Enamórate - Simón Vargas

Capítulo 7: Universidad

Emma corrió por su habitación poniendo cosas de aquí a allá, eran las 7:40 de la mañana, su primera clase era a las 8:30 y todavía debía pasar a casa de los Vargas para dejarle la llave a Simón, llamó al teléfono de él y después de dos timbres una voz ronca llegó hasta sus oídos.

Si: ¿Emma?

Em: Sí, lo siento si te desperté, necesito dejarte la llave ahora, ¿Estarás o estará Martín en su casa?

Si: Sí claro, estamos aquí ambos.

Emma buscó su zapato con la mirada y al ir por él tropezó con la cama, causando que un pequeño grito saliera de su garganta y Simón que aún estaba en la línea se preocupara.

Em: Aaaaahhhhh.

Si: Emma ¿Estás bien?

Em: ¿Eh? Sí sí, llego en 5.

Emma colgó y Simón soltó una risa divertida, luego de eso Simón se dio cuenta de lo inevitable: tenía que hablar con sus padres.

Después de la llamada de Emma, él se dirigió hasta el comedor de su casa, donde solo estaban sus padres y Martín desayunando.

Si: Buenos días. Papá, mama, tengo que decirles algo...

-¿Te vas a mudar?

-Villamil creyó que ya nos lo habías dicho, así que nos preguntó si ya te habías ido esta mañana.

Simón maldijo a Villa en su mente y se sentó al lado de su hermano, quien al parecer estaba más que interesado en su plato de comida.

Si: Sí, bueno, no está muy lejos de la universidad y lo puedo pagar solo.

-Está bien.

Mar: ¿Cómo? ¿Así de simple? Si fuera yo...

- Tú eres menor y eres un polo muy opuesto a tu hermano.

-Sí, estamos seguros de que saliendo de aquí solo, no sobrevivirías.

Mar: Me lastiman.

Si: ¿Eso es un sí?

-Claro.

-¿Hay algo más que quieras decirnos?

Simón pensó un momento si decirle o no a sus padres que viviría con una chica, pero optó por no hacerlo, pues no quería arriesgar la buena voluntad de sus padres.

Si: No, hoy me darán la llave y me mudaré lo más pronto posible.

- Está bien hijo, nos da gusto que des este paso.

Si: Ah y una cosa más, Manchas y Frida...

Mar: No, se quedan.

Si: Ni siquiera les pones atención.

Mar: Yo los baño.

Si: Cada 6 meses.

Mar: Por lo menos lo hago.

Si: Gracias a mí comen.

Los padres de los chicos giraron los ojos y detuvieron la discusión.

-Parece que ustedes siguen siendo niños.

-Simón, llévate a Frida y Manchas se quedará aquí.

Mar: No, Manchas es agresivo en extremo, Frida se queda.

Si: Bien, yo me llevo a Manchas.

El timbre de la casa sonó y captó la atención de los dos hermanos Vargas.

Si: Yo abro.

Simón se acercó a la puerta más rápido de lo que se había dado cuenta y al abrir vio a la chica de ojos color miel parada frente a él con una sonrisa, de nuevo esa sensación extraña vino a su cuerpo y se convenció de que debía controlarse.

Em: Buenos días Simón, ten, son las llaves de la bodega, son tus copias de hecho, así que no necesito que me las regreses.

Si: Tengo algo que contarte.

Emma sonrió y miró directo a los ojos de Simón esperando su respuesta, pero su celular sonó indicado una alarma.

Em: En serio lo siento, pero ya me tengo que ir, ¿Me cuentas luego? ¡Nos vemos Simón!

Simón vio algo decepcionado como la chica se iba prácticamente corriendo, pero se recordó que la vería más tarde, así que una sonrisa apareció de nuevo en su rostro, eso hasta que se dio cuenta de lo que estaba pasando y entró de nuevo a su casa dando un suspiro.

Mar: ¿Era tu chica?

Si: Basta.

Mar: Uy, alguien ya no está tan de buenas.

Si: Es su culpa, ustedes metieron esos pensamientos raros a mi cabeza y ahora no puedo sacar a...

Simón paró cuando se dio cuenta de lo que decía y trato de huir, más su hermano no lo dejaría ir así de fácil.

Mar: Vamos, dilo, te gusta esa chica, te gusta y lo tienes que admitir, te gusta y vas a vivir con ella.

Simón comenzó por alguna razón a entrar en pánico y dijo lo que sabía que haría que su hermano desapareciera de su vista.

Si: ¿Qué sucede contigo y con Isaza?

Martín borró su sonrisa y tras murmurar un tonto: "nada" se fue hacia su habitación, Simón decidió faltar ese día a la universidad para poder mudarse y dejar todo preparado para el día siguiente, por lo que terminó de empacar las cosas que le faltaban y poco a poco comenzó a trasladarse a lo que sería su nuevo hogar.

Emma llegó a la universidad barrida y tras dejar sus papeles en rectoría entró a su primera clase, por suerte el profesor no había llegado, así que tomó un asiento libre al lado de un chico que dibujaba distraídamente sobre su cuaderno, al notar la presencia de alguien más el chico levantó la vista sorprendido, mas Emma no le prestó atención y saludó con su habitual sonrisa.

Em: Mucho gusto, soy Emma, espero no te moleste que me siente aquí.

X: Eres nueva ¿No?

Em: Sí ¿Por qué?

X: Nadie se sienta aquí, suelen evitarme. Soy Joy.

Emma sonrió y giró los ojos.

Em: Pues Joy, tendrás que acostumbrarte a que sea tu dolor de trasero personal, porque he decidido que no te voy a dejar solo.

Joy sonrió y volteó su cuerpo hacia la chica.

Joy: ¿Y si me niego?

Em: Suelen identificarme por ser terca , así quevete acostumbrando.

Joy: Bien Emm, dime 5 cosas que deba de saber de ti.

El profesor entró al salón seguido de algunos chicos más y la clase comenzó,  por lo que Emma se acercó a Joy y susurró sobre su oído.

Em: Te los diré en algún tiempo libre.

Joy sonrió y la clase fue pasando minuto a minuto. Más atrás en la clase, Isaza estaba sentado tomando apuntes cuando reconoció a Emma y con una sonrisa tomó una foto y la mandó al grupo de WhatsApp que tenía con sus amigos.

Isa: Miren a quién me encontré por aquí.

Gracias por su tiempo, voto y/o comentario.
Carol.