Mi Jefe el Insípido

Diecisiete

-Tranquila- dije abrazándola con sinceridad

-Vamos a sentarnos en la sala- hablo Mäel un poco más sereno Giselle se sento junto a su madre en un sofá mientras que en el otro nos encontrábamos Mäel y yo.

- ¿Por qué no me dijeron que eran hermanos? –pregunte con curiosidad

-Bueno recuerdas que te había contado de que tenía una hermana que no veía en mucho tiempo- comento Mäel

-Si- dije mientras recordaba la charla

-Pues ella se había quedado en Italia para terminar sus estudios y como ya lo hizo vino a Barcelona para estar juntos todos. Como despedimos a Lucia no quería que continuaras sin una secretaria así que le pedí que trabajara a tu lado pero que no dijera su apellido ya que todos la tratarían diferente por ser la hermana del dueño y por mi lado quería que ella experimentara lo que es un trabajo en una empresa- comento el sonriendo

- ¿Pero porque no decírmelo? – dije mirando a Giselle

-Bueno primero era por eso después cuando iba a contártelo paso lo que paso te fuiste a Italia con mi hermana y para poder saber de ti ya que alguien no contesto mis llamadas me toco investigar por medio de mi hermana- dijo el muy sonriente

- ¿Por qué se trataban por mensaje como si no se conocieran? – pregunte incrédula

-Plan maléfico de Mäel- dijo Giselle alzando sus manos

-No me puedo creer que me engañaron- dije mientras pensaba en todo lo que me daba señales de que eran hermanos

-Además mi hermano siempre me preguntaba por ti y como estabas- dijo ella en su defensa

-Así que me traicionaste y contaste todo- dije mirando a Mäel sorprendida

-No necesito contarme para enterarme que te habías besado con un periodista si te volviste la reina de la primera portada- comento serio

-Bueno usted se lo busco- hable sonriendo

-Lía sé que mi hijo es un poco mujeriego, pero sé que ustedes dos duraran mucho juntos así que tengan paciencia ya que por lo que veo son del mismo temperamento- hablo su mama con una sonrisa sincera

-Gracias señoras- dije sintiéndome mal ya que los dos no sabíamos que era esto

~

Tres meses habían pasado en donde continuábamos con la farsa de que éramos novios.

Actualmente llegamos a un punto en donde siento que todo esto es real.

Mäel cada tarde me busca en la oficina para ir a cenar juntos mientras hablamos de cosas triviales y nos conocemos cada día mas.

El no olvido de cada semana regalarme un ramo de flores distintas.

Las primeras llegaban a la oficina sin ningún mensaje, pero después comenzó a dejar una tarjeta de su parte las cuales guarda en mi lugar secreto de la oficina.

Con Giselle por nuestra parte aclaramos sobre lo que me había engañado, pero para que enojarme con ella cuando era mi única amiga.

Anastasia por su lado continuaba en la empresa ya que trabajaba para poder pagar lo que se había robado si ella se va de la empresa será arrestada.

-LIA LIA- grito alguien mientras entraba a mi oficina sin tocar la puerta

-Dígame- dije con la educación que me caracterizaba

-Tengo un chisme grande- comento nerviosa mirando hacia la puerta

-Habla- dije seria

-Bueno según lo que dicen por el pasillo el jefe en la fiesta de hoy le entregara algo de una joyería ya que se le vio con una bolsa carísima- comento mientras mi corazón latía rápidamente