« Notes » ; Todofem!Baku.

Nota #7

(10:49 pm.)

A Shouto y Katsuki se les fue la mañana y parte de la tarde por culpa de problemas aleatorios que surgían de la nada, en estos momentos se encontraban haciendo el informe lo más rápido que podían mientras daban una ojeada al reloj cada cinco segundos. Era bastante tarde para Todoroki, había salido temprano de su hogar para irse al instituto y desde esa hora que no ha regresado a su hogar... tampoco tenía muchas ganas de volver, si volvía le iban a obligar a estar sentado en un escritorio aprendiendo contabilidad, aprendiendo como realizar buenos negocios y aprender acerca de las estafas entre otras cosas, envidiaba la vida simple que llevaba su compañera de trabajo en esos momentos, lo único que tenía que soportar eran los regaños de su madre, lo que daría él por recibir un regaño de su madre, aunque sea una mísera palabra.

— Joder, ¡¿cuanto falta?! ¡me duelen los dedos! — En esos momentos se estaba quejando la de hebras rubias, por otro lado, el de la quemadura estaba tecleando en vez de Katsuki, se habían turnado en escribir. Cada cinco páginas uno debía teclear para que el otro descansara, pero tenían un problema, no sabían si las hojas o la tinta iban a durar hasta hacer las cincuenta páginas rellenas por las dos planas.

— Recién estamos por la mitad... — El chico que estaba tecleando dejó de hacerlo cuando su móvil empezó a sonar, fastidiado lo sacó del bolsillo y vio quien era, por qué dentro de todas las personas en el planeta tuvo que llamarlo "él" , sin otra alternativa disponible tuvo que contestar. — ¿Si...?

— Dónde estás, Shouto. — Bastante duras fueron las palabras del mayor que estaba por la otra línea, Katsuki no pasó desapercibido eso y empezó a teclear ella a la vez que estaba atenta a la conversación que tenían el de hebras bicolores y el sujeto que aparentemente era su padre.

— En el hogar de una compañera de clases haciendo un trabajo. — Se excusó el chico, el hombre por el otro lado de la línea soltó un bufido y regañó al joven.

— ¡SI TIENES TIEMPO PARA ESTAR HACIENDO ESAS COSAS, ENTONCES PUEDES VENIR A ESTUDIAR! ¡RECUERDA QUE TÚ SERÁS EL QUE HEREDE MI IMPERIO! ¡VUELVE YA MISMO AL HOGAR!  — 

La de orbes rojizos se estaba empezando a molestar, ¿acaso lo que estaban haciendo era un simple juego de niños? ¡no señor! ¡se estaban jugando su matrícula de instituto! Si no hacían aquel informe iban a ser expulsados de la academia sin peros.
Observó en silencio al frustrado Todoroki que solamente asentía a las palabras de su tirano padre, estaba a punto de colgar, pero el móvil le fue arrebatado de las manos y unos gritos se escucharon en la habitación, así es, Katsuki le estaba gritando al padre de Shouto.

— A VER, VIEJO DE MIERDA. TODOROKI Y YO TENEMOS QUE HACER UN PUTO INFORME IMPORTANTE PARA EL LUNES, NO VOY A ACEPTAR QUE "DON PERFECTO" VENGA A HACER DE LAS SUYAS Y NOS JODA EL TRABAJO, ASÍ QUE MÉTETE TUS ESTUDIOS POR DÓNDE MEJOR TE QUEPAN Y NO VUELVAS A JODER, ¡¿ME ESCUCHASTE?! —

Tanto Todoroki como su padre estaban perplejos ante el actuar de Katsuki, la chica estaba jadeando ya que ni tiempo se tomó para decir todo aquello de manera pausada, es como si le hubieran puesto un motor en su garganta y hubiera hablado a mil kilómetros por hora.
Mitsuki asustada por los gritos que pegó su hija se encaminó a la habitación de esta y vio como su hija discutía con el padre del joven perplejo a grito limpio, la mayor tenía que interferir en ello o se les iba a venir algo grande, Todoroki estaba haciendo lo posible por quitarle el móvil a la explosiva chica y ella seguía discutiendo con el padre del contrario.