''30 Days with Lee TaeMin''

Urna (2min)

PALABRA: Urna
PAREJA: 2Min
RATED: MA
ADVERTENCIAS: Slash. Muerte de personaje principal. Romance. Locura. Tragedia. Drama.
SUMMARY: -

.

.

URNA

.

.

Lo mira. Lo mira.

Lo mira un poco más.

Estaba obsesionado y lo sabía.

Lo odiaba. Lo amaba.

Era todo y nada a la vez.

Era tan hermoso que era obvio, ¿cómo se suponía que pudiera haber obviado el mirarle?

Nunca podría.

Nunca hubo opción. No para él... y lo sabe.

Tan hermoso...

No supo exactamente cómo y cuándo comenzó todo. Tan solo recuerda que un día lo vio, así, tan bello que le robó el aliento mientras que él se reía conversando con aquel chico de sonrisa amable.

Lo miró aquella vez también.

Lo miró hasta que se fue.

Lo miró cada vez que se lo encontró de ahí en adelante hasta que, un día, finalmente lo entendió.

Ya no quería verlo.

Ya no quería observarlo vivir desde lejos como no más que un simple y extraño espectador.

Quería que fuera suyo.

Lo quería para él.

.

Era tan hermoso.

Incluso llorando.

Incluso gritando.

Y tan pero tan hermoso estaba entonces también... incluso sangrando...

.

TaeMin. TaeMin. TaeMin.

Era un cántico.

Era un llamado.

Era el mantra que se repetía cada segundo que sus ojos se posaban en él y que en aquellos momentos podía decirle de frente mientras ÉL le miraba a su vez. TaeMin-mirándole-a él. Con aquellas hermosas orbes castañas brillando hacia él.

Tan hermoso.

¿Porqué tenía que ser tan hermoso?

Era su culpa entonces y no propiamente suya. Era su culpa por haberle tentado así, por haberlo hecho desearlo, desear tenerlo. Para siempre...

Era una pena realmente. Su cuerpo había sido tan hermoso con su piel marfil tanto como cuando él la dejó cubierta de aquel hermoso y artístico líquido rubí.

Su mirada igual de intensa y hermosa a pesar de su reflejo aterrado que quedaría por siempre mirando al vacío.

Su rostro... aún con aquella mueca de terror inmortalizada en la imagen de la vitalidad e inocencia que le habían sido robadas -o al menos intentado-.

Lo había querido como suyo y lo había conseguido al fin.

Había hecho a su cuerpo gritar de placer -dolor-, mientras tomaba su virtud hasta no dejarle ya nada como propio y sí más suyo -de ambos-. Teniendo su clímax y vaciándose en su cuerpo mientras besaba cada mordida y lamía cada gota que le había arrancado a fuerza de diente sobre aquella tersa piel. Disfrutando a cada segundo, cada gemido que el otro le regalaba. Pero, incluso entonces, supo que quería más.

Lo quería todo y lo quería ya.

Lo quería a él, a TaeMin, por siempre suyo. Nada más y nada menos que eso.

Y lo tendría porque, a fin de cuentas, era su culpa el haberle enamorado tanto así, tan dementemente como lo estaba.

Era su culpa el haberle obsesionado. Con aquellos labios labios gruesos y tentadores, con su cuerpo fino y elegante. Con sus ojos siempre vibrantes y con su, rostro angelical. Era su culpa y se lo había dicho porque ahora, finalmente MinHo sonreía; porque al fin, al fin, al fin, después de tanto, el castaño sería suyo para siempre e incluso más. Por eso TaeMin le acompañaría cada día de ahora en más.

.

MinHo miró las fotos en la mesa que en su alcoba poseía como un altar, caminando hasta allí para luego acariciar con infinito cariño aquella hermosa urna labrada. La urna donde estaban aquellas cenizas que tanto le había costado juntar.

Sí, ahora finalmente tenía lo que quería, porque ahora Tae ya no lo dejaría. Jamás.

.

.

Uhhh, sí, bueno, había olvidado que nunca terminé de subir los OS restantes aquí sooo, por si alguien aún quiere leer los voy a ir subiendo en este finde. Espero les gusten y comenten! *3*

*Guadi*