Black&White

"...tiene cierta obsesión con el chocolate"

CAPÍTULO 17

POV EMILY

No sabía muy bien lo que acababa de pasar. Pese a que aquel chico de sonrisa adorable ya se había largado, su fragancia embriagadora aún seguía cerca. Unas cosquillas me recorrieron todo el cuerpo. Genial. Ya me había convertido en una más de sus fanáticas...

Flashback

Y luego de mi dudoso y mal articulado "Yo... Claro, estaría bien...", me acercó a su pecho, envolviéndome con sus largos y fuertes brazos. Entonces su olor a "Hace media hora he tomado una ducha" se me subió aún más a la cabeza. Y pasados los tres segundos me soltó, casi dejándome caer por la falta de equilibrio tanto físico como psicológico que, en pocos minutos, había invadido mi cuerpo.

-La pasaremos genial -me aseguró, fijó la vista en su reloj, y besó mi mejilla en un cuarto de segundo.- Nos vemos luego -se despidió y desapareció.

Fin del flashback

No era de extrañar que, después de aquel momento, me encontrara mirando a la pared como una estúpida. Otra parte de mí también se sentía avergonzada por no haber logrado actuar como una persona normal.

Afortunadamente, nadie había estado merodeando por aquel pasillo hasta ese momento, en el que poco a poco los estudiantes comenzaron a salir de la cafetería para buscar sus taquillas correspondientes.

Segundos después, la campana sonó, despertándome del mar de mis pensamientos. Mierda. El recuerdo de haber dejado mi mochila en la mesa azul se hizo presente como una bofetada. Intentar navegar a contracorriente en la marea de estudiantes era considerar atractivo el suicidio, por lo que decidí buscar rostros conocidos desde mi sitio.

¡Bingo! Mi grupo de amigos cruzó el umbral. Hazel y Mack, al verme, hicieron unos cuantos gestos de "Tenemos que ir a la siguiente clase, luego hablamos", y Connor ya se había perdido de mi vista en un santiamén. Pero curiosamente, los ojazos de White me reconocieron y empezaron a intentar acercarse.

Increíblemente aquel chaval sí tenía un perímetro personal, y podía hacer su caminata de playboy hasta cualquier sitio que quisiera sin problema alguno. Como mucho, recibía miradas entusiasmadas de parte de algunas chicas. Y él, por supuesto, con una sonrisa le bastaba para que a éstas se les cayeran las bragas. Al menos metafóricamente hablando...

Cuando estuvo a unos pocos pasos de mí, estiró uno de sus brazos al frente para enseñarme mi mochila. Y no se le olvidó el guiño.

Ajá... Relájate, rompecorazones.

Tomé un aro de mi mochila y articulé un incómodo "gracias".

-Por nada, Black. Oye... ¿Preparada para cumplir con tu parte del reto? -preguntó con naturalidad.

No sabía si había escuchado correctamente. La gente gritaba y cerraba estruendosamente sus casilleros, por lo que contesté:

-¿Perdona?

-Oh, Emily, Emily... Lamento informarte que tu amiga, Mackenzie, irá al Baile de Primavera conmigo -sonrió de manera arrogante.

¿¡¡QUÉ!!? ¡¿Lo había logrado?!

No me creía que ella hubiera podido resignarse a salir con él. Noah no era el primer chico con el que saldría, pero considerando que podía llegar a ser tedioso, a lo mejor con un buen soborno habría aceptado. Pensándolo bien, Mackenzie podría haber llegado a negociar algo.

Pero lo más sorprendente de aquello era que, milagrosamente, yo también había conseguido una cita.

-Eh... Yo támbien lamento informarte de que iré al Baile de Primavera con Thomas.