XXXII

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Una vez que Carmen regresó con los doctores, nos dijeron que Mario tenía que quedarse unas semanas más, ya que tenían que vigilarlo y ver que todo estuviera bien.

"No puedo Yuli, no puedo quedarme más días aquí!" me dice desesperado.

"No te preocupes, me quedaré aquí contigo," beso su mejilla.

Su expresión cambia a una más calmada.

"Te diría que no necesitas hacer esto, pero te estaría mintiendo por que yo sí te necesito."

Sólo le sonrío y agarro su mano.

"Vamos a salir de esto juntos," le digo.

Pasaban los días y cada día se ponía mejor. Empezamos por haciendo ejercicios simples para que sus se acostumbraran a caminar de nuevo. Después, salimos a caminar por toda el area del hospital. También había veces que lo acompañaba a sus terapias. Sin duda alguna, amaba pasar tiempo con él sin importar la situación en la que estábamos.

"Abre la boca que ahí te va el avión," le digo mientras muevo la cuchara de un lado a otro.

"Ño," me responde como un niño chiquito y cruza los brazos.

"Ándale Mario, abre esa boquita..!"
"No tengo hambre."

"Tienes que comer para que te recuperes más pronto," le explico.

"Okay, pero es que esta comida del hospital sabe horrible," me dice.

Doy un gran suspiro y luego se me ocurre una idea.

"Quieres que te compre algo allá afuera?" le pregunto.

"Quieres que te compre algo allá afuera?" le pregunto

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Él me sonríe en respuesta a un sí.

"Por favor.." agrega con las manos juntas.

"Está bien, ahorita vengo, no me tardo," le doy un beso antes de irme.

-Narra Mario-

Esperé a que Yuli se fuera para después oprimir el botón de 'enfermera' que aparecía en el control remoto junto a mí. En eso, entra Carmen con una gran sonrisa.

"Ya se fue, verdad?" le pregunto asegurándome.

"Sí, ya bajó al primer piso en el ascensor," me dice.

"Perfecto!"

Me pongo de pie con la ayuda de Carmen y comenzamos a sacar las cosas que tenía escondidas en el armario.

"Gracias Carmen. Yuliana tenía razón, eres la mejor enfermera del hospital," le digo.

Ella me sonríe.

"Sólo me gusta hacer a mis pacientes felices, es todo," me dice mientras me ayuda con las decoraciones.

"Enserio crees que le guste?" le pregunto algo inseguro.

"Claro que sí! Además, ella me dijo que tú la conoces muy bien así que, no entiendo por que te preocupas."
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Obsesiona2 || Mario BautistaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora