El secreto de Anubis (Anubis y tu)

18.- Verdaderos sentimientos

J

A

N

E

Desperté con un terrible dolor de cabeza y la luz del día entrando por mi ventana no era de mucha ayuda. Entreabrí un poco los ojos para ver la hora en mi reloj, tenía media hora para alistarme y recomponerme a mí misma o llegaría tarde al instituto. Definitivamente la cerveza suave puede tener un efecto muy parecido a la normal si tomabas de más.

Ingresé a darme un baño para refrescarme un poco y en lo que iba tratando de recordar la fiesta de anoche y como había llegado a mi habitación, algunas partes comenzaron a llegar. Recordé el baile con Félix, pero en alguna parte el recuerdo fue cortado por uno en el que Walt me llevaba sobre su hombro

Eso explicaba cómo había llegado a mi habitación, Walt no debía de estar muy contento por la forma en la que las cosas se habían dado.

Salí del baño lista para vestirme, cuando más recuerdos empezaron a llegar a mí y me paralicé en cuanto tuve varios con Anubis presente.

¿En qué momento había vuelto? Un segundo estaba con Walt camino a mi habitación y en el siguiente era Anubis quién estaba conmigo, tocándome, besándome y...dioses egipcios, ¿me había bañado?

Mi cara tenía que estar tan roja como un tomate por los recuerdos, no había forma de que saliera al comedor y le viese si es que seguía siendo él, pero eso no lo sabría sino salía ¡Rayos!

Intenté hacer el tema a un lado mientras me vestía para luego tomar mi bolso y salir de mi habitación, pero en cuanto llegué a las escaleras comencé a ponerme nerviosa. En verdad no sabía cómo iba a mirarle luego de cómo me había comportado, luego de lo que al parecer había sido un momento un tanto intimo entre ambos.

- Jane...

Grité girándome con la mano en el pecho, asustada por la repentina aparición de Walt, si es que era Walt, pero el dolor de cabeza volvió a atacar dejando mis preocupaciones en segundo plano

- No quería asustarte, lo siento - se disculpó para luego ver que le miraba un tanto nerviosa - ¿estás bien?

Intentó tocarme, pero me alejé señalándole

- No es fácil reconocerles a ambos, dime quién eres ahora - demandé comenzando a sonrojarme porque, fuese quién fuese, el dios seguiría presente

- Escucha, no sé qué haya hecho Anubis, pero soy Walt -explicó alzando las manos- solo quiero saber si estás bien

Estuviese escuchando o no, me permití relajarme y toqué mi cabeza por el dolor

- La cabeza me está matando - me quejé - y no puedo creer que no sepas nada de lo que pasó

- Créeme, cuando Anubis quiere mantener algo solo para él, puede hacerlo - me aseguró guiándome hacía abajo - te prepararé algo para el dolor, pero espero que hayas aprendido la lección y no vuelvas a tomar en tu vida

- Bueno, no tengo deseos de beber en mucho tiempo - comenté haciendo una mueca

- ¿Segura que quieres ir al instituto así?

- Sí, no creo que deba quedarme - dije pensando en mi dios patrón, realmente no quería enfrentarlo aún - ¿Qué hay de los demás?

- No irán, hasta ahora siguen durmiendo- sonrió -digamos que fuiste la única en irse a dormir "temprano"