Mi Jefe el Insípido

Ventinueve

No podía creer que sin dejarme que le explicara bien las cosas ya él una vez más me había sacado de su vida sin pensarlo seriamente.

- ¿Sucedió algo malo? – pregunto Mark cuando logramos sentarnos en la mesa que nos correspondía

-Me quedé sin trabajo y sin quizás mi pareja- dije mirándolo directo a los ojos

-Lo siento no quería que nada de esto terminara así y menos que tu terminara lastimada- dijo el sincero y pude ver como un Alex serio se acercaba a mi

-Veo que no soy el único que sufre por la familia italiana- hablo el haciendo que me colocara de pie para el sentarse en mi silla y hacer que me sentara en sus piernas como muchas veces teníamos que andar en el auto sentado cuando salíamos de fiesta juntos

-Giselle me salió con gilipolleces cuando no soy su pareja- dijo el enojado

-Sera mejor que regresemos a la casa para empacar e irnos hoy mismo si es posible- dije mientras mi miraba viajaba entre Alex y Mark

-Por mí no hay problema ya que hoy mismo debía regresar a la empresa ya sabes que no la puedo dejar mucho tiempo sola- dijo el riendo

-Bueno nos vemos en el aeropuerto en minutos- dije mientras me ponía de pie haciendo que los dos chicos de igual manera siguieran mi gesto

Intente mirar a Mäel, pero no lo podía ver.

Cuando salimos del lugar claramente nos tomaron fotos a los tres y nos hacían preguntas que no contestaríamos.

Mark se fue en su auto mientras yo me iba con Alex.

-No sé si esos italianos de pacotilla le gustan tener las cosas a su manera y como ellos digan, pero si es así, aunque me guste Giselle prefiero terminar lo que no comenzó- hablo el mientras apretaba el guía del auto

-Olvidemos eso y disfrutemos de Nueva York como los viejos tiempos- dije sonriendo

Por dentro me moría por la separación dan abrupta, pero debía continuar no podía permitir que le insípido del italiano me lastimara de esta manera.

Al llegar al piso comenzamos a llenar todas nuestras maletas sin dejar nada en la casa que no fueran muebles.

-LIA VEN SUBETE A MI MALETA QUE NO QUIERE CERRAR- grito Alex desde su habitación.

Con cuidado de no pisar el traje que tenia de la fiesta y caerme llegue así habitación.

-DIOS SI LLEVAS AHÍ TODA UNA TIENDA DE ROPA- dije ayudándolo a cerrarla

-Calla tonta- respondió riendo

Cuando logramos cerrarla realmente parecía que en cualquier momento explotaría.

- ¿Por qué llevas demasiadas cosas? – pregunte insegura

-Bueno recuerda que allá tengo mi apartamento de la universidad por lo cual no tengo nada de ropa porque vendí la ropa que tenía en Nueva York y pienso dejar algunas ya que por lo que veo quizás nos tardemos en regresar- dijo el sincero

-Creo que tienes razón- dije regresando a mi habitación

Si se preguntan no me quitaría el traje ya que me siendo como una princesa y no quiero dejar de serlo hasta que no salga de España.

-Vámonos tía que ya Mark nos está esperando- dijo Alex moviendo las maletas a su auto el cual se quedaría una semana en el aeropuerto hasta que mis padres lo buscaran

Realmente me daba pena salir una vez mas de mi nido ya que ahora era el momento en que Alex y yo nos encontrábamos progresando monetariamente y ahora debíamos regresar a un lugar sin tener un auto o un lugar estable. Bueno por mi parte ya que yo vendí mi apartamento así que debía conseguir un piso donde quedarme.