Soy como tú. (Kevin)

3

En la clase de quimica no había mucho que hacer, tome uno de los ácidos que se encontraban debajo del armario, el profesor diario se encontraba leyendo una de sus revistas sin ponerle atención a los alumnos.

Tome la botella, y fui directo con Aurora, solo quiero hacerle una pequeña broma.

—Aurora, ¿quieres lavarte las manos
con este jabón?—le sugiero.

—¿Piensas que soy estupida?—me mira con molestia.

—No lo pienso, lo eres. Te pediría que lo hicieras, pero sin las manos quedas inútil—dejo la botella en cualquier parte y me quedo con ella.

—¿Qué estas haciendo? ¿Para que es eso?—preguntó con curiosidad, ella solo mezclaba los líquidos.

—Para saber quien se atrevería a preguntar, ¿Contento?—responde sarcásticamente. Debería enojarme, o más bien preocuparme. No lo sé, parece que la verdadera aurora está saliendo de esa niña con sonrisa tonta que simula ser tonta—. Perdón,Tuve un mal día—esta vez me habla suave, la Aurora que conocí ha vuelto.

—No tengo la culpa de eso.
—Eso ya lo sé. No creo que te interese saber. Da igual, no quiero molestarte.
—Tienes mucha razón Aurora, no me interesa en lo absoluto—respondí de la misma forma sarcástica. Ella soltó una pequeña risa—, ¿Por qué te ríes?

—Eres la persona más honesta que he conocido. Me agradas—me comentó.

—Tu a mi no.

—Eso ya lo sé—tenía una sonrisa satisfactoria en su rostro.
—¿Y por que sigues hablándome?
—Tu llegaste a mi lugar.

Iba a decir algo más, pero quedé en blanco, ella siempre sabe justificarse, mientras solo miraba su cara para poder formalizar algo en mi mente. Ella solo me sonreía con un aire de victoria.

Solo volví a mi lugar, la odio. Es la primera persona que me deja sin habla, esto no debería quedarse así y menos con una persona como ella. Es lista, lo es.

Lo que quedaba de la clase solo me dediqué a observarla, ya no parecía la típica niña sonriente, feliz de la vida y sin trajes ridiculos, es cierto, ¡hoy no se vistió como payaso!

Se veía como cualquier chica, bueno no cualquiera, ella no es cualquier chica. Solo que me sorprende este cambio. Por alguna extraña razón, no quiero admitir que intencionalmente lo hice, por que eso sería tonto, me fijé un poco en su cuerpo. Era la primera chica con la que me relacionaba, podría llegar a hacer algo más que solo pedirle que haga mi tarea.

Al tocar el timbre que señala las finalizaciones de clase, ella salió sin prisa, no dude en seguirla, me llene de curiosidad, quise ver como es su vida cotidiana.

Ella camina por el mismo patio que yo para salir de esta escuela. El mismo grupo de ayer la detuvo, a mi distancia, pude escuchar un par de cosas, la chica hablaba en voz alta, ahora su brazo estaba vendado.

—Tienes los ovarios para aparecerte aquí cuando te dije claramente que no quería volverte a ver aquí—dice la chica rubia, es algo gorda y cara de esa película, tronchatoro.

Aurora intentó pasar a un lado, ignorándola por completo. Indignada, volvió a cruzarse en su camino.

—Si quieres pelear, búscalo con alguien más. Yo no—ella quiso proseguir con su camino. De nuevo la detuvo, tomándola de la mochila y jalándola hacia atrás, Aurora no respondió de una buena manera.

Se lanzó sobre ella nuevamente, provocándola caer al suelo, Aurora sacó algo de su mochila, y tomó el cabello de la rubia. Después comprendí más la escena, le estaba cortando el cabello. Ella era tan fuerte que los movimientos bruscos que hacía la gorda rubia.

Después dejo de cortarle el cabello, tomo sus cosas rápidamente y se fue corriendo, la rubia ordenó que la siguieran.

Después de eso, ya no supe donde ella estaría. Por un lado me preocupaba, eran como unas cuatro chicas contra Aurora.

Decidí dejar eso de seguirla, y todo eso. Dejo de interesarme. Ahora mismo está recibiendo una buena paliza, aunque lo dudo, es muy fuerte para no defenderse de una buena manera.

Termine mi recorrido en el patio y los mechones de cabello de la rubia gorda seguían en el suelo. Aurora sabía como defenderse, mañana la veré con otros ojos.

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Aurora
Actualidad

Han pasado meses des de la última vez que lo vi, yo no me di cuenta de lo que pasaba, pero por alguna razón no sentía miedo. Era todo lo contrario, incluso lo amé más y no sé por qué.

Mi hermano mayor me hizo el favor de traerme a la correccional para ver a Kevin, mi hermano no le diría a mis padres si yo no les decía sobre las raras reuniones que tienen en casa cuando no estan.

—Separé los brazos y las piernas—dijo el guardia. Hice caso a su orden y este comenzó a pasar el detector de metal. Aunque sentía demasiado calor, que por los nervios llegaba a sentirme de lo peor. Aunque los nervios ahora no tenían mucho que ver.

Después de la revisión, el guardia me escoltó hasta la sala de visita. Me senté cuidadosamente, como si fuera a quebrarme con un mal movimiento. Ya sentada, coloqué mis manos juntas sobre la mesa, mis manos sudaban, como en la escuela cuando me gustaba y él no lo sabía, en su casa, aquella noche.
La habitación era silenciosa, algo oscura y sólo con la iluminación que entraba por la ventana blindada.

Sonreí por haberlo recordado, mis mejillas ardían por el rubor natural que mi rostro producía. Escuché la puerta metálica siendo abierta. Trague saliva y apreté mis labios. Respire hondo y exhale el aire en mis pulmones.

Se sentó frente a mi, su mirada se conectó con la mía. Era demasiado penetrante, pero bueno, yo ya estaba acostumbrada a que me mirara así.

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Lo volví a publicar por una falla xd