85. _________ Fogelberg.

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Astrid salió corriendo y nunca respondió mi pregunta.

-¿Dónde está él? -Le pregunté a Patan cuando vino a verme.

Se puso nervioso y salió corriendo sin decir nada.

-¿Cuándo va a venir conmigo? -Intenté con Patapez, pero él también huyó.

-¿Por qué no está aquí? -Y Brutilda tampoco tuvo una respuesta.

Había estado preguntando lo mismo todo el día y la única respuesta de todos era salir corriendo. ¿Tan malo era? Debía haber una razón muy fuerte para que nadie dijera nada.

Finalmente Valka entró en la habitación.

-¿Cómo te sientes? -Preguntó con voz maternal.

Su dulce tono casi me distrae. Fue un golpe bastante duro ya que mi madre siempre fue hostil y fría.

-Quiero verlo -demandé.

-Hiccup está muy lejos, hay asuntos importantes que debe atender -acarició mi mejilla y me aparte de inmediato.

-¿¡Qué clase de asuntos!? ¿¡Es que yo no soy lo suficientemente importante!? -Grite.

-Tranquila cariño, lo eres pero de verdad es algo que no podía abandonar.

-¿¡Y a mí sí me podía dejar!? Incluso estando al borde de morir... Yo, yo no puedo imaginar qué es tan importante.

-No lo juzgues aún, espera por sus motivos.

-¿¡Esperar más!? Ya esperé bastante en esta cama, ¿cómo me pides que haga eso? ¡Yo quiero verlo ahora! ¡Lo necesito!

La paciencia de Valka se perdía conforme mis gritos histéricos aumentaban, podía notar la tensión en sus manos y el parpadeo incesante.

Sólo faltaba una última gota para hacerla hablar, un pequeño golpe para la ruptura total.

-Él no me quiere más, debe ser eso.

Por supuesto que no lo creía así pero funcionó a la perfección para hacer a Valka hablar.

-¿¡Cómo dices eso!? Hiccup te ama más que a su vida. Tanto, que está en Gloom controlando a todo tu maldito pueblo chiflado.

Me sorprendió bastante su enojo y el color rojizo de sus mejillas. Sin embargo, sonreí porque obtuve lo que deseaba y ella comprendió de inmediato lo que había hecho.

-Maldición _________, eres una chica lista.

Encuentrame (Hiccup y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora