A Escondidas (Saga Pure Love #1)

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Estaba estudiando en la biblioteca junto a Kwan, era el único en quien tenía mucha confianza como para poder sentirme a gusto siendo yo en la universidad.

-Si una chica te dice que le gustas, pero luego te evita y después te escribe diciendo que te quiere... ¿Que se supone que debo pensar?

-¿Eso que tiene que ver con las clases?

-Anda dime. Eres mujer, debes saber que se trae entre manos.- dijo acomodándose sus lentes de lectura.

-No pienso igual que la mayoría de las chicas, así que no lo sé. Pero si quieres una opinión, creo que está siendo ridícula.

Su risa se escucho en toda la sala y recibimos un regaño de la bibliotecaria.

-Por eso eres mi amiga.- chocamos los cinco, algo que cualquier coreano de nuestro alrededor lo vería mal o pensarían que tenemos algo más. Pero cuando le explique a Kwan que en mi país era algo normal, quiso intentarlo y yo no me opuse.

-Lo sé, me amas.- dije poniéndome de pie.- iré por un libro ya vuelvo.

Camine hasta el segundo piso, entre estantes repletos de libros de diseño, colores y fotografías.

Encontré el libro perfecto para mi investigación pero estaba muy alto para alcanzarlo y no había una escalera cerca.

-¿Este?- sentí su aliento en mi oreja mientras que una de sus manos se alzaba y tomaba el libro que yo quería.

Mi corazón se descontrolo y mi piel se puso de gallina al girarme y ver a Yoongi vestido completamente de negro junto un gorro y un tapaboca del mismo color.

Empecé a sonreír como tonta, como siempre me pasaba al verlo, y tuve el deseo de abrazarlo y darle un beso. Hasta que él me extendió el libro y caí en cuenta de el lugar donde estábamos.

Abrí los ojos de asombro y lo empuje al otro lado del pasillo que estaba más oculto y solo, mientras que él estaba serio, como la mayoría del tiempo.

-¿Perdiste la cabeza? ¿Qué haces aquí?

Se bajo el tapaboca, dejándome ver toda su cara sin maquillaje y blanca.

-¿No te he dicho ya que odio a ese chico?

Al principio no entendí, pero luego caí en cuenta que hablaba de Kwan.

-¿Viniste para decirme eso?

-¿Por qué no me respondías el teléfono?

-¿Nos vamos a responder con preguntas?

-¿Lo haremos?

Se cruzo de brazos. Estaba molesto, pero no entendía el porqué y ya que él nunca da su brazo a torcer, tendré que romper el hielo.

-Si Yoongi, ya sé que no te agrada, pero a mí sí, no me trata mal por el hecho que soy de Latinoamérica. Y no te he contestado porque olvide el teléfono en el departamento, así que no sé nada de nadie.

Su expresión no cambio nada, es como si se hubiera convertido en estatua.

Mire a el otro pasillo y vi como una chica venia hacia acá. Volví a tomar a Yoongi y lo puse de manera que yo quedara contra el estante y él en frente de mí dándole la espalda a la chica. Nos quedamos en esa posición en silencio.

Estaba mirando a la chica por si se daba cuenta de con quien estaba, pero parecía estar en su mundo y no la culpo los exámenes se acercan y todos están vueltos locos, incluyéndome.

Yoongi me tomo del mentón y me giro para verlo a los ojos. Me estaba mirando fijamente como queriendo encontrar algo.

-Quería verte y me preocupe de que no contestaras en todo el día. Y lo primero que te encuentro haciendo es riéndote con ese tipo de lo más tranquila como si el resto del mundo no existiera, ni siquiera te importo reírte tan alto con él en medio de la biblioteca.

Por cada palabra que iba diciendo me iba presionando mas contra el estante y yo presionaba el libro contra mi pecho.

Yoongi me estaba haciendo una escena de celos por primera vez en nuestra relación. Él nunca pasaba de decirme que algo o alguien no le gustaba.
Estaba más que sorprendida y en cierta manera me gustaba, pero también me causaba curiosidad saber porque ahora se sentía así.

-¿Por qué estas celoso? No tienes motivos, es decir no te los he dado.

Me apretó los hombros.

-No estoy celoso.

-Mentiroso.

Nos volvimos a quedar en silencio. En verdad no sabía qué hacer, esto era nuevo para mí.

Yoongi no dejaba de mirarme a los ojos, me estaba poniendo nerviosa. Pero me llevo a otro nivel de nerviosismo cuando me quito el libro de mis manos y lo puso quien sabe donde para luego mirarme de arriba a abajo mordiéndose el labio.

Y me beso. Sin nada de delicadeza y sin importarle que estuviéramos en mitad de un pasillo.

Me dejo sin aliento cuando se separo de mis labios y metió su mano dentro de mis pantalones tocando la zona que solo había sido tocada por un hombre en todo lo que va de mi vida.

-Vigila si alguien viene.- me susurro y empezó a mover sus dedos.

Mierda.

Fue lo único que pensé cuando vi esa determinación en sus ojos.

Me mordí el labio para no soltar ningún gemido, algo me estaba costando la vida.

Yoongi sabía lo que me gustaba, sabia como tocarme para ponerme a su merced en segundos y como mirarme para derretirme.

Sentí como llenaba sus dedos con mis fluidos y como el intentaba penetrarme con su dedo medio, el más largo. Cuando lo hizo tuve que morderlo a él en el cuello y agarrarme a sus hombros. Le gusto, lo supe porque gruño bajo y estaba restregando su erección en mi pierna.

-¿Has sentido esto con alguien más? ¿Dejarías que alguien te hiciera este tipo de cosas a solas o en público?

Repito, santísima mierda y por todo lo que es bendito.

Iba a responder, pero un espasmo recorrió mi cuerpo y me salió un gemido. Estaba a punto de correrme.

-Respóndeme.-demando mientras movía los dedos mas rápido.- ¿Eres completamente mía?

Él y yo hablamos sucio en la cama, pero esta faceta de Yoongi posesivo no la conocía y me estaba llevando al límite.

Obligue a mi cerebro a funcionar y que me dejara hablar.

-Solo hago estas cosas contigo.- otro espasmo y otro gemido.- soy tuya.

Y me corrí en ese momento mientras movía la cabeza hacia atrás con los ojos cerrados y me tapaba la boca.

Yoongi saco su mano de mi pantalón y lamió sus dedos húmedos gracias a mí.

-No sé que voy hacer contigo. Me descontrolas.

En ese momento se escucharon pasos del otro lado del pasillo.

-¿Emma donde estas?- era Kwan buscándome.

Mire a Yoongi asustada, pero el solo me tomo de las mejillas y me dio un beso corto.

-Ven al estacionamiento. Te voy a esperar para irnos. Si no vas en 5 minutos vendré por ti sin importar nada.

Asentí como si estuviera hipnotizada mientras se subía el tapabocas de nuevo y se iba por el otro lado del pasillo.

-Aquí estas. ¿Te perdiste?

Parpadee un par de veces intentando calmarme por el reciente orgasmo.

-mmm, si. Solo que recordé que debo irme. ¿Terminamos mañana?

Kwan asintió con una sonrisa.

-Solo si me haces un favor.

Levante una ceja esperando a que continuara.

-Dile a Suni cosas buenas de mi. Voy a olvidar a la ridícula, según tu, y conoceré a otras chicas.

Asentí mientras reía y me hizo recordar lo que me había dicho Yoongi.

¿Por qué estaría comportándose así?