22| Desde el principio

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Justin

Había ido a casa directamente del trabajo y actualmente estaba sentado en el sofá de la sala esperando a que Scarlett bajara para poder irnos al club.
—¿Cómo está Selena? —preguntó Mamá Jen.
—Está bien, la quimioterapia empezará a partir de mañana —dije y ella asintió.
—Te perdiste la diversión de hoy en la mañana —ella dijo.
—Cameron y Emma vinieron y forzaron a Scarlett a jugar tag en la casa e incluyeron a los cachorros. La casa era un desastre, pero limpiaron ellos mismos —ella dijo y yo hice puchero.
—Me lo perdí —dije enfurruñado.
—Lo hiciste —escuché la voz de Scarlett y me volteé.
Sentí que los ojos se me saldrían y que mi mandíbula caería al suelo cuando la vi.
—Este-...qu- ¡¿eres tú Scar?! —dije y me paré para darle la cara y escuché reír a Mamá Jen.
—¿Po- Por qué?, ¿Me veo rara? ¡Oh Dios Mío, sabía que no lograría lucir esto! —soltó un quejido y se cubrió la cara con sus palmas y Mamá Jen salió de la habitación para darnos privacidad.

Caminé acercándome más a ella y quité sus manos de su cara, levanté su cara por la barbilla y la besé firmemente pero lento, sintiendo electricidad por cada vena de mi cuerpo y causando una piscina de deseo acumularse en el fondo del estómago.
Agarré su nuca y profundicé el beso y escuché que gimió por lo bajo cuando mi lengua entró a su boca y me volvió más loco, si eso es posible.

Me separé abruptamente y nuestra respiración pesada ventilaba nuestras caras.
—Te ves tan caliente... me podría broncear contigo —dije y en vez de sonrojarse como siempre lo hace, se carcajeó.
—¡Justin! ¡Eso es tan soso! —dijo ella.
—¡Pero te estás riendo! —me defendí.
—Eso es porque muy soso para aceptarlo como broma —ella dijo y enterré mi cara en su cuello.
—Pero yo no estaba bromeando para nada —mi voz salió rasposa mientras le daba un beso húmedo en el cuello.
—Deberíamos irnos ya —ella dijo y yo asentí antes de separarme de ella.
Nos despedimos de Mamá Jen y caminamos al carro y nos subimos al asiento trasero.
Durante el viaje ella me iba contando lo divertida que fue la mañana de hoy mientras yo jugaba con las puntas de su cabello con una sonrisa en el rostro pues esto es lo que yo siempre había querido.
Recuerdo la época en que Scarlett me contestaba sólo con una palabra. Ha mejorado mucho todo, podría quedarme aquí a escucharla por el resto de mi vida.
No había mucha gente en el club pues estábamos en una zona de negocios y no había gente vulgar.
Mucha de la gente nos saludaba a mí y a Scarlett mientras pasábamos hasta que llegamos al bar y nos sentamos.
—Una Coca Cola y un Cosmo —le dije al cantinero y él asintió.
Muchos de los hombres que pasaban veían a Scarlett y le sonreían, haciendo que se sonrojara y yo me reía de sus reacciones.
Mi pequeña, inocente y tímida caja de felicidad.
—Ven aquí, no flirtearan contigo si saben que eres mía —le dije y le señalé que se sentara en mi regazo.
Me tomó un poco darme cuenta que la acababa de llamar 'mía' pero parece que ella no lo notó pues ella vino hacia mí, se sentó en mi regazo y yo besé su mejilla.
—Entonces, ¿qué vamos a hacer aquí? —me preguntó y tomó un trago de su Coca.
—Pues es una fiesta, vamos a bailar, por supuesto —le dije y frunció la nariz.
—¿Bailar? ¿Así? —dijo y señaló a una pareja perreando en la pista de baile de una manera muy necesitada y yo reí cuando vi lo asqueada que estaba Scarlett.
—No, esa es una manera asquerosa de hacerlo, no exactamente así —le dije.
—Pero yo ni sé bailar así —dijo y yo alcé las cejas.
—¿Para nada? —pregunté y ella negó con la cabeza.
—Nunca antes había venido a un club —ella dijo y yo agrandé los ojos.
—¡¿Nunca?! —exclamé y ella asintió.
—Estás tan llena de sorpresas, Scar... —dije.
—¿Buenas o malas? —ella dijo y sorbió con el popote antes de disculparse por eso.
—Buenas, por supuesto, pero no sé cómo clasificar nunca haber ido a un club antes de esto.
—Emma trató de llevarme una vez pero me escondí en mi casa esa noche para que no me arrastrara ahí —ella dijo y yo me reí.
—¡En serio! ¿Entonces cómo accediste a venir ahora? —le pregunté.
—Porque tú estás conmigo —ella dijo mientras jugaba con el popote y yo sonreí.
—¿Entonces vas a bailar conmigo ahora? —le pregunté.
—No sé nada —dijo ella.
—Te enseñaré qué hacer —le dije y ella apretó sus labios.
—¿Crees que puedo hacerlo? —ella dijo y yo asentí dándole un beso en los labios.
—Está bien, entonces trataré —ella dijo y yo me mordí el labio antes de hacer que se parara y yo también pararme.
—Vamos —dije y la guié al centro de la pista de baile.
Le di la vuelta y la acerqué a mí haciendo que su espalda tocara mi torso.
Inhalé profundamente después de mover su pelo a un lado de su cuello y olí su aroma.
Mis manos se movieron por su cuerpo hasta que llegué a sus caderas y las puse sobre las mías
—Ahora mueve las caderas al ritmo de la música y en sincronía con las mías —mi voz salió más ronca y mis ojos se cerraron solos cuando se empezó a mover.
Me mordí el labio y guié sus caderas con mis manos mientras veía que su pecho subía y bajaba.
Apreté más fuerte sus caderas y gemí en su oído sintiendo cómo se tensaba.
Podía sentir que la excitación hacía que mis jeans se apretaran mientras ella seguía moviéndose.
Mi mano bajó y flotó sobre sus muslos abajo del dobladillo de su falda antes de agarrarlo.
—Justin —su voz estaba entrecortada y no pude evitar rozar más fuerte nuestras caderas haciendo que jadeara.
Probablemente podía sentir lo excitado que estoy.
¿Debería parar o no? Pero he querido esto por tanto tiempo y todo está yendo bien en este punto.
Excepto Selena.
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—¡Sorpresa! —salté ligeramente cuando escuché una voz conocida y alcé la vista para ver a Nina.
—Mierda Nina, ve más despacio —dije y me separé de Scarlett para abrazarla.
—¡Hey, Scarlett! —ella dijo y la abrazó.
—Espero no haber interrumpido algo. —dijo burlonamente y la miré mal porque yo sabía que ella sabía lo que había interrumpido.
—Umm no... —dijo Scarlett.
—¡Vamos por unas bebidas! —Nina dijo y agarró la mano de Scarlett y la mía y nos arrastró al bar de nuevo.
Acompañé a Scarlett bebiendo Coca Cola porque sentía que algo iba a pasar esta noche, y no quiero olvidarlo por la mañana.
Era alrededor de la media noche cuando nos subimos al carro para ir a casa.
Ella alzó sus cejas cuando subí la protección divisoria del coche y sonreí divertidamente antes de acercarme a ella y mover su pierna sobre mi rodilla para que cuando me inclinara sobre ella, ella se acostara en el asiento y me pusiera sobre ella.
—Justi-
La interrumpí besándola fuertemente. Sus manos agarraron mis hombros mientras que las mías se movieron sobre sus muslos, acariciando y agarrando. Su piel era más suave de lo que me había agarrado.
Tomé sus manos y las sujeté sobre su cabeza con las mías cuando empecé a besar y su cuello hasta que llegué al escoté de su vestido y de vuelta mientras ella jadeaba rápidamente.
—Justin —ella gimió cuando rocé mis caderas en las de ella y besé sus labios.
—Oh bebé —susurré en su oído y mordí su lóbulo cuando moví mis caderas nuevamente.
—Mierda... te necesito tanto, ahora —dije y enterré mi cara en su cuello.
—¿E-Estás seguro? Nos-Nosotr-
—Por supuesto que estoy seguro Scar, estamos casados, podemos hacer esto —dije y la besé de nuevo.
Sólo paré cuando sentí que el carro lo hizo.
—Supongo que estamos aquí —dije y me bajé antes que ella para abrirle la puerta.
La cargué en mis brazos estilo nupcial antes de que pudiera pararse, cerrando la puerta con el pie.
No perdí tiempo, abriendo la puerta y apresurándome a la planta alta hacia mi habitación. No dejaré que nada nos pare esta noche; me harté de esperar y sólo soñar con ella cada noche.
La puse sobre la cama y me deshice de mi chaqueta y playera antes de agacharme para quitar sus tacones y aventarlos cerca de mi ropa.
Me puse sobre ella de nuevo y lamí mis labios, para después plantar un beso firme sobre los suyos.
—He estado esperando tanto por esta noche... desde el primer momento en que te vi —ronroneé mientras la veía a los ojos y mis manos la tocaban por detrás haciendo que arqueara la espalda lo que me permitía desabrochar su vestido.
—No ha habido una sola noche desde que te conocí en que no haya soñado contigo, me vuelves completamente loco Scarlett —dije roncamente, metí los dedos a los lados de su vestido y lentamente se lo quité, añadiéndolo a la pila de ropa en el suelo.
Inhalé aire aguda y profundamente cuando la vi. Estaba usando lencería roja simple con adornos de encaje blanco y el sujetador era sin tirantes. Sus mejillas estaban rojas mientras me veía observarla de arriba abajo, una y otra vez... simplemente no podía tener suficiente.
—Mierda, bebé... —me mordí el labio antes de darle besos desde su diafragma al estómago.
Ella jadeó y sumió el estómago cuando mi lengua se deslizó por su vientre y arqueo la espalda. Subí las manos, acariciándola por los lados justo debajo de donde empezaba su sujetador. Mis manos se movieron por cada pendiente y cada curva de su torso hasta que llegaron a sus caderas y subí mi cara al nivel del pecho de ella, que seguía subiendo y bajando.
Sus ojos me veían con mucha lujuria y afecto, mientras alcanzaba atrás de ella para desabrochar su sujetador y lentamente quitárselo, viendo si me detenía pero no lo hizo.
—Eres muy hermosa —le dije mientras veía su cuerpo y lamiendo mis labios antes de tomar su pezón en mi boca y al mismo tiempo juntando y tocando sus pechos.
—Justin... —gimió y sentí que jalaba mi cabello.
Ya no pude soportar la presión de mis jeans cuando la vi morderse el labio inferior mientras pasaba la lengua alrededor de su pezón y lo mordía mientras se retorcía debajo de mí.
Repetí mis acciones en la otra protuberancia antes de ir bajando. Tuve que mantener sus caderas en su lugar puesto que se seguía moviendo cuando llegué a ellas. La sentí estremecerse cuando toqueteé con mi nariz la piel de su pelvis, justo debajo de donde empezaban sus bragas, e inhalé sobre su piel.
Mantuve mis ojos en ella mientras tomé el elástico de sus bragas de sus bragas entre los dientes, jalé de ellas y se las quité.
Sus mejillas estaban más rojas que nunca mientras separaba sus piernas y me acomodé entre ellas. Acaricié su mejilla con mi nariz puesto que su cara estaba de lado y sabía que se sentía tímida para mirarme.
Mis manos continuaron subiendo desde la parte interna de sus muslos. Sisee cuando vi que abría la boca cuando pasé mi dedo desde el medio de sus labios vaginales hasta su clítoris.
—Oh bebé... estás muy mojada —dije y ahuequé su sexo haciendo que contoneara las caderas y apretujara la almohada debajo de su cabeza.
—Justin —gimió mientras hizo la cabeza hacia atrás y sus ojos se cerraron mientras frotaba su clítoris en círculos lentos pero firmes y ella seguía moviéndose mientras que su respiración laboriosa ventilaba mi cara.
He soñado con esto, con ella de ésta manera tantas veces.
—¿Te gusta eso? —ronroneé en su oído y ella asintió.
Le di besos mojados por todo su cuerpo mientras iba bajando hasta que estuve cara a cara con su sexo y separé más sus piernas. Alcé la vista para verla viéndome mientras respiraba aceleradamente y sin ninguna advertencia envolví su clítoris con la boca y empecé a succionarlo.
—¡Ah Justin! —gimió fuertemente e hizo un puño con mi cabello dentro.
Canturreé contra ella y ella movió sus caderas contra mi boca en respuesta.
—Oh Dios mío... —ella arrulló con una voz forzada estirándose mientras yo seguía moviendo mi lengua en círculos.
—Oh, bebé —mientras me estirada para amasar sus pechos con las manos.
Me moví hacia arriba y ella ni siquiera me dio un segundo para acomodarme cuando agarró mi cara y me besó. Sonreí y me reí divertido en el beso mientras mis manos desabotonaban mis jeans y me los quité junto con los calzoncillos sin romper el beso.
—Sólo un segundo, bebé —me separé de ella y me estiré hacia el cajón del buró y busqué un preservativo. Rompí el paquete, abriéndolo con los dientes y con cuidado me coloqué el látex mientras ella veía todos mis movimientos.
—Has hecho esto antes, ¿verdad? —me acomodé sobre ella de tal manera que no la aplastara y ella asintió.
—Aunque ha pasado un tiempo —ella dijo y le besé la mejilla.
—¿Estás segura que quieres hacer esto? —le pregunté vacilantemente y ella asintió mirándome a los ojos.
Me mordí el labio y rocé su sexo con la punta de mi pene. Mi boca se abrió grande lentamente mientras entraba en ella firmemente, dejando que se acostumbrara.
—Oh, Scarlett —jadeé cuando ni siquiera estaba dentro de ella la mitad de mí y sentía que explotaría en cualquier momento.
—Jus- oh mi... —no alcanzó a terminar mientras apretaba mis hombros.
—Mierda... —suspiré cuando estuve completamente dentro y bajé la vista a ella.
—Están tan apretada, bebé —gemí cuando empecé a moverme.
Estaba mareado y mi visión era borrosa mientras me movía adentro y afuera de ella a un ritmo moderado.
—Te sientes tan bien, mierda... ¿qué me estás haciendo? —dije mientras la tomaba en mis brazos fuertemente y cerca de mí, queriendo quedarme en este momento para siempre.
En ese momento me di cuenta que no quiero nada que no sea Scarlett. Y Dios no nos juntó por error... estábamos destinados a ser... desde el principio.
—Scarlett... —balbuceé y ella abrió sus ojos para verme.
Puse mi frente sobre la de ella mientras la parte inferior de mi cuerpo se seguía moviendo para adelante y para atrás.
Debo decir esto ahora... va siendo hora que se lo haga saber.
—Te amo Scarlett... te amo muchísimo, desde el principio. —dije y sus labios se abieron ligeramente antes de curvearse en esa hermosa sonrisa por la que yo daría el mundo.
Si ella se hubiera tomado otro segundo para contestarme, hubiera llorado como un bebé.
—También te amo, Justin... desde el principio —ella dijo y lágrimas se deslizaron de sus ojos, yo sabía que eran de felicidad.
Sonreí y se las limpié antes de besarla, y dos embestidas después llegamos juntos al orgasmo mientras decíamos el nombre del otro sin aliento y me desplomé junto a ella después de cubrirnos con las cobijas.
Alejé su pelo de sus hombro y puse mi barbilla en la curva entre su cuello y su hombro mientras que la abrazaba por detrás, mi torso tocando su espalda, nuestras manos entrelazadas.
—Sólo deja que Selena mejore pronto, después empezaremos de nuevo y recuperaremos el tiempo perdido, ¿de acuerdo? —le dije y ella asintió.
—Buenas noches, Scar —dije y besé su hombro.
—Buenas noches, Jay —ella respondió.



Jelooous venimos con un nuevo capítulo traducido por la hermosa MarianaGoJu
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Arranged Marriage → j.b → spanish versionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora