Villa abrió los ojos y notó como no era un lugar conocido en el que estaba, la habitación era blanca y la cama era demasiado rígida para su gusto, se espantó cuando vio que en su brazo estaba una aguja puesta y su cuerpo era cubierto solo por sus calzoncillos y una bata. Quizo pararse para buscar a alguien, pero en ese momento alguien entro a la habitación, una chica que tenía la pinta de ser doctora, Villamil la vio para ver si la reconocía y se dio cuenta casi al instante de que no lo hacía, si la conociera no olvidaría su rostro.X: Buenas noches, señor Villamil, mi nombre es Kath y seré su doctora.
Villa vio a la chica con una ceja alzada mientras esta se acercaba para tomar sus signos.
V: ¿Señor? Fácil soy mayor que tú o tengo tu edad, así que tutéame si quieras. Mejor dime Villa.
Kathery rio y negó con la cabeza mientras se ponía su estetoscopio.
Kat: Bien Villa, dime Kath, ahora déjame oír tu corazón.
Kath puso el aparato sobre el pecho de Villa y escuchó los latidos rápidos.
Kat: ¿Estás preocupado? ¿Cansado? Tus latidos...
Vi: Bueno, lo último que recuerdo es estar en mi casa y luego...
Kat: Oh claro, pues te desmayaste y una ambulancia te trajo, tus padres están en recepción arreglando tu estancia y esas cosas.
vi: ¿Qué? ¿Y qué me pasó?
Kat: Oh, solo fue a causa de tu mala alimentación, tu pobre estómago está en problemas.
vi: ¿Y me tengo que quedar? Tengo clases y...
Kat: Te quedaras por tres días para observarte.
Vi: Y tú estarás como mi doctora.
Kathery levantó la mirada y sonrió en dirección a Villamil.
Kat: Es una pregunta.
Vi: Más bien una petición.
Kathery sonrió y miró a Villamil.
Kat: Tal vez lo sea, aunque suelen decir que soy una doctora bastante dura.
Vi: A mí me pareces linda.
Kathery lo miró con los ojos abiertos.
Kat: ¿Cómo?
Vi: Sí, osea, una linda doctora.
Kat: Claro. Descansa Villamil, por cierto, supusimos que no querías que todo el mundo se enterara de que estás aquí, así que tus padres firmaron la petición de Privacidad que nos obliga a no decir nada acerca de ti a cualquiera fuera del hospital, pensé que querrías saberlo.
Villa sonrió y se recostó en la cama sintiéndose un poco agotado.
Vi: Gracias Kath.
Kathery asintió y salió de la habitación, una vez que ella se había ido el tomó su celular ubicado en la mesa que tenía a un lado y mando un mensaje a su grupo de amigos.
Vi: Estoy en el hospital Ángeles, vengan a verme después de clases, perros.
Villa rio y se arrepintió luego de ver la hora del mensaje: eran las 4:00 a.m, no existía la posibilidad de que alguno de esos tres estuviera despierto, para su buena suerte tenían un muy buen manager, la llamada de Pedro entró a su celular y sin dudar contestó.
Vi: ¿Bueno?
Pe: ¿Qué tragaste ahora, huevon? No puedo creerlo Villamil, si querías safarte de la escuela hay mejores formas.
Vi: Jajaja, cállese perro, ¿Qué no estabas en México con las chicas de Ventino?
Pe: Aquí estoy, tus padres me avisaron que estabas en el hospital, ¿Ya te visitaron aquellos?
Vi: Acaba de pasar y no es tan grave.
Pe: ¿Que no es tan grave? Los doctores creen que dejaste de comer a propósito, te tendrán ahí tres días para descartar depresión.
Vi: ¿Qué? Es una estupidez, no estoy deprimido.
Pe: Pues demuéstraselo a los doctores, porque si no no saldrás de ese hospital pronto.
Vi: Bien, gracias por la información, Pedrito.
Pe: Ustedes siguen siendo un dolor de trasero incluso en sus vacaciones.
Vi: Nos amas y lo sabes.
Villa rio y colgó la llamada pensando, en cómo iba a hacer ahora para convencer a sus doctores que no estaba deprimido. La doctora que lo había atendido pasó por el pasillo y el foco de Villamil se prendió, quizá no tenía que convencer a una serie de doctores, solo a ella.
...
Simón despertó a eso de las 8:00 de la mañana y escuchó una voz que provenía del baño, no reconoció la canción, pero sin duda la voz sí. Se acercó para escuchar mejor con mucho cuidado y después de la nada la puerta del baño de abrió revelando a Emma recién bañada, con el pelo mojado y una sonrisa divertida en la cara.
Em: Miren nada más, eres un chismoso.
Si: Tienes una linda voz.
Em: Uy, lo siento, ¿Te desperté?
Si: Algo así, pero entro igual, ya tenía que levantarme.
Em: ¿Tienes clase hoy?
Si: No en realidad, pero estaré trabajando en unas cosas.
Em: Oh, pues buena suerte.
Emma le sonrió y avanzó unos pasos, pero era torpe y antes de entrar a su habitación sus pies mojados le hicieron una mala pasada, ocasionando que se cayera y casi se pegara contra el piso. Casi, porque Simón había alcanzado a tomarla de los brazos antes de que tocara el piso.
Si: Ten cuidado, eres algo descuidada.
Emma rio y se puso de pie.
Em: ¿Descuidada? ¡Fue un accidente! Además no pasó nada.
Si: Porque estaba aquí.
Em: Gracias al cielo.
Simón la vio con una sonrisa y se dio cuenta de lo linda que esa chica le parecía.
Si: ¿Desayunas?
Em: ¿Cocinas?
Si: ¡Claro! Ya veras.
Emma rio y se dirigió a su habitación.
Em: Bien, sorpréndeme, iré a arreglarme.
Simón se fue hacia la pequeña cocina y mientras hacía una simple fritata pensó en lo extraño que era lo que pasaba con Emma, no podía evitar sentirse en plena confianza, como si la conociera desde siempre, como si ella fuera un libro de los que le gustan a Simón, pensó que su convivencia sería diferente, que tal vez al principio las cosas serían incómodas, o quizá no hablarían debido a sus horarios, pero en tan solo unas horas de vivir juntos ya parecían amigos y eso por alguna extraña razón le provocó una sensación desconocida a Simón cerca del pecho.
Gracias por su tiempo, voto y/o comentario.
Carol.
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Enamórate - Simón Vargas
FanficNinguno esperaba amor verdadero. El era solo una persona a la que admiraba junto con sus otros 3 amigos; le encantaba su música, los seguía en sus redes e incluso algunas veces le había seguido el paso. Ella era una fan, como muchas otras que tenía...