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El avión aterrizó.

Eran las 6pm en Londres, lo primero que note fue el cielo que se encontraba nublado. Corría una leve brisa que hizo que automáticamente me enamore aún más del clima. Donde vivía yo los días eran normalmente calurosos y soleados.

Al bajar del avión comencé a sentirme un poco ansiosa, estaba sucediendo, era real. Me encontraba en Londres por comenzar mi nueva vida. Tome unas esencias de mi bolsillo e inhale un poco para aliviarme. Después de un rato de espera, divise mis valijas y me dispuse a bajarlas del carril. Luego emprendí camino hacia la salida en busca de un taxi.

Una vez dentro del coche me fije la dirección que me dio Camille de su casa y se la dicte al chófer. Estábamos a 20 minutos, por lo tanto me dispuse a mirar por la ventana durante el resto del recorrido.

(...)

Bajé del taxi, junto con mis valijas en plena calle. Trate de ubicar el edificio de mi amiga mientras caminaba, sin dejar de admirar las estructuras y las hermosas calles de la ciudad. Note a una persona agitando sus brazos desde uno de las casas en la cuadra, era Camille, no puedo evitar sonreír y ella tampoco. Comencé a correr como pude y al llegar a la puerta nos abrazamos tan fuerte que creo que deje de respirar por unos momentos.

- Hannah! Por dios te extrañe tanto! - Exclamó mientras nos abrazábamos.

- Yo aún más! - Respondí sonriendo

Ambas estábamos muy contentas, le pedí ayuda con las valijas y nos encaminamos a su apartamento. Este tenía un ambiente cálido, se sentía muy acogedor. Me sorprendí por la gran vista que tenía de la ciudad, dado que vivía en el cuarto piso, y mi corazon comenzo a latir de alegría. Camille sonreía desde la puerta mientras la cerraba.

El lugar era amplio y le entraba mucha luz. Era perfecto, me entristecía saber que no iba a quedarme aquí por siempre.

Luego de unas horas de acomodar mis cosas, me recosté en el sillón dejando descansar mi cuerpo de un día tan agotador. Puede no parecerlo pero volar es muy estresante.

- Al fin estoy aquí, puedes creerlo? - solté plenamente.

- Lo se! Yo tampoco lo creo - rió Cam y añadió - Quieres ir por algo de comida para la noche? De paso le das un vistazo al vecindario.

Asenti entusiasmada y salimos.

Comenzamos a caminar en dirección a un mercado mientras nos poniamos al día con nuestras vidas. Pagamos y salimos del lugar, habíamos comprado más comida chatarra de la que debíamos. Aproveche para disfrutar de la fresca brisa que chocaba mi rostro.

- Escucha, sé que es pronto pues acabas de llegar, pero el otro día estuve en contacto con un viejo amigo que vive no tan lejos de aquí y me comentó que tiene un lugar disponible en su edificio, pensé que quizás te interesaría.

- Me estas echando! - Cam rió ante mi comentario - Son increíbles noticias, de verdad muchas gracias! - La abracé rápidamente sonriendo -Lo tendré en cuenta. Por cierto, cuál es la dirección?

- Oh, es.. - Cam tomó su teléfono en busca, luego añadió:

- 221B, Baker Street.



Baker Street (Sherlock Holmes) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora