Selfish #Michael Jackson Fanfic

6to contacto ¨Si o No¨

En la esquina hacia el edificio de su trabajo Michael volvió a toparse con la chica de ojos claros, que iba distraída enviando un texto.

—¡Ouch! Lo siento... ey, eres tu otra vez —le miro sonriente.
—Yo siempre paso por aquí a las 8: 55 a.m
—Meh, pensé que era destino —se puso sus lentes de sol y sacudió un poco su cabello largo y castaño.
—No existe tal cosa, es solo una creencia.
—Bueno, se siente bien creer en ello —volvió a mirar su celular y caminar.

Michael la siguió.

—Todo es matemáticas y determinación. ¿Puedo hacerte algunas preguntas? —la alcanzo sacando su libreta y una pluma.
—Claro, ¿Qué clase de preguntas? —le miro.
—¿Comedias románticas o ciencia ficción?
—No veo muchas películas —regreso su vista al teléfono móvil.
—¿Perros o gatos?
—Perros... y gatos.
—¿Haces ruidos durante el sexo?

La chica se detuvo en seco y le miro pasmada.

—¿Perdón?
—¿Haces ruidos durante el sexo?
—¿Tú los haces? —sonrió con picardía.
—No... yo no tengo sexo.

Le espeto como si fuera obvia para ella la respuesta. El celular de la joven empezó a sonar.

—Oh, dame un momento —levanto la tapa y contesto sonriente—. ¿Hola?

Mientras ella hablaba Michael empezó a prestarle atención a su rostro, a sus facciones. Y se percató de que la sonrisa en el rostro de la joven, comenzaba a descender hasta volverse en un gesto triste.

—No... está bien. Si, seguro. Ok, bye.

Colgó y luego de un suspiro miro su teléfono.

—¿Estas triste? —le pregunto Michael, robando su atención—. Tu boca fue de una boca sonriente a una boca triste.
—¿Tienes más preguntas? —le sonrió ella sin mucho ánimo.
—No. Me diste las respuestas equivocas —comenzó su camino de vuelta hacia el edificio.
—¿Eh? No sabía que habría respuestas erróneas en este cuestionario.

No le hizo caso alguno y ella no tuvo más que seguir caminando. Michael continúo su búsqueda mientras trabajaba, preguntándole a cualquier chica cosas como:

—¿Haces ruido durante el sexo? —directo y sin vergüenza.

¨¿Eh?¨
¨A veces.¨
¨Si.¨
¨No lo se.¨

—¿Puedes lavar los platos: si o no?

¨No.¨
¨No.¨
¨No.¨

—¿Tren o autobús?

¨Tren.¨
¨Tren.¨
¨Autobus.¨
¨Ambos¨

—¿Mostaza o ketshup?

¨Ketshup.¨
¨Ketshup.¨
¨Ketshup.¨

—¿Ketshup o mostaza? —le pregunto la encargada del food truck mientras sostenía un hot dog.
—¿Cuál eliges tú? —le pregunto Michael.
—Ketshup.
—Ketshup.
—¿Ketshup o mostaza? —le pregunto una vez más ya algo desesperada.
—¿Cuál quieres?
—¡Jeez, toma ambos! Estamos esperando nuestro turno aquí.

Ambos voltearon a ver la gran cola que se encontraba ante el food truck.

—¿Te gusta Michael?

¨¿Quién es Michael?¨

—Yo soy Michael.

¨Si.¨ le dijo una sonriente.
¨No lo se.¨
¨Si.¨
¨Si.¨

—¿Deportes: si o no?

¨No.¨

—¿Licor o bebidas dulces?

¨Bebidas dulces¨

—¿Perros o gatos?

—Perros obviamente —comento una que llevaba a pasear a su gran danes.
—Respuesta incorrecta.

En la noche, muy tarde. Michael se detuvo con una ¨chica¨ —o al menos eso es lo que creía que era— para hacerle las preguntas.

—¿Licor o bebidas dulces?
—Dulces —contesto el travesti mientras fumaba—. Odio el sabor del licor en mis dientes.
—Bien.

¨Encontrar a la chica perfecta no es tan fácil como crees. Ellas siempre dan una respuesta incorrecta. Pero las ecuaciones necesitan cuidadosa consideración, y el amor, así como la buena salsa, necesita tiempo¨

Fin del sexto contacto