《In the name of the law》. jb

capitulo 25

Al otro día nos despertamos y miramos para todos lados para percatarnos de que no había nadie, pero justo venia un policía rápidamente me escondí debajo de la cama.

-Hey tu, es hora de ir a bañarse. -le dijo el policía a justin el solo asintió. Espere a que se fuera y salí.

-debes salir rápido amor. -me dijo justin y no dude ni un momento, me puse lo primero que encontré y salí al lado de justin prácticamente corriendo cuando llegue a la salida nos dimos un beso rápido y me fui. Ya afuera tome un taxi y me fui a mi casa.

Abrí la puerta y lo primero que me encontré fue a esther y bruce cruzados de brazos mirándome feo, le sonreí como una niña pequeña que la encuentran haciendo algo malo. 

-dónde estuviste jovencita? -dijo bruce.

-estuve en la casa de mi amiga ya saben hicimos una noche de chicas. -dije pesando cada palabra.

-pero igual te hubieras molestado en avisarnos para que no estemos tan preocupados. -dijo esther abrazándome, esos abrazos me hacían tan bien.

 -perdón la próxima vez les aviso lo prometo. -dije sonriendo.

-esperamos que lo hagas, ahora vamos a desayunar. -dijeron agarrándome de los hombros, son las personas más lindas que conocí. Cada uno se sirvió lo que iba a comer y fuimos a la mesa, nos sentamos y conversamos de todo un poco como siempre charlas como estas nunca cansan.

Terminamos y lavamos lo que habíamos utilizado.

-hoy iremos a visitar a justin. -me dijo esther.

-yo también iré después del trabajo. -dije asintiendo.

-te esperamos entonces hija. -dijo sonriendo.

-gracias pero si quieren podrían ir más temprano. -dije secando los platos.

-bueno mi niña, ahora iremos a comprar algunas cosas que hacen falta. -dijo secándose las manos.

-ok, yo iré preparándome para ir a trabajar. -dije yéndome a mi cuarto. Pasaron unos pocos minutos y escuche la puerta de entrada cerrarse seguido de un "no vemos después". Sonreí mientras encendía la ducha.

Me bañe lentamente disfrutando del agua tibia como caía por mi cuerpo, esto si que era lindo. Termine de bañarme, me vestí cuando ya estaba lista salí tome un taxi y fui al trabajo.

-Buenos días a todos. -dije sonriendo dirigiéndome a mi escritorio. Prendí la computadora y vi una notificación, la abrí y decía "quiero que deposites $100 milllones de dolares en una cuenta abajo te escribí la contraseña y todo, debes hacer eso porque si no lo haces te mataremos".

Lo terminé de leer y no paraba de temblar, es obvio que era para que los sacara de la cárcel. Pero no lo iba a hacer estoy cansada de ser amenazada, que lo haga otro yo no lo haré. Apagué la computadora y fui al baño allí estaba daisy.

-hola lacey. -dijo apenas me vio.

-hola daisy, cómo has estado? -dije intentando sonar normal pero mi corazón estaba por explotar.

-estuve y estoy muy bien pero tu te ves fatal, qué sucede?. -dijo daisy negando con la cabeza.

-estoy bien. -dije rápidamente con una sonrisa falsa.

-no te creo, cuéntame yo intentare solucionarte todos tus problemas. -dije sobandome la espalda mientras me dedicaba una cálida sonrisa. No aguante más y le conté.

-bueno te lo contaré... me mandaron un mensaje diciendo que tengo que depositar $100 millones de dolares a una cuenta, me mandaron el nombre y contraseña de la cuenta; si no lo hago me matarán. -dije seguida de un escalofrió.

-eso es horrible, hazme ver el mensaje para que deposite ese dinero y será mejor que no aparezcas por un tiempo por aquí ellos te están siguiendo. -dijo acercándose más casi susurrándome.

-pero los abuelos de justin y él se preocuparán mucho les tengo que avisar. -dije mordiéndome el labio.

-bueno, le dirás de que te vas a ir de vacaciones conmigo y no sabes cuando volveremos. -dijo asintiendo.

-parece que tenías todo planeado, eres una genia. Esta noche iré a ver a justin y le contaré todo. -dije finalmente y salimos del baño dirigiéndonos a la cafetería.

-hey lacey no podemos ir a mi casa, seguramente te encontraran fácilmente. -dijo colocándose un dedo en el mentón de manera pensativa.

-ok, nos iremos a la casa de mis abuelos. -dije decidida.

-nos iremos allí entonces. -dijo dándome la mano. Terminamos de comer, tiramos las cosas que habíamos utilizado y fuimos a nuestros escritorios. Pasaron rápido las horas y llego la noche, salí y tome un taxi llegue a la cárcel.

-hola. -saludé al guardia. El asintió con la cabeza y me dejo pasar. Entre y estaban todos los presos con visitas, en una esquina vi a justin.

-amoooor! -dije corriendo hacia él, me vio y se levantó envolviéndome en sus brazos tan fuertes. Nos quedamos abrazados un largo tiempo, nos alejamos un poco y nos besamos.

-te amo. -dijo después del beso y me sonrió. Nos sentamos y le conté lo que me mandaron.

-será mejor que te alejes un tiempo de todo, te voy a extrañar mucho pero tienes que estar segura. -dijo cabizbajo.

-te amo tanto. -dije con un hilo de voz. Nos besamos, aprovechamos que nadie nos estaba mirando y fuimos a su celda e hicimos el amor esa era nuestra despedida por así decirlo. Al día siguiente nos despertamos por el ruido de los palos golpeados contra las celdas. Nos miramos asustados con justin y me escondí debajo de la cama.

-LEVANTESEN HIJOS DE PUTA YA ES HORA DE LEVANTARSE! -gritó fuertemente. Abrió las celdas de cada uno, justin se levantó se puso una remera y me ayudo a vestirme mientras me dejaba besos por todas partes. Salí otra vez al lado de él, nos dimos un último beso y me fui con lágrimas en los ojos. Me fui caminando al trabajo hoy sería mi último día, entré e hice todo como siempre después me fui con daisy a comer por ahí.

El día pasó rápido, fui a la casa de los abuelos de justin y les conté lo que iba a hacer ellos solo me abrazaron fuerte y me desearon lo mejor; lloré junto con ellos iba a extrañar a todos. Cenamos, me fui a mi cuarto preparé todo y me senté en la cama pensando en todo lo que me había pasado antes y después de conocer a justin; conocerlo me cambió la vida para bien. No pasó mucho tiempo y me quedé dormida.