"Señorita, su brazo está muy mal, la tenemos que poner en otro cuarto, por favor entienda," me dice la enfermera.
"No me importa mi brazo, tengo que asegurarme que él esté bien!" grito entre llantos, intentando zafarme del agarre de las enfermeras.
De pronto, siento que me injectan algo, mis ojos comienzan a sentirse pesados y se empiezan a cerrar poco a poco. En menos de un minuto, caigo dormida.
Cuando desperté, estaba acostada en una cama blanca, conectada a una maquina y con el brazo vendado. Aún me quedaba un poco del efecto de la medicina para dormir, así que me costó mucho trabajo levantarme.
"No no no, quédese acostada," me dice la enfermera.
Le hago caso sólo por que aún tenía el efecto de la medicina, pero en cuanto se me pasó, pude sentarme en un instante. Me quejé del dolor ya que uno de mis brazos está cortado y el otro tiene la aguja que está conectada al suero.
"Mario! Dónde está Mario?!" pregunto mientras intento bajarme de la cama.
"Habla del muchacho que venía con usted?"
"Sí, él! Dónde está?! Necesito verlo!"
"A él lo llevaron a otra sección del hospital ya que su caso es muy grave," me explica.
Comienzo a llorar.
"Necesito verlo..." dije en voz baja mientras sollozaba.
"No se preocupe, en cuanto su brazo sane, podrá verlo," me asegura.
"Cómo está tan segura que él seguirá vivo cuando mi brazo sane?" le pregunto.
Ella se queda callada.
Exacto. Como saber si Mario seguirá vivo cuando pueda verlo? me digo a mi misma.
No había forma de salirme teniendo una aguja en mi vena y una enfermera cuidándome. Lo único que podía hacer era rezar cada día por que Mario estuviera bien. Así es como me la pasé las semanas que tomaron para que mi brazo sanara, pidiendo que todo saliera bien.
"Buenos días, Yuliana," me dice la enfermera.
"Buenos días, Carmen," respondo.
Con el tiempo, aprendí a llevarme bien con todos en el hospital. De hecho, Carmen fue la que me trajo una consejera para que me ayudara y se podría decir que sí me ayudó bastante, por eso se lo agradeceré toda mi vida.
"Te tengo una gran noticia," sonríe.
"Y cuál es?" pregunto.
"Hoy te van a dar de alta y podrás ver a Mario!"
Por un momento, siento que mi corazón se detiene. No sabía que sentir.
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Obsesiona2 || Mario Bautista
Teen FictionSegunda Temporada - Ya Leyeron La Advertencia En La Primera Temporada🤷 - "No quiero causarte más daño." - "Yo sé que él vendrá por mí." - Primera Temporada: Obsesionado - No es permitido hacer copias o adaptaciones