Capitulo (16)

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Tengo que decirlo, me encanta el poder patinar con él sobre el hielo.

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Caminar, hablar y de ves en cuando reírnos por una estupidez, era lo único que hacíamos al dirigirnos a aquel lugar mientras que estábamos tomados de las manos.

─si, de echo─ rió pero de repente se puso serio─Matt, debo de decirte algo─ me miro aun con su semblante serio, haciendo que mi piel se erizara.

─¿que pasa?

─ya hace mas de un mes que no me baja─ me dijo en un tono de miedo, o eso parecía.

Por instinto le iba a decir que no se preocupara, que estaba aquí para él, pero caí en cuenta de que.... él es hombre, me quede como una piedra, soy un completo tarado, creo que me esta afectando el estar mucho tiempo con mujeres, escuche una carcajada y le mire, se estaba riendo a carcajadas como si su vida dependiera de ello, le mire mal pero esa expresión cambio a una sonrisa combinada con un poco de maldad.

─te dije que debíamos usar protección─ me cruzo de brazos.

─¡oh si!─ se puso en frente mío ─perdón, pero mis amigos machos pelo en el pecho no nos podían dar protección─ hice un puchero y el volvió a reír, pero esta vez me le uní ─Eres muy malo para esto, ¿sabes?

─si, no debes de recordarmelo

Y después de esa charla tan normal, seguimos caminando hacia donde el quería llevarme, al estar ya enfrente de aquel edificio nos adentramos, era una pista de patinaje en hielo pero estaba solitario, sonreí de forma exagerada, puesto de que siempre me gustaba ir a estos lugares, para mi, un lugar perfecto para nuestra primer cita.

─se nota que te gusto la sorpresa─ le mire y asentí ─entonces, ¿que esperamos?

Me tomo de la mano cuando ya teníamos los patines puestos, y nos adentramos en la pista, comenzamos a patinar, ambos a diferentes direcciones, pasaron horas y nosotros seguíamos allí, en un instante por poco me caía, de no ser por él que me tomo antes de tiempo y me abrazó, duramos unos minutos en esa posición para después que él me soltara y me tomara de las manos, para así empezar a girar, dando el paso a que el hielo se empezase a desmoronar en el aire dando un efecto como si estuviese nevando, empezamos a detenernos de a poco así hasta terminar parados en medio de la pista, ambos nos miramos a los ojos mientas que el efecto de estar nevando seguía, con las luces que daban un leve efecto de estar presentes, él se empezó a acercar hasta sentir que nuestros labios se rosaran y nuestras respiraciones chocaran, nos juntamos creando un tierno beso el cual fue destruido gracias a la falta de aire.

─Te amo, y mucho─ me dijo, yo con un leve ardor en mis mejillas le abrace.

En estos momentos me sentía la persona mas especial de ese lugar, pues, le tenía a él.

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