora, me siento sobre él y hago movimientos circulares sobre su bulto notorio.

-Aki...- Nos besamos con deseo y lujuria.

Karma me besaba hasta llegar a mi cuello, era mi oportunidad para poder sacar mi pequeña arma de mi pierna derecha (donde es el corte de la falda). Trato de no hacer ruido y apunto a su cabeza.

-No te dejaré, Aki.- Antes de dispararle, me tira al suelo.- Sí que eres buena, pero... soy mejor que tú.

-Maldito.- Dije molesta y me quita mi arma.- ¡Eso es mío!

Intento sacar un cuchillo, pero muy tarde, Karma sostenía mis brazos y piernas.

-Eh~, qué tierna eres intentando ser asesina.- Dijo Karma con un tono burlón.

Demonios, ¿de dónde sabía esta defensa? Era demasiado fuerte que no podía quitármelo. Así que me dí por vencida.

-¿Quién te mandó?- Cuestiona Karma y yo me quedo callada.- No me dirás, ¿eh?

-Eso no te incumbe.- Respondo molesta.

-Grip tenía razón...- Murmura y me quedó petrificada, Grip era mi compañero.- Pero no dijo que lo haría una niña insignificante y bella.

-Estúpido.- Respondo más furiosa y trato de salir de su agarre.

-¿Adónde, princesa?- Se acerca más a mí con una sonrisa, me coloca una esposa y él otra.- No te vas a ir. No llamaré a la polícia, pretenderé que no sucedió nada, si me dices quién te mandó.

-Eres un idiota, no lo diré.- Él se acercaba a mí besando mi cuello, reprimí un gemido ante tal acto.

¿Cómo demonios llegué a ser la víctima?

-Te daré otra oportunidad y el doble de dinero que te dió el tipo que no me quieres decir.- Ante esas palabras seguí callada, toma mi pierna aún sujetándome fuerte y me quita mi arma para recargar y apuntar mi cabeza.- En caso de que pierda mi paciencia, te daré un dulce momento de muerte. Vaya, quién diría que la víctima resultaría ser el asesino.

-Anda, dispara. De todos modos no diré el nombre.- Dije segura, haciendo que Karma se sintiera nervioso.- Claro, nunca has tocado un arma y mucho menos asesinar.

-Eres muy bella como para asesinarte, además de que traté de hacerlo hace tiempo.- Respondió el pelirrojo murmurando en mi oído.

-¿Ah...? Entonces...-

-No conseguí hacerlo, fue mi mejor amigo quien lo logró.- Dijo con naturalidad, ¿porqué se pone a contar historias que en realidad no importan? Obviamente, el ambiente se puso incómodo.- En tercer grado de secundaria, nos tocó un pulpo como profesor que teníamos que asesinar, resultó ser el Shinigami y era imposible de matar, tenía velocidad a mach 20 y cualquier movimiento que hicieramos, él lo esquivaba.

-Espera, ¿el Shinigami? Imposible, él sigue vivo...-

-No lo está, experimentaron con él y se convirtió en lo que era para nosotros, profesor y objetivo.-

-No... no...- De alguna manera me solté de su agarre y quedo encima de él, apuntando con el cuchillo.- ¡El Shinigami sigue vivo!

-No, Aki. La clase lo asesinó porque él quería eso, no dejaba que otros asesinos como los que contrababan fueran ellos, sólo nuestra clase.- Respondió Karma más relajado.- Te dije lo suficiente de mi pasado. Dime quién te mandó.

-¿Acaso crees que me importa tu historia? ¡La persona que más quiero no ha muerto!-

-Claro que sí. Antes de asesinarme, dime quién te mandó.- Dijo Karma mirándome fijamente, era increíblemente atractivo.

Y llegan las preguntas titubeantes, si era cierto lo que decía, si debía matarlo de una vez o dejarlo vivir y matar a mi cliente. ¿Cómo una víctima hace cambiar la forma de pensar de un asesino?

Apunto al cuello del pelirrojo y tiemblo, ¿porqué? Siento un terrible dolor en mi pecho y no puedo asesinarlo. Algo me decía que su vida valía la pena.

-Ren Sakakibara...- Pronuncié.

-Con que él... siempre supe que me odiaba pero no para llegar estos extremos.- Respondió desvíando la mirada.

Me suelto de las esposas con un clip y me levanto con cuidado, arreglo mi vestido y miro a Karma con gran seriedad.

-Nunca creí llegar a estos extremos... Adiós, Karma.- Me fui de ahí, no sin antes de esconder mis armas.

[...] Entré a la casa de Sakakibara, estaba en el balcón apreciando su vista al gran jardín que tenía, yo me encontraba en unos arbustos a la izquierda y apunto a su sien, me concentro y... disparé.

-Maldito Karma.- Dije molesta.

One shots [Karma Akabane x Tn]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora