✨Capitulo 18✨

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Me desperté abrazada con justin, otra vez.

-Justin ya es hora de levantarse. -dije moviendolo un poco.

-5 minutos más por favor. -dijo tapándose la cabeza con la almohada.

-No, no importa era para que me sueltes nada más. -dije levantándome de la cama mientras me reía.

-No puedo creer que me despertarás para eso, okay ya no puedo volver a dormirme. -dijo sentándose en la cama mientras se refregaba los ojos.

-Perdón, pero no tengo la culpa de levantarme temprano para ir a trabajar como todo ser humano en el planeta. -dije rodando los ojos.

-Hey yo si trabajo, pero puedo ir a la hora que quiera. Tu eres la que tienes que cumplir un horario, yo no. -dijo encogiéndose de hombros mientras iba al baño. Me quede en la puerta esperando que saliera, cuando salió entre corriendo y cerré la puerta con seguro.

-Te espero en la cocina, si sabes como llegar cierto? -dijo riéndose mientras cerraba la puerta, que pensaba que era una tonta y que me perdería en una casa ni que fuera tan grande. Rodé los ojos, termine de arreglarme y fui a la cocina.

-Aquí estoy, como veras se como llegar. -dije elevando las cejas mientras me sentaba.

-Hola queridos, hoy les preparé café con leche y crepas con verduras. -dijo esther sirviendo la comida a cada uno, claro que también le ayude. Terminamos de servir, nos sentamos y empezamos a comer.

-Abuelos enseguida iré a llevarla a Lacey a su trabajo. -dijo justin mientras daba otro mordisco a su comida.

-Claro nieto, primero es el trabajo. En qué trabajas querida? -dijo bruce mirándome a mi.

-Trabajo en la CIA, en la sede de New York. -dije orgullosa de mi trabajo.

-Ah, ahí investigan y todas esas cosas cierto? -dijo bruce con cara de sorprendido.

-Si, es muy lindo y la gente que ahí dentro es mejor. -dije con una sonrisa recordando a mis compañeros.

-Que lindo que te guste tanto tu trabajo, todo es mejor cuando te llevas bien con tus compañeros así todo sale bien. -dijo bruce asintiendo mientras terminaba de comer. Todos seguimos comiendo y cuando terminamos cada uno se lavo su plato. Le dije a justin que me esperara, porque me tenía que arreglar. Cuando estaba lista, salí y fui al garaje allí ya estaba justin arriba de la moto.

Me ayudo a subirme, me tendió el casco y arranco. En unos minutos ya estábamos llegando a la esquina de la CIA.

-Justin, déjame aquí. -dije gritando para que me escuchara. El paro la moto y me baje.

-Por qué no quieres que te lleve hasta la entrada? -dijo frunciendo las cejas.

-Justin, aquí todos te conocen. -dije mordiéndome el labio.

-Y que sucede con eso, es bueno ser conocido en todas partes donde vaya. -dijo encogiéndose de hombros mientras se reía.

-Conocen tu vida criminal, no a la persona que eres conmigo y tus seres queridos. -dije agachando la cabeza, no quería que se sintiera mal pero lo tenia que decir.

-Ah, ya entiendo. Bueno pero antes de irme dame un beso. -dijo estirando los labios mientras se inclinaba hacia mi.

-De esa manera te irás? -dije ladeando la cabeza mientras sonreía viendo esos labios rosados tan apetecibles.

-Si, así me iré. -dijo firme. Me reí y me acerque a sus labios, pero antes de tocarlos me alejé.

-Hey quiero mi beso, no hagas trampas. -dijo bajándose de la moto, salí corriendo pero el me alcanzo me puso contra la pared con sus brazos y cuerpo presionando. No tenia escapatoria.

-Lacey, dame mi beso. -dijo y le estaba por responder cuando el me atrapo la boca en un beso apasionado. Le seguí el beso y metió su lengua en mi cavidad bucal, era una guerra de lenguas por ver quien dominaba a quien. Cuando ya me faltaba el aire, me separe de ese beso tan ardiente y tome aire para tranquilizarme un poco.

-Quiero más de ti, quiero todo de ti. -dijo justin mientras se tranquilizaba su respiración.

-Yo también quiero todo de ti. -dije dándole un beso más.

-Ahora me tengo que ir a trabajar. Adiós. -dije y mientras iba caminando hacia la entrada de la CIA, paso justin en la moto me sonrió y me tiro besos yo le sonreí y entre con una sonrisa enorme al trabajo. Salude a todos como siempre, me senté en mi escritorio y encendí la computadora para ver si habían avanzado en los casos nuevos y viejos, no vi nada todo sigue igual. En ese momento vi entrar a Daisy, la salude pero ella ni me miro; no le di importancia y seguí viendo en la computadora.

Cuando llego la hora del almuerzo, fui al bar de siempre pedí espaguettis con salsa boloñesa y busque para sentarme. Vi que estaba Daisy en un lugar sola, así que fui hacia ella; me senté y ella me ignoro en todo momento.

-Hey Daisy, que sucede contigo? -dije frunciendo las cejas.

-Nada. -dijo tajante, bueno por lo menos ahora me habla.

-Si, algo te sucede. Hace un día que no nos vemos y tu cambiaste de la noche a la mañana, literalmente. -dije frunciendo las cejas mientras elevaba los brazos.

-No me pasa nada entiendes? -dijo mirándome fijamente mientras se levantaba a tirar las cosas en la basura. La seguí y la agarre del brazo, Daisy se dio la vuelta y me miro.

-Qué quieres? Habla, te escucho. -dijo cruzándose de brazos mientras enarcaba las cejas.

-Quiero que me expliques que te pasa conmigo. -dije ahora con los brazos en jarra.

-Te vi recién en la esquina con un chico. -dijo mirándome fijamente.

-Y que tiene de malo eso, tengo derecho de salir con quien quiera. -dije rodando los ojos.

-Si eso ya lo se, pero ese no es cualquier chico sino un criminal. -dijo escupiendo cada palabra con asco.

-De qué hablas? -dije haciéndome la confundida.

-Sabes muy bien de que hablo, no te hagas la tonta. Tu sales con Jesse Bieber que es miembro de "blue eyes" la banda más peligrosa de todo Estados Unidos. -dijo mirándome con preocupación.

-Si, pero no le cuentes a nadie. Que más puedo hacer me enamoré, el amor no conoce de edades, dinero, nada. Me enamoré perdidamente de el, aunque ya conocía sus antecedentes criminales. -dije mirando hacia abajo mientras jugaba con mis manos.

-No le contaré a nadie, pero no te muestres con el en ninguna parte. Son perseguidos y tu puedes quedar envuelta en ese conflicto. -dijo apuntándome con el dedo mientras asentía con la cabeza.

-Si ya lo se, por eso le dije que me dejara en la esquina para que nadie me viera. Por favor no le cuentes a nadie. -dije suplicándole.

-Ya te dije que no le diré nada a nadie, para eso están las amigas. -dijo sonriendo, le devolví la sonrisa y la abracé fuerte.

-Pensaba que ya no querías ser mi amiga, gracias por ayudarme en esta. Yo también cuando necesites mi ayuda, solo tienes que llamarme y yo estaré ahí para ti. -dije sonriendo mientras la abrazaba otra vez. Fui a agarrar mi comida, estaba fría le pedí por favor a la cocinera que calentara y lo hizo. Me senté otra vez a comer, mientras conversábamos con daisy de todo. Volvimos otra vez a trabajar, cuando cayo la noche llame a justin para que me viniera a buscar; en menos de veinte minutos ya estaba aquí.

-Hola. -dije sonriendo mientras me ponía el casco.

-Hola mi amor. -dijo también sonriendo, me subí a la moto y gracias al casco justin no vio mi cara enrojecida. Llegamos, nos bajamos y justin me llevo al balcón para ver las estrellas.

-Mira aquella, tiene forma de la cara de un oso. -decía justin, yo solo me reía porque no le encontraba forma de nada. Estábamos los dos acostados en una cobija en el piso y justo paso una estrella fugaz.

-Lacey, esa es nuestra. Pide un deseo. -dijo, yo cerré los ojos y pedí siempre estar con justin. Abrí los ojos y justin me miraba sonriendo, le devolví la sonrisa se acercó y me beso. Nos hizo frío así que entramos, nos tapamos y dormimos abrazados como ya nos estábamos acostumbrando.



《In the name of the law》. jbDonde viven las historias. Descúbrelo ahora