Capítulo 13

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Las clases continuaron sin novedad. El tiempo parecía no avanzar y Joel no había conseguido prestar atención en ninguna de las asignaturas. Su cabeza estaba en lo que había ocurrido hace un rato y en la noticia que le había dado su hermano.

La campana sonó informando el final de las clases y Joel agradeció internamente por ello. Guardó sus cosas en la mochila y se dirigió a la salida.

- Hey hola Joel! - La voz del puertorriqueño lo detuvo. - Como estás? No hemos hablado desde la fiesta!

Chris, Richard y Erick caminaban detrás de ellos. Los dos primeros reían sin parar mientras que el cubano se encontraba en silencio siguiendo sus pasos.

- Hola Zab, todo bien, gracias. Oye te agradezco mucho que me invitases a la fiesta aunque termine siendo un fastidio y... Lo siento por eso. - Joel agachó la cabeza algo avergonzado.

- Enserio Joel? No hiciste nada! Los chicos me dijeron que te pasaste un poco de copas pero nada más, no tienes que preocuparte por eso - Zabdiel apoyo su mano en el hombro del mexicano con cariño.

- Como se nota que no te jodió la noche a ti! - Se escuchó de fondo con su notable acento cubano.

- Enserio que te pasa? - Joel paró en seco y se frenó frente a Erick mirándole fijamente a los ojos. Ni si quiera él mismo sabía de donde había sacado el valor pero se estaba empezando a hartar de las estupideces del ojiverde. Bastante estúpido se sentía él todo el tiempo como para tener que escuchar a un imbécil recordárselo todo el tiempo - Enserio dime! Que te he hecho para que me odies tanto? Porque no me ignoras y ya esta!

El cubano no lo pensó dos veces y lo agarró del cuello enfrentándolo de cara. - Que me pasa? Tú me pasas! Te crees que me engañas con tu carita de niño bueno?? Muerete Pimentel! - Lo soltó y lo empujó contra la pared.

Todos estaban parados y nadie se atrevía a decir nada. Joel se quedó mirando los ojos de Erick que irradiaban rabia y odio hasta que agachó la cabeza con pena. Recogió la mochila la cual había caído al suelo tras el empujón y salió a paso apresurado de allí. No entendía porque le odiaba tanto pero sabía que Erick le hacía sacar sus mayores temores.

- Eres imbécil o que te pasa Erick? - Zabdiel le recriminó una vez el mexicano había desaparecido de su vista - Porque no le dejas en paz y ya esta?

- Por que no te vas a las mierda? Ese imbécil siempre me está enfrentando y la culpa la tengo yo? - Erick mostraba frustración.

- Enfrentando? Pero que dices? El no te ha hecho nada! Eres tú el que le haces la vida imposible desde que llego! Enserio te estas comportando como un cabrón! - Zabdiel no podía entender la actitud de su amigo.

- Sabes que Zabdiel? Que te jodan! A ti y a todos! - Erick recogió su mochila del suelo y salió golpeando el hombro del puertorriqueño.

Chris y Richard continuaron parados sin decir nada. El ecuatoriano agarró el brazo de Zabdiel - No le hagas ni puto caso Zabdi, no se lo tengas en cuenta. No sé qué le pasa últimamente... - El rizado asintió con la cabeza y les hizo un gesto para que continuasen el camino.

- Por fin apareces, donde estabas? Llevo un buen rato esperándote! - El pequeño empezó a caminar allí lado de su hermano hacia su casa - Estás bien?

- Si claro, solo.. estoy un poco cansado Israel, hoy ha sido un día largo... - Joel prefirió no contarle lo sucedido a el menor. En realidad ni el mismo tenía muy claro que había pasado y como habían llegado a ese punto. Al comienzo de la mañana quería ver a Erick para poder hablar de lo sucedido el sábado por la noche y horas más tarde casi acaban en una pelea.

- Está bien, ya sabes que si quieres contarme algo aquí estoy - Israel notó que los ánimos del mayor estaban por los suelos pero prefirió no agobiarle con preguntas. - Bueno por lo menos estarás feliz por lo del concierto no?

- El mexicano no si quiera se acordaba de eso después de lo sucedido - Por su puesto, va a ser grandioso! No veo el momento de que llegue. Seguro que tu amiga podrá meternos verdad?

- Claro que sí! Si no cumple con su promesa te doy permiso para que la mates.. - Los dos rieron ante el comentario.

Una vez en casa Joel se acostó en su cama sin demasiado ánimo. Tenía las mismas sensaciones que en su anterior instituto. Estaba solo y siempre iba a ser así, no conseguía congeniar con las personas y el era consciente de ello por lo que no le afectaba demasiado. Se había acostumbrado a vivir así y por intentar ser alguien que no es no había hecho más que meterse en conflictos.

Su móvil comenzó a vibrar insistentemente.

Mensaje de Zabdiel:
Hola Joel, oye siento mucho lo de antes enserio, Erick no es así, sólo está un poco idiota últimamente. No quiero disculparme por el ni mucho menos, pero quería que supieras que a mi si me agradas y me gustaría seguir en contacto contigo. Lo siento.

Joel miró su móvil durante unos segundos más sin saber muy bien que responder. Zabdiel había sido amable con el desde el primer día y le consideraba una muy buena persona. Pero estaba claro que con Erick en el grupo el no tenía nada que hacer con ellos.

Mensaje de Joel:
Gracias Zabdi. No tienes que disculparte por nada, es más, te agradezco que siempre seas tan amable conmigo. A mí también me gustaría seguir en contacto contigo.

El mexicano tiro el móvil a un lado de la cama. No le apetecía seguir hablando. Se acostó de medio lado intentando no pensar demasiado y se quedó dormido al instante.

La semana continuó sin demasiadas novedades. Los días en el instituto habían sido aburridos y largos.

Desde el día del conflicto, Erick y Joel no habían vuelto a dirigirse la palabra e incluso evitaban mirarse más de lo necesario.

La relación de Joel con Zabdiel había mejorado considerablemente y se podían llamar amigos. Con el resto, era indiferente, se saludaban y poco más. Joel entendía la postura de éstos aunque seguía sin entender por qué el cubano le odiaba de esa manera.

Por fin había llegado el viernes y Joel estaba más que emocionado. El día del concierto había llegado y las miradas e indiferencias de los demás ese día no le importaban.

Cuando sonó el timbre salió casi corriendo en busca de su hermano el cual ya se encontraba en la salida igual de eufórico que él. Los dos caminaron rápidamente a su casa y se acostaron un rato para estar despejados a la noche.

Joel se despertó, y caminó directo a la ducha. Allí se mantuvo durante largos minutos con una sonrisa en su rostro. Estaba feliz y emocionado. Se colocó una toalla en su cintura y se colocó su mejor atuendo.

Se miró al espejo y por una vez no se sintió ridículo, se veía bien.

- Joel estás listo? - Este asintió y agarró de los hombros a su hermano mientras caminaban por el pasillo - He quedado con mi amiga en la puerta trasera del recinto. Vamos en tu coche?

- Claro, vámonos ya o llegaremos tarde, joder Israel está va a ser nuestra puta mejor noche de toda nuestra vida!

Los hermanos llegaron al lugar de el concierto con cierto nerviosismo. Estaban esperando en el lugar acordado con una amena charla.

- Hey! Venir que hay que entrar ya! - Ese acento, ese jodido acento...

Miedo a enamorarme - Joerick  {Terminada}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora