''30 Days with Lee TaeMin''

AZUL -2min-

PALABRA: Azul
PAREJA: 2Min (MinHo/TaeMin)
RATED: MA
ADVERTENCIAS: Lemmon gráfico/fetiche/parafilia
SUMMARY: 'Porque siempre le había gustado ver aquel color en él'

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—MinHo —suspiró el menor contra sus labios—. Vamos, muévete yaaaa...

Su suave voz sonando en aquel tono tan seductor y necesitado, sumado al hecho de ver de nuevo aquel hermoso color en esos hermosos y brillantes orbes fue lo que terminó por arrebatarle al mayor todo aquel escaso resto de control apenas contenido.

MinHo soltó entonces las riendas de su actual desmedida pasión y, embistiendo con fuerza, penetró salvajemente al menor mientras se deleitaba en la vista regalada ante él y los tan estimulantes y pecaminosos sonidos que salían de su amor.

El alto siempre había tenido un gusto particular de éxtasis al ver al menor vestido con cualquier tipo de azul. Era un color que, fuera cual fuera el estilo actual del maknae, sentía le sentaba siempre más que bien y enfatizaba arduamente su natural belleza. Su mayor gusto hasta entonces había sido cuando pudo disfrutar de verle en una antigua sesión de fotos para una entrevista debido a su debut como solista. Recordando como aquel traje azul le abrazaba el cuerpo como guante y como en respuesta él hubo hecho sus manos un puño apretado para contenerse de solo abalanzársele encima y arrancárselo sin más.

Pero esto, esto era completamente otro nivel de... lo que fuera. Bueno, realmente tenía un nombre para ello, pero no era algo que al alto le gustara admitir. Culpaba por completo al dino del grupo por poner esa horrenda palabra en su cabeza ya que fue él quien se había reído de él durante días al enterarse de su pequeña y ligera 'obsesión', burlándose a cada rato con que de un alien como él no era realmente nada raro que tuviera un 'fetiche' tan extraño como aquel.

No que le importara realmente lo que éste opinara sobre nada pero, esa palabra... nop, a MinHo no le gustaba ni tantito.

Para él no había dudas que desde que su hyung se había juntado con la diva del grupo, al perro se le habían pegado muchas de sus odiosas mañas. Malas para él mayormente. Pero, volviendo al tema... El solo hecho de ver a SU menor vestido de azul era una cosa, pero el tener que ver esas tan hermosas orbes de ese color casi todos los días ahora debido a la promoción de su nuevo comeback era sencilla y puramente demasiado. Su libido estaba por las nubes a todas horas y todos los días, a tal punto que en verdad creía que ya hasta compararlo con los conejos se le quedaría corto y pobre.

El alto parecía no poder alejar ni sacar sus manos del menor -y no era que éste a su vez se quejase demasiado-. Era ver aquel brillo azulado brillando de amor -y un poco de diversión-, por él y MinHo se sentía capaz hasta de vivir sin volver a respirar. Ver aquella tan hermosa vista así, servida ante él, desbordando lujuria y pasión, de amor y devoción por él, era el sentimiento de éxtasis más puro que podría tener.

Apuró sus embites entonces. La urgencia acuciaba ahora su cuerpo y la ciega necesidad de, finalmente, alcanzar esa sublime explosión -que ya bien conocía y que sabía le transportaba a su particular nirvana junto a su ladino y sensual pequeño amor-. Los gemidos inundaban el cuarto resonando en sus oídos, apremiándole; el apriete casi insoportablemente duro sobre su sensible carne, el picor de los pequeños arañazos que sentía ahora adornar su espalda. Todo ello fue lo que lo dejaba en el mismísimo borde, sí, pero a la espera. A la simple espera de aquello que sabía sería lo que lo haría caer por fin. Tal y como siempre.

No tuvo que esperar demasiado por suerte para ambos.

—MinHo... te amo...

Apenas un leve susurro con marcado aliento sobre su piel y eso fue todo.

El mayor se encontró instantáneamente llegando a su ansiado orgasmo, al tiempo que en respuesta daba un potente y acertado nuevo golpe a la ya pobre sobre abusada próstata del menor, quien desbordado de pasión se vio también inmediatamente arrastrado a la cúspide del éxtasis junto a él, haciéndole sentir así a MinHo como los músculos internos que rodeaban su miembro le apresaban, ordeñándole, además de la humedad tibia cayendo como perlas en su piel.

La presa que antes habían sido aquellas tersas piernas sobre sus caderas fueron perdiendo pronto su agarre, terminando por caer laxas a cada lado de su agitado cuerpo mientras ambos se dejaban yacer, agotados tras la faena recién realizada.

El único sonido ahora eran los suaves jadeos que parecían marcar el ritmo de la noche en su lucha por volver a hacer estable su respiración, dejándoles disfrutando el relax que les invadía por completo tras su liberación.

Tras unos cuantos segundos de calma, ambos voltearon a verse de nuevo, viendo como si de un espejo se tratase todo el amor y el ardor, la pasión y el deseo que aún quemaba en la mirada del otro, y tan solo sonriendo en respuesta... antes de que así, sin siquiera palabras... todo comenzara otra vez. Aunque esta vuelta hubo pequeños traviesos pensamientos rondándoles a cada uno.

'Definitivamente conejos ya les quedaba corto' -pensó MinHo.

'Creo que siempre amaré esta promoción... y que debo quedarme estos lentes...' -pensó TaeMin.

Diversos y divertidos pensamientos de hecho aunque en realidad... la diversión apenas acababa de comenzar.

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Buee, primera vez que publico aquí y, dado que debo subir lo de AY (MammaG en Amor Yaoi)... pues ya me dirán. Aún no sé si subiré uno por día, calculo que sí porque tengo que ir subiendo todo lo otro también uffff...

En fin...

Besos y cuídense ;) 
Nos leemos pronto!