Domingo 31 de Diciembre del 2017.
10:45 p.m
Me encontraba con mi familia, riendo y bebiendo de una sidra de manzana que había comprado mi tío que venía de visita junto a su esposa.
"Tiene sólo un 10% de alcohol, no debería ser un problema" mencionó.
Yo estaba sentada en la sala, sostenía mi celular con mis manos y mensajeaba con mi chico. Me contaba que había venido de visita a esta ciudad y estaba cerca, habíamos planeado vernos, pero lamentablemente no se pudo, yo no pude. Me duele estar así, me siento impotente.
Mis ojos de repente comenzaron a pesarme y poco a poco me fui quedando dormida.
11:27 p.m
Escuché una voz a lo lejos, llamándome.
- ¡Alejandra!
- Mande. - respondí al llamado.
- Adriana está afuera. - me dijo Fernanda, mi hermana.
- ¿Qué? - pregunté extrañada.
Salí de mi casa y efectivamente, se encontraba en las afueras del patio.
- Ven a mi casa. - propuso.
- ¿Estás loca?
- Te tengo tu regalo de año nuevo.
¿Adriana? ¿dándome regalos? Esto es nuevo y extraño.
- ¿Regalo para mi? Extraño. - solté de repente.
- ¡Oye, idiota! No lo digas como si nunca te diera nada. - replicó, juntando sus brazos para obtener calor.
- Pues...
- Anda, vamos a pedirle permiso a tu madre.
- No nos dejará, Adriana...
- ¡Vamos!
Sorpresivamente me dió el permiso, así que en ese mismo momento nos dirigiamos a casa de Adriana, no quedaba lejos. Estábamos en su auto.
- Muy bien, tienes que ponerte esto. - dijo, y señaló a un pañuelo.
- ¿En dónde, para qué o que? - respondí a la defensiva, era muy extraño todo.
- Sí, pontelo, mira. -dijo y me quitó el gorro que llevaba puesto y mis lentes, me acomodó el pañuelo de tal manera en la que no pudiera ver- Yo cuidaré tus lentes.
- Esto es demasiado raro.
- Te gustará. - dijo, y soltó una risita.
***
- Sé cuidadosa, no te vayas a caer. - me advirtió Adriana, sosteniendo mis manos.
- Si me caigo, te caes conmigo. Más te vale que me cuides bien. - amenacé.
- Mira, te quedarás aquí.
- Espera, ¿qué? ¿me dejarás aquí, ciega y sola?
- ¡Espera! Vendrá un... conocido para mi a verte.
- ¿Conocido para ti? Adriana, dime lo que pasa ya. - dije enfadada.
- Te gustará, yo... sólo quiero que sepas que me gusta verte feliz, y me gusta más verte así si contribuí a esto.
Escuché como sus pasos iban alejándose de mi.
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La adolescencia de una chica mexicana
Teen FictionExperiencias... Aprendizajes... Una chica normal, de origen mexicano, de tan solo 16 años de edad. Se enfrenta a la etapa mas dura de su vida. La etapa donde todo ser humano quiere regresar y tomar las decisiones de nuevo. La etapa justo donde oc...