es complicado saber qué es lo que siento, porque usualmente no siento nada, así que al no tener experiencia, improviso sobre la marcha. a veces no sé si es cansancio, mental, físico, emocional, lo que sea. mi mente pesa y mi pecho se estruja, ¿acaso debo cargar siempre con este sentimiento? ¿de dónde nace? ¿siempre existió?
mi afición a las noches se incrementó, y no necesariamente por la bella y atormentada luna, la soledad se hace presente en ese momento, y no sé si quiero que mis demonios se desplieguen fuera de mi cuerpo para liquidarlos o porque el sentimiento de estar a su lado me genera conformidad.
no hay un final para este escrito, no esta vez, porque por ahora no lo hay en mi mente que trabaja todo el tiempo
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Narraciones de una ordinaria
PoésieEscribo porqué me gusta, y me gusta porqué escribo.