-Vaya, habló Don Perfecto... - me defiendo.
-Solo quiero ayudarte.
-¿Ayudarme, cómo? - ahora estoy confundida.
Se levanta de pronto con el libro en una mano y va hacia la puerta.
-En la sala de entrenamiento dentro de diez minutos- me suelta con tono divertido.
Levanto una ceja y abro la boca para rechistar, pero ya ha desaparecido por el pasillo.
"Maldito chico manipulador... "
Me levanto a regañadientes y me meto en mi habitación.
Lo había conseguido. Fue difícil engatusar a Raven para que viniera a entrenar, pero me funcionó la técnica que me enseñó Jason de decir hacer algo sin pedir permiso y esfumarte de allí sin darles tiempo a responder. Realmente funciona...
Me siento en el suelo mientras la espero. Sin el traje de Robin, con pantalones y camiseta negros. Descalzo para moverme mejor.
A los dos minutos llega Rachel sin su uniforme, con pantalones negros y camisa negros también. Que coincidencia... Entra seria algo molesta por mi manipulación.
Reprimo una risa y me levanto serio hasta ella.
-¿Lista? - le pregunto en frente.
De pronto me da un puñetazo bastante fuerte en el brazo que no había previsto. La miro confundido apretandome el brazo con una mano.
-Eso por chantajearme- se justifica con una sonrisilla malvada y los brazos cruzados.
La miro desafiante mientras le doy vueltas al brazo dañado para estirarlo.
Parece satisfecha por mi dolor. Sinceramente, no me lo esperaba viniendo de Rachel.
Intento no ponerme nervioso y le hago una señal para que se ponga sobre la pista del simulador.
Me pongo frente a ella.
-Bien. Tu único problema es que no te esperas los golpes.
Levanta una ceja.
Me acerco a ella, sobresaltandola y le cogo los brazos poniéndolos en una postura de ataque.Retrocedo un paso.
-Venga- pongo los brazos igual que ella - atácame.
Se pone seria y bloqueo un puñetazo que iba directo a mi estómago. De pronto aprovecha la situación y mientras bloqueo el otro golpe me da otro en la cara y acierta. ¿Pero que mierda me pasa? ¿Desde cuando alguien a conseguido golpearme? Tiene que ser por ella. Estoy seguro...
-Vaya- me masajeo la mejilla- me has pillado desprevenido... - me excuso.
-Ya... - se ríe.
Esta vez la ataco yo por sorpresa, pero ella extiende una mano y me rodea con su magia. Me eleva en el aire y me suelta para caer a dos metros sobre el suelo.
Me quedo tirado en el piso y ella se acerca a mí con una sonrisilla pícara en la cara.
-¡Oye, no vale usar magia! - exclamo algo enfadado, pero me tranquilizo por arte de magia al verla reírse.
-Lo siento, es que si no no es tan divertido... - me tiende una mano para levantarme que acepto molesto.
Debimos estar bastante tiempo entrenando, por que los chicos entraron en la sala y nos miraron extrañados y estupefactos al vernos juntos.
-Vaya, vaya... Mira quiénes se han hecho amiguitos... - nos sobresalta Gar desde el corrillo que se ha formado con el fin de mirarnos.
-Ignóralos, tú sigue... - me susurra Damian al oído mientras me coge un brazo y lo retuerce para después soltarlo al ver mi mueca de dolor.
-Vaya, me alegra ver que Damian socializa por fin con alguien - comenta Kori alegre mirándonos mientras volvemos a pelear.
El comentario distrae a Damian, que voltea la cabeza nervioso y yo aprovecho para hacerle una llave rápida.
Segundos después, un Robin sorprendido tirado en el suelo y una yo orgullosa cruzada de brazos mirándolo.
Suelto una pequeña carcajada y me siento junto al chico tirado en el suelo boca arriba.
-¿Estás bien? - bromeo.
-¿Enserio? - se incorpora masajeándose la cabeza enfadado.
Vuelvo a reírme. No puedo evitar hacerlo al ver al arma humana vencida en el suelo.
-Lo siento.
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OBSESIÓN DOLOROSA
FanfictionAlgo muy extraño comienza a sucederle a Damian y Rachel, que pronto se darán cuenta de que no son tan diferentes.