Incluso sí mueres ♡YOONMIN♡

2. Comarca 2 Sur: Aldea Campa.

Jimin

Hay 10 grandes comarcas, pero dentro de ellas hay aldeas, yo nací en Campa, una aldea que para muchos -sino que para todos- es inexistente, aquí hay gente con bastante dinero, el prestamista del pueblo es Jeon Daesung, mi madre trabaja de cocinera en su casa, no gana mucho, pero ayuda. Mi padre es minero, no está mucho en casa, pero igual pienso que hace mucho por nosotros.

A pesar de que soy un omega hace mucho mi abuelo me enseñó algo de defensa personal, él era veterano de guerra y sabía muchas cosas, algunas de ella me las enseñó a mí.

Llego de cortar unas cuantas verduras para la comida de hoy, por fin después de tanto tiempo vendrá papá, estoy realmente emocionado de verlo. Vuelvo a la casa para seguir ayudando a mamá con la comida.

—Tardaste Jiminie — Ella está concentrada en la sopa.

—Sí, lo siento, estaba buscando cuáles no tenían plaga. — Pongo los vegetales sobre la mesa. Ella suspira y saca la carne de una de las bolsas.

—Prepara la mesa, ya casi llega tu padre — Tomo alguno de los cubiertos que tenemos -los únicos, mejor dicho- y los voy poniendo en la mesa.

—¿No te emociona por fin ver a papá? — Estoy realmente animado, aún recuerdo cuando era pequeño y jugábamos él y yo, extraño esos tiempos.

Toma un largo respiro —Pues... En realidad, no mucho, me endeudé de nuevo para poder cocinarle esta noche.

Me quedo callado, sé que mamá ama a mi padre, pero no sé cómo es que han seguido y conmigo incluido, creo que son realmente fuertes.

Voy a mi cuarto y me siento en la cama, a pesar de no poder darme un baño escojo algo de ropa bonita, bueno, tampoco es como si tuviera mucha, pero quiero estar presentable para papá. Se escucha la puerta. Levanto la cabeza rápidamente y corro hacia la puerta.

—¡Papi! —Lo abrazo lo más fuerte que puedo. Él hace lo mismo.

—Chim chim, ¿cómo está mi querido niño? — Sonrío, él levanta la vista y ve a mamá, de inmediato su mirada se vuelve algo nostálgica. —Jiminie, ve a tu cuarto, necesito hablar con tu mami.

Volteo a mirarla y me voy, no es como si fuera un niño pequeño, a pesar de tener dieciocho, soy de las personas que es muy cariñosa con sus padres, aunque a mi mamá a veces le moleste.

Miró hacía el bosque, hace algo de frío pero ya me acostumbré a que este así la mayor parte del año, lo encuentro muy lindo, a mí en lo personal me gusta usar mucha ropa, es uno de mis gustos más raros. También pienso en el abuelo, cuando era más pequeño y hacía frío, él y yo nos sentábamos en una fogata fuera de la casa, y me contaba muchas historias, lo extraño mucho.

—Jiminie — Escucho como llama mi papá desde el comedor, voy a ver que pasa. Bajo las escaleras lo más rápido que puedo. Están la mesa sentados, tomados de las manos, cada que veo eso, me da miedo, porque significa que algo pasó.

—¿Todo bien? — Me detengo al verlos.

—Hay algo que queremos decirte, anda, siéntate. — Asiento rápidamente.

—Escucha Jimin, esto no es muy fácil de explicar, así que pon atención — Advierte mi madre. Empieza —La mina en la que trabaja tu padre cerró — Mi sangre se congela, ¿Ahora qué?

—Es broma, debe ser una broma. — Digo asustado.

—No lo es Jimin, quisiéramos que fuera una broma, pero lamentablemente no lo es — Mi papá esta triste. Su voz es muy decaída y su aroma se vuelve menos perceptible.

—¿Qué va a pasar ahora? — Contengo mis lágrimas. Ellos se quedan mirando, pareciera como si tuvieran culpa.

—Hay una solución, chim chim... — Mi madre no me había llamado así. Baja la cabeza, y después me mira. —En la casa dónde trabajo, la casa del señor Daesung.... — Antes de que ella pudiera seguir la interrumpo.

—Claro, puedo trabajar ahí, me aceptarán aunque sea en el área de carga.

—No, Jiminie, el hijo menor del señor Jeon, Jungkook... Nosotros... — Mi padre no puede ni seguir.

—Nosotros arreglamos tu matrimonio con Jungkook — Termina mi madre. Las lágrimas que tanto me esforcé en detener, caen. —Eres un omega joven, que aún no tiene alfa, así que para asegurar tanto nuestro futuro como el tuyo, hemos decido casarte con el joven Jungkook.

Los veo con mucha tristeza a ambos, siento que me asfixio estando ahí, corro con todas mis ganas hacia la puerta, una vez fuera de ahí me voy al bosque, hasta dónde mis pies me guíen, ¿Casarme? Conozco a Jungkook, pero no es el tipo de persona con quien quiero estar, es muy engreído, y cree que es el rey solo por ser hijo de la "aristocracia" de Campa, no quiero que sea él quien me marque, no quiero tener ningún lazo con él, yo no lo quiero. Cuando me doy cuenta, estoy de pie frente a la tumba de mi abuelo, hay una ligera lluvia cubriendo mi rostro, comienzo a llorar, no quiero una vida con alguien a quien yo no elija.

Me siento frente a él y solo pienso en el futuro que tendré, lo más seguro es que Jungkook quiera tener hijos, y yo no, no me siento listo para ello, además, él ni siquiera me tomará en cuenta y lo más seguro es que ni siquiera nos llevemos bien, aún no acabo de entender porque me tocó vivir esta vida, no la odio, pero si es por dinero podría trabajar mucho para darles a mis padres la vida que se merecen, debe haber otro camino, debe haber otra solución. Escucho el paso de los cabellos acercarse, volteo y son militares, olvidé la fecha que es, se reclutaran a nuevos alfas para el ejército... Entonces mi padre....

Me pongo de pie rápidamente y corro tras los caballos, una vez que se quedan parados veo como toda la gente se acerca a ver los avisos de reclutamiento.

—¡Aldeanos de Campa, es hora de hacer algo por su reino, por su familia y por sus reyes, deben enlistarse al ejército para evitar una guerra con Miranda, todos los alfas pasen por su solicitud!

Así hayan dicho alfas, me formo en la fila, cuando llega mi turno, el guardia me queda viendo extraño.

—¿Eres alfa? — Pregunta dudando de mí.

—C–Claro, es solo que me parezco a mi madre — Disimulo mi nerviosismo, benditas sean las hierbas que esconden mi olor.

Él cruce el ceño y me da la solicitud a regañadientes.

—Tráela dentro de 2 semanas, partiremos para ese entonces.

Asiento y la tomo, tomo el rumbo que ya conozco para ir a casa. Si el problema es que me quieren casar por dinero, entonces van a tener que conseguir a otro novio, porque yo no seré su pase a la riqueza.

Al estar frente a la puerta escondo la solicitud y entro como si nada.

—Jiminie, ¿estás bien? — Mi madre me mira preocupada.

La veo con nostalgia y me voy a mi cuarto, sin decir ni una palabra, ¿El ejército o el matrimonio? Ninguna es una elección fácil, pero no me voy a casar, yo quiero ser libre, además si lo hago bien puedo llegar a ser como
mi abuelo, pero si no, entonces moriré, haré lo que sea para que mis padres se sientan orgullosos de que yo sea su hijo.

Mare 👑