Still love you, like before (HaeHyuk/Kyumin) [TERMINADA]

Capitulo 2

  El sol comenzó a molestarle en los ojos, pero aun así, no quería levantarse. No quería seguir sintiendo aquella opresión en su corazón herido. ¿Qué acaso no podía acabar con todo?

  Escuchar la conversación de su mejor amigo con Kyu tampoco había ayudado de mucho. Se había hecho el dormido cuando Min había ingresado en su habitación para no tener que escucharlo, o que le preguntara si se encontraba bien. No quería aquello y sabía que por su culpa estaba acabando con la relación de ambos y se culpaba por ello, pero ¿Qué podía hacer?

  No era como que de la noche a la mañana cambiaría. No podía hacerlo. No podía no seguir autodestruyéndose, pero no podía arrastrar con ello a las personas que se preocupaban por él. No podía. No quería. Y no iba a hacerlo.

  Se levantó pesadamente de su cama y se encaminó hacia la cocina, donde sabía que se encontraba Min por todo el ruido que hacía. Supuso que debía de estar cocinando algo.

  Miró la hora del reloj que tenía en la cocina. El mediodía. Su amigo, otra vez, no había ido a trabajar para cuidarlo, incluso se había perdido la cita con su novio.

  Hyuk apretó fuertemente los puños a cada lado de su cuerpo y agachó la mirada. No se merecía aquellos cuidados que Min le daba.

-¡Oh!- lo oyó exclamar y se volteó a verlo- Ya estas despierto- comentó con su sonrisa característica que lo hacía ver como un niño.

  Como un niño, pensó en sus adentros y la sonrisa de Donghae apreció en su mente. Sintió angustia dentro de él al recordar aquello y desvió la vista de su amigo.

-Hice la comida. Arroz con algo de pescado no creo que te caiga mal- comentó mientras colocaba el pescado ya cocido en una fuente para poder servirlo ya en la mesa que él había preparado.

-Min- lo llamó y este se volteó con la bandeja en su mano.

-¿Qué sucede?- le preguntó sin quitar esa sonrisa de su rostro.

  Hyuk apretó los puños hasta emblanquecerlos, hasta sentir como un líquido mojaba sus palmas. Ya el dolor no le afectaba. Ya ni siquiera sentía el dolor de cortarse.

-¿Por qué sigues aquí?- le preguntó finalmente, pero no recibió respuesta, en cambio escuchó una exclamación y vio cómo su amigo se acercó a él, dejando antes la bandeja, y le tomó ambas manos, viendo claramente los cortes en su palma por apretar sus manos.

-Ven. Hay que curar eso- le dijo e intentó caminar hacia el baño donde había un botiquín de primeros auxilio, pero Hyuk se quedó en el lugar y alejó bruscamente sus manos del agarre de Min.

  Este se volteó, justo cuando sintió las manos de Hyuk apoyándose en su remera y golpeándolo fuertemente contra la pared de la cocina.

  Min lo miraba con cara desorbitada por el repentino arranque de Hyuk, pero no dijo nada. No podía, porque de un momento a otro, los labios de Hyuk estaban sobre los suyos, succionando sus labios, mordiéndolos, pero aquello no fue lo que lo dejó helado por completo.

  Hyuk bajó una mano hasta sus pantalones y comenzó a desprender el botón, para luego bajar la cremallera.

  Min intentó quitárselo de encima, pero al no poder hacerlo por la fuerza que su amigo ejercía sobre él, no tuvo otra mejor opción que golpearlo en las partes bajas.

  Hyuk cayó en el suelo con las manos sobre su entrepierna por el dolor que sentía.

-Eres un idiota- fue lo único que escuchó antes de ver cómo Min se iba de su departamento, golpeando fuertemente la puerta.

  Y allí estaba, tendido en el suelo de su departamento desierto. Solo. Completamente solo, como quería estar. Como tuvo que haber estado todo el tiempo. Sin arrastrar a nadie con él. Sin hacer sufrir a nadie más que a él mismo.

  ¿Ya podría acabar con todo? Si, ya podría sin sentir que heriría a alguien se contestó mientras se intentaba reincorporar.

***

  Cuando llegó a bajo del edificio de Hyuk, frenó y miró hacia arriba.

  ¿Qué había sido todo aquello? ¿Por qué lo había hecho?

  Su celular, que gracias a dios lo llevaba en el bolsillo y no se lo había olvidado en el piso de Hyuk, comenzó a sonar.

-¡Kyu! Yo… yo… -comenzó a decir, mientras sentía cómo las lágrimas comenzaban a viajar por sus mejillas. No sabía que sentir ni pensar. Todo había sucedido tan rápido que su cerebro se negaba a procesar tanto.

-Lo siento Min- escuchó a Kyu del otro lado con voz cansada- Sabes que cuando estoy cansado no pienso- comentó.

-Kyu... Kyu… Hyuk… Hyuk…- ¿podría llegar a decirle lo que había pasado minutos antes?

-¿Qué sucede Min? ¿Qué pasó con Hyuk?- le preguntó preocupado y con una nota de alteración que Min logró sentir.

  Min se estaba debatiendo en su cerebro si decirle o no. No podía decirle. ¿O sí?

-Yo… él… él…- comenzó a tartamudear, pero un grito le impidió continuar.

  Miró hacia la mujer que había gritado. Esta miraba hacia arriba. Hacía el edificio de Hyuk y los peores pensamientos de Min pasaron por su mente.

  Levantó la vista y allí estaba. En el séptimo piso. Donde Hyuk vivía, estaba él, en el balcón del lado de afuera. ¿Saltaría?

  Los ojos de Min se abrieron de par en par.