El tiempo parecía detenerse cuando éramos solo nosotros dos, no sabía cuánto había pasado desde que iniciamos esta especie de "cita de en sueño", pero sin duda ambos queríamos que no acabara.
Hablamos acerca de su trabajo aquí en la tierra de los muertos y sobre algunas de mis experiencias en el nomo primero antes de que se apareciera ante mi usurpando el nombre de su anfitrión.
- Puede que sea raro, pero no encuentro este sitio tan escalofriante como otros lo harían - sonreí aun recostada con él a mi lado - o al menos no estando contigo
- Esas son buenas noticias - dijo jugando con un mechón de mi cabello - significa que podemos repetirlo
- Siempre que no te metas en problemas -- asentí posando mi vista en su collar y mi mirada no pudo evitar ver un poco más que solo eso
- Puedes tocar si eso quieres - su voz contra mi oído me hizo estremecer y sonrojar al mismo tiempo
- Supongo que, dado que te tomaste la libertad de bañarme estando ebria - le recordé escuchándole reír - es lógico que pueda hacerlo
- Solo hazlo, Jane - sonrió tomando mi mano y dejándola sobre su corazón
Por mucho que me interesase recorrer ese territorio, llevé mis manos hasta sus, un tanto puntiagudas, orejas y las acaricié tomándole por sorpresa.
- ¿Te he dicho que son muy parecidas a las de un perro? - reí viéndole fruncir el ceño
- Eso es ofensivo - pretendió estar serio, pero sus instintos le fallaron al inclinar la cabeza al rascarle detrás de ellas
- Ofensivamente cierto - sonreí escuchándole gruñir levemente, pero su expresión demostraba que le gustaba - eres muy tierno cuando quieres
- También soy tu dios patrón, algo de respeto sería agradable - se quejó
- Oh, querido, me temo que es muy tarde para eso - besé su mejilla - te veo como mucho, mucho más que eso - me incliné para besarle y me correspondió con la misma fuerza. Él mimo había dicho que deseaba que le viera como algo más y lo había conseguido
Bajé mis manos comenzando a recorrer su pecho, tan cálido a mi tacto y, a pesar de ser un dios que no luchaba para nada, lucía en forma. Pase mis dedos de arriba abajo, sintiéndole estremecerse ante mí para luego romper el beso en lo que dejaba pequeños besos sobre su rostro. Soltó algo parecido a un ronroneo perruno cuando dejé besos sobre su cuello y eso causo que me alejara riendo
- Me pregunto si tu posición favorita es la que tengo en mente- pensé en voz alta
- ¿Qué? - abrió los ojos mirándome con curiosidad
- Olvídalo - reí por mis ideas locas y volví a besarle
Dentro de nada, Anubis estaba sobre mí y se alejó lo suficiente para imitarme dándome pequeños besos en el rostro.
- Me parece que es mi turno - sonrió dejando entrever sus dientes, sus colmillos tenían similitud con las de un chacal también
No pude mencionárselo porque comenzó a besar mi cuello mientras que sus manos subían y bajaban por mi cintura, puede que fuese un sueño, pero el calor del momento podía sentirse muy real.
- Supongo que esto cuenta como sueño húmedo - reí cuando lamio detrás de mi oreja - hey, creí que no eras un chucho
- Bueno, tu pareces muy a gusto con la idea - apretó mis caderas y volvió a enterrar el rostro en mi cuello
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El secreto de Anubis (Anubis y tu)
FanfictionHola chicas, mi nombre es Zafirina y esta es la primera novela que hago sobre Anubis, espero les guste y comenten. Si están interesadas en Nico di Angelo o Dominik Santorski, pueden ver novelas sobre ellos en mi perfil :D