Still love you, like before (HaeHyuk/Kyumin) [TERMINADA]

Capitulo 8

  El rostro de Donghae era de pura irritación cuando ingresó a su dormitorio y vio que no se encontraba solo allí.

  Salió de su habitación hecho una furia, buscando al claro culpable de ello.

  Cuando divisó la melena rojiza de su amigo, lo volteó bruscamente y lo estampó con la primera pared más cerca. En el rostro del pelirrojo solo se dibujó una sonrisa divertida, mientras que los que se encontraban a su alrededor miraban atentos para ver si no tendrían que intervenir. Porque Donghae se veía con todas las intenciones de asesinar a su amigo.

-¡Que mier*a crees que estás haciendo!- le gritó en la cara ya que lo tenía a apenas centímetros de su rostro.

  El pelirrojo solo pudo reírse por la respuesta que había tenido Donghae ante su “acto de solidaridad” como él lo había nombrado.

-¡Contéstame idiota y no te rías!- le exclamó sin siquiera moverse un milímetro de él, y con la cara desfigurada de ira.

-Tendrías que verte en un espejo amigo- le dijo sin quitar esa sonrisa que comenzaba a fastidiar a Hae, quien poco a poco, iba perdiendo la poca, sin decir ninguna, paciencia que le quedaba.

-¿No te he dicho clara y explícitamente que quería que lo llevaran a su casa, a su cama y no a mi casa y muchos menos a mí cama?- le preguntó entre dientes mientras apretaba con más fuerza la camisa blanca que llevaba puesta su amigo.

-¿Qué tiene de malo?- preguntó con inocencia, aunque de inocencia no tenía nada, y se encogió de hombros.

  Miró por encima del hombro de Donghae, divisando a sus compañeros quienes le hacían señas para que cortara con el rollo de idiota porque si no la pagaría caro.

-¿Ustedes le ven algo de malo chicos?- les preguntó con una sonrisa irónica.

  Donghae poco a poco desvió la mirada del pelirrojo para dirigirla hacia sus amigos a sus espaldas, quienes desviaron la mirada y se hicieron los desentendidos. No querían tener que pagar las consecuencias de cabrearlo, como lo iba a hacer Heechul si seguía molestándolo.

-Vamos Donghae- le dijo colocando sus manos sobre las de él, quien, al sentir el contacto, volvió su vista azulada, a la marronosa de su amigo- No es para tanto ¿o sí?

-¿No es para tanto?- le preguntó irónicamente intentando controlar sus ganas de asesinarlo en ese mismo momento- ¿Me estás tomando el pelo Heechul? ¿Qué acaso te golpeaste la cabeza con algo realmente duro?

-No.

-¿Entonces no recuerdas que en esta misma bendita casa vive Yoona?

-Lo recuerdo perfectamente- le contestó serio y Donghae, no sabía si pegarle o mandarlo de una patada en el trasero a la estratosfera.

-A ver Heechul- comenzó, soltando su agarre de la camisa y llevándose una de sus manos al puente de su nariz.

  No lo asesinaba ahí mismo porque le tenía aprecio, porque si hubiese sido cualquier otro, hubiese cobrado minutos atrás, las estupideces, con su vida.

-¿Qué acaso tu neurona no fue capaz de hacer sinapsis y darse cuenta de que si Yoona ve a…?

-¿A quién voy a ver?- preguntó una voz a sus espaldas, haciendo que todo el cuerpo de Donghae se tensara y Heechul mirara hacia la dirección de donde había provenido la voz.

  Donghae se volteó, encontrándose así con los ojos marronosos de Yoona, quien estaba acompañada por una mujer, esbelta, de figura modela e igual de alta que su… bueno, esposa. Él la conocía.