Aprendiendo de mi pelirrosa |SasuSaku|

Capítulo 18

—Tienes que saber algo que les he estado ocultando a todos.

—¿Eh? ¿De qué hablas? —parpadeó un par de veces, estaba confundida, la conversación había dado un giro repentino.

—¡Sakura! —la llamó Ino, quien estaba a unos metros de ellos—. Tenemos que ir a clase.

—Ya voy —regresó la mirada a Sasuke—. Podemos hablar después de clase —el azabache asintió y la pelirrosa caminó hasta su amiga, para después marcharse.

Después de que terminaran las clases, Sakura se acercó a sus amigas para contarles lo sucedido con Sasuke.

—¿En serio hablarás con él?

—Al parecer es algo importante, se veía bastante serio.

La rubia negó ligeramente con su cabeza, por supuesto no estaba de acuerdo, pero confiaba en su amiga.

—Si nos necesitas, llámanos.

—Ten cuidado —le pidió preocupada la rubia.

—Sí, nos vemos en un rato.

Hinata e Ino se marcharon enseguida, junto a ellas iban Naruto y Sai.
La pelirrosa se dirigió al estacionamiento, donde Sasuke la esperaba, al llegar lo encontró recargado sobre su auto. Caminó sin prisa hasta él, inevitablemente sentía alegría, hace tiempo que no hablaban pacíficamente, y a solas.

—Sasuke-kun...

—Hola. ¿Tus amigas ya se fueron?

—Sí.

—Bien —suspiró—. De lo que quería hablarte hace rato... —le recordó—. Es algo muy importante, y creo que nadie, a excepción de Karin, lo sabía.

—¿Qué es? —preguntó con cierto miedo.

—Yo...

—¿Si? —insistió.

—Nunca tuve un noviazgo con Karin.

Pudo darse cuenta que Sakura abrió completamente sus ojos, y su boca levemente se abrió. Tal como pensaba, se tardaría en digerir esa información. Habían transcurrido algunos segundos, y aún ninguno de los dos decía algo.

—¿C-Cómo? —apenas pudo preguntar—. Pero, ustedes...

—Era un plan para que Karin regresara con Suigetsu, solo estábamos fingiendo, nunca estuve enamorado de ella. Todo fue una mentira.

Podría pensar que lo que decía era mentira, pero lo había dicho de una forma tan seria que estaba confundida.

—¿Cómo sé que eso no lo inventaste? —lo miró entrecerrando los ojos.

—¿En serio crees que mentiría?

—Bueno, no lo sé.

—Karin recién regresó con Suigetsu, si no me crees a mí pregúntale a ella.

Sakura soltó un suspiro abrumada. ¿Qué necesidad tenía de mentir? Él no era así.

—Es solo que... Han pasado muchas cosas, y tú te has comportado tan indiferente con nosotros, tus amigos.

—Fue difícil guardar el secreto, las cosas se alteraron, Ino se alteró —remarcó la última parte, había sido duro soportar a la rubia.

—No puedes culparla, ella solo trata de cuidarme.

—Lo sé, pero no voy a hacerte daño —la miró a los ojos—, quería que supieras que no estuve con Karin, que estoy enamorado de ti, nunca dejé de estarlo.

Pudo sentir como se le revolvía el estómago, sus mejillas se tornaron de un rojo intenso que no pasó desapercibido por el azabache.
Decidió mirar a otra parte, estaba tan avergonzada por lo que había dicho.

—A decir verdad —llamó su atención nuevamente—, también fue difícil para mí no decirte lo que sentía, sabía que podía perderte —se acercó a ella y puso una de sus manos sobre su mejilla—. Quiero que te sientas segura, que vuelvas a tenerme confianza, porque lo que yo quiero es cuidarte y quererte.