Carta diecisiete

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Sebas:

Se lo dije, al fin lo hice. Mamá me dijo que contaría con su apoyo, estaba más que agradecida. En la mañana le dije a Celeste, su rostro se tornó entre preocupación y asombro. Entendía que estaba preocupada y algo asombrada por la idea que tenía, pero ella estaba haciendo muy expresiva. Apretó sus labios y quiso formular unas palabras, pero no lo logró.

No comprendía bien la situación. Tristemente susurró mirando al suelo: Esta bien, sólo haz lo que creas conveniente para ti, Soph. Escucha a tu corazón, antes de despedirte de él.

Me tuvo pensando la última oración. Escuchar a mi corazón antes de despedirme de ti. ¿Qué dice mi corazón? Si quiero escuchar lo que dice mi corazón debo ser sincera con mis sentimientos. No valdrá la pena si me sigo mintiendo a mí misma, algo que ya estoy acostumbrada.

Sophia.

Un adiós no es suficienteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora