Sangre Envenenada

Capitulo 22

Mis hermanos llegan al campamento después de un día completo de cabalgar, ya de noche desmontan a sus caballos y llegan a la tienda de Karov dónde Deacon y Tamira muy preocupados nos aguardan

-¿Están bien?

Pregunta Deacon, nadie le responde

-¿Y Kard?

Pregunta la reina mientras mis hermanos pasan de ellos, Méreg camina con mi sello en sus manos, llorando

-¿Dónde está Karov?

Pregunta Feize

-Malherido en sus aposentos, Darl está con el

Responde el enano, Méreg sale de la tienda y corre a la frontera del campamento, se sienta en el suelo y ve mi sello, llora un poco

-Entonces debemos pensar en que hacer

Dice Tamira

-Evacuar sería lo más prudente, llegar a las ciudades embiris y advertirles de lo que sucede

Responde Buvez

-¿Eso incluye a los enanos?

Pregunta Deacon

-Si

-¿Y mi pueblo? ¿Estará a salvo?

Pregunta Tamira

-No con alguien como Ducan

Le responde la bruja

-El los buscará y matará a cualquier costa

-Entonces ¿Qué sugieres?

Pregunta Ruth

-No lo se

Responde

-Aquí estás

Dice Ivek caminando hacia Méreg

-¡¿Por qué no regresamos por el?!

Le grita enojada

-Méreg...

-¡No! ¡Debemos regresar! ¡Debemos enterrarlo como es debido!

Dice la chica levantándose

-¡Debemos ir por el!

Le grita mientras corre a golpear a Ivek, mi hermana esquiva los golpes de Méreg sin mucho esfuerzo con una cara de tristeza

-Fue mi culpa

Le dice la chica deteniendo sus ataques mientras llora más fuerte

-El solo trataba de protegerme

Le dice y rompe en llanto cayendo de rodillas al suelo, mi hermana camina a ella y la abraza con una lagrima en su rostro

-No fue tu culpa, fue de Ducan, y de nadie más ¿Me oyes?

-Ese ataque era para mi, el lo recibió por mi

-Entonces agradécele, salvó tu vida y está en ti si la desperdicias llorando, o vives y proteges por lo que el dio su vida

Le dice tomando sus manos y mi sello, la chica voltea a Ivek con lagrimas en sus mejillas

-Nunca habló demasiado pero se que te amaba, no lo dijo, pero en su mirada lo gritaba

Mi hermana seca las lagrimas de Méreg

-El no está muerto, lo estará cuando olvidemos quien fue y lo que hizo, no permitas que eso suceda

-Lo extraño Ivek

Le dice la chica volviendo a llorar

-Yo también