Decir que habíamos sido el mejor centro de atención de la escuela se quedaría corto para todo lo que sucedió. De milagro no habían muertos en la zona porque los gritos si habían saciado el permanente silencio de la escuela.
Había sido el escandalo más grande que dio a comer de la boca a todos hasta horas más tarde justo cuando salía del colegio. Minie se sentía intimidado y yo tenía un desacuerdo horrible con mi cabeza, adoré eso, adoré ser la chica de Jimin, adoré su besó, su dedicación, cariño, todo lo adoré, objeción: No era realmente una pero odiaba ser juzgada por bocas ajenas.
Caminaba pensando en eso junto a Minie, de la mano, apenas y habíamos salido del colegio hacía un rato.
- ¿Estás bien?- Minie rompe el silencio, me giro a verle atontada. Su mirada curiosa reposa sobre mis ojos.
- Sí, estoy bien. ¿Por?
- Estás callada desde salimos, caminas como si no estuviera a tu lado. ¿Te doy vergüenza?- eso último me partió el corazón, jamás en mi vida pensaría eso.
- ¡Claro que no Minie!- me precipité para hacerle saber. Incluso dejé de caminar- Jamás vayas a pensar que me das vergüenza, nunca, nunca digas eso ¿¡me oyes!?- tomé sus mejillas escachándolas, haciendo que estas se amontonaran. Él asintió incómodo por el apretujón y yo sonreí sin despejar mis labios.
- Aún así siento que algo pasa. Mi instinto canino me lo dice.- solté sus mejillas despacio, el me miró preocupado.
- Pues... no es nada de eso sólo... no estoy acostumbra a ser el centro de atención y menos que las personas admiren de lo que puede ser mío. Además estoy en la boca de todos y eso es... incómodo.- me encogí un poco de hombros mientras metía mis manos en los bolsillos de mi abrigo.
- Lo siento- dijo apretando sus labios. Lo miré confundida- Por hacer que fueses centro de atención y poroncomodarte también.
- Minie por dios, no me molesta. ¿Acaso sabías sobre el escándalo qué se formaría? No tienes culpa de nada tonto- le di una beso en la mejilla rosa.- No pienses en eso- asintió un poco incómodo - ¿Quieres pizza?- le pregunté y el asintió, tratando de levantar sus propios ánimos.
Caminamos juntos hacia una pizzería bastante cerca, pasando un agradable rato mientras esperábamos el pedido y devorábamos hambrientos. Salimos de ahí hacia un puesto de helados en la calle. Luego de pagar miré por la calle principal, las decoraciones navideñas estaban comenzando a resplandecer. Las guirnaldas adornaban los establecimientos y las luces los locales.
- Dios, no me había acordado que estamos en épocas navideñas- musite abriendo los ojos mirando los alrededores. El atareo de los días no me deja ni apreciar el calendario.
- ¿Navideñas?
- Sí, Navidad, es cuando se acerca nuevo año. Todo se decora de rojo y verde, normalmente. ¡Debemos poner nuestro árbol de navidad!
- ¿Árbol de Navidad?
- Ajá, es un árbol que se decora con con bolas, zapatos, caramelos y esas cosas- Jimin sonrió.
- ¡Quiero hacer eso! ¡Quiero decorar un árbol de Navidad!- miré mi reloj de la muñeca, apenas y eran las seis de la tarde, hoy no tenía deberes así que podríamos armar el árbol.
- Pues vamos a casa y armemos ese árbol. Aún nos da tiempo- Le jalé casi como si corriéramos.
Entusiasmados por la idea llegamos a casa lo más rápido posible. Minie organizó un poco la sala mientras yo iba al armario de mi habitación y buscaba en el fondo los decorativos de navidad y el árbol, trayendo las cosas de apoco y dejándolas en el centro.
Suspire al terminar de dejar todo sobre el suelo observando la cantidad de cosas. Sinceramente ni me acordaba si el año pasado llevaba tanto entusiasmo de haber armado un árbol de navidad. Apenas y había cogido los decorativos de la casa y los había dispersado. No es que no lo hiciera por pereza, solo que no requería de tiempo.
Jimin vio todo desde la alfombrilla de pelos donde se sentaba de piernas cruzadas, tomó una pequeña caja llena de caramelos ficticios de navidad, olisqueo e mordió levemente.
- Esto no se parte- Gruñó.
- No es verdadero. Es solo ficticio.
- ¿Y los de verdad?- Me miró con ojos esperanzados.
- Podremos bajar pronto y compramos algunos para que los cuelgues- Su mirada se lleno de un brillo instantáneamente.
Organicé todo por bultos y desarmamos las piezas del árbol para armarlo, ocupándome de ello rápidamente. Aquella estructura de casi un metro ochenta y cinco comenzó a llenarse de decorativos puestos por el mismo Jimin después de que enrollara las luces correctamente. Se fue llenando de un intenso rojo y verde con muñecos navideños.
Los demás suplementos decoraron la casa llenándola de mucho más espíritu navideño.
- Wah~ Minie, el árbol te a quedado precioso- Revolví su cabello platino, el sonrió y me abrazó.
- ¿A qué sí? Soy muy organizado.
- Mucho, has dejado los espacios perfectos para los caramelos.- Observé bien el árbol.- Vamos a comprar caramelos.
Le tomé de la mano hasta la puerta, donde busqué un abrigo grueso con el que cubrirlo para las fuertes brisas de invierno. Me vestí de igual forma y abandonamos el lugar hacia la tiendecilla de comestibles a unas cuadras. Guardando su mano en mi bolsillo dándole calor nos adentramos en el establecimiento. Los estantes de comestibles llovían en diseños navideños. ¿Cómo no pude darme cuenta que la época era tan notoria?
- Tomate tu tiempo en buscar las que más te gusten. Yo iré a por las galletas- le dejé sólo mientras cogía hacia los estantes de galletas perdiéndome en la colorida estantería. Busqué entre los paquetes hasta dar con los de dibujos navideños. Encestandolo en la cesta me decidí a buscar a Minie, encontrando en la vuelta unas en forma de perros. Tomé el paquete en mis manos y sonreí. Eran tiernos.
Las paletas en forma de árbol, los chocolates como bolas de decoración, los panqueques y toda aquella diversidad de comestibles baratos llenaron el carrito, ya que la cesta había caducado de espacio.
- ¿Ya has tomado algo?- me le acerqué, el se giró con un puchero rellenando sus labios. Sonreí por su rostro confuso.
- Todos son lindos- me fijé en sus brazos llenos de caramelos con formas, reí a carcajadas porque si agregaba uno más iban a caerse al suelo.
- Pues tomalos todos, ¿escogiste uno de cada uno?- frunció el ceño, miró sus brazos y asintió.- Entonces lanza los aquí y vayamos a cobrar.
Dejó todo en la carreta y fuimos a los cobradores, saliendo de la tienda con cuatro bolsas llenas de comestibles. Caminando casi congelados por la calle llegamos al edificio. Minie se resbala justo antes de entrar al elevador.
- ¿Minie estás bien?- Sus ojos cristalinos me dan por preocuparme, pero al escuchar su estruendosa sonrisa me quedo atónita.
- Jamás había caído de trasero. ¡Esto es divertido!
¿En serio Minie?
Mo_chu12🎈
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𝐏𝐮𝐩𝐩𝐲, 𝐈𝐭'𝐬 𝐓𝐡𝐚𝐭 𝐘𝐨𝐮? • [𝐏.𝐉.𝐌]. 𝐅𝐢𝐧𝐚𝐥𝐢𝐳𝐚𝐝𝐚
Fanfiction-¿Pu-pp-y e-res tú? -le dije mientras tartamudeaba incapaz de hablar. Él solo me observó incrédulo y arrascó su cabello platino dudoso. ⚠ Apartado distribuido por la plataforma de Wattpad. Todos los derechos reservados a la autora. No se permite qu...