Durante su infancia nunca tuvo muchos amigos. Si se atreviera a confesarlo, diría que ninguno en realidad. Había pasado por muchos colegios privados. Quizás porque su madre se aburría demasiado rápido de su círculo social y tenía la necesidad de presumir ante uno nuevo. Fue a alrededor de su doceavo cumpleaños cuando entro a un nuevo colegio. Y sin mucho ánimo de hacer amistades, porque sabía que ningún niño se le acercaría, paso su primera semana en esa escuela. Alrededor de la segunda semana, se excusó para ir al baño y salió del aula de clases. Dejándose envolver por el silencio, camino lentamente por los pasillos hasta que llego a un pequeño jardín. En ese momento una suave y peculiar melodía se filtró por sus oídos, llamando su atención.
Ahí, delante de él, estaba la persona que pronto formaría parte de su vida diaria. Y sin que en ese momento lo supiera, conoció a su primer y único amigo. El chico se presentó a sí mismo como Luhan, extendiéndole una mano amistosa. Yixing regreso el saludo y a partir de ese gesto, sus días empezaron a mejorar. Resultaba que Luhan había ingresado en ese colegio gracias a un programa de becas. Su clase social no era muy bien respetada por los demás, por lo que también estaba solo.
Sus mundos eran muy diferentes. Mientras que a Yixing un auto negro lo esperaba al final del día escolar, Luhan sacudía una mano en su dirección y volaba hacia la parada de autobuses, pues debía ayudar a su madre con el negocio que tenía montado en su hogar. Ella era costurera y la creadora de esa maravillosa melodía que Luhan siempre entonaba.
En él fue capaz de encontrar un amigo, un hermano, y sobre todo, un gran confidente. Podía desahogarse por horas a su lado y al final, el chico solo sonreía y le decía algo como: "Yixing, simplemente has lo que tú quieras hacer."
Y el castaño suspiraba, porque no era tan fácil como parecía.
Desafortunadamente, la dicha de tener a una persona especial en su vida no le duro mucho. Su madre termino enterándose de su amistad y obviamente, se disgustó. Fue un día en el que regresaba a casa con una gran sonrisa que Yixing supo que su felicidad se había terminado. La mujer lo esperaba sentada finamente en el sillón del recibidor y de ahí, todo comenzó a ir mal.
Todavía podía recordar exactamente sus palabras.
"Yixing. Ese chico es el hijo de la costurera. No puedes estar con él. ¿Qué va a decir la gente de nuestra familia? Mira, simplemente, aléjate de él. ¿Por qué no mejor haces amistad con el hijo de los Yang? Es un buen chico y lo mejor de todo es que está a nuestro nivel. ¿Entendido?"
También recuerda haber asentido para luego marcharse a su habitación. Esa noche, mientras se preparaba para ir a dormir, Yixing se dio cuenta de que no quería.
Él no quería ser amigo del hijo de los Yang. Él quería ser amigo de Luhan.
Así que desobedeció.
Y continúo su amistad hasta el día en que tuvo que poner un pie en el avión con destino a Corea. Recuerda haber tragado el nudo en su garganta y aguantarse las lágrimas por dejar a la única amistad que tenía en el colegio. Subió a ese avión y sonrió, rindiéndose ante esas dos personas enfrente suyo. Sus padres.
Por más que lo deseara, jamás pudo despedirse.
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Los brazos de Luhan lo rodean efusivamente y Yixing no sabe qué hacer. Ha pasado mucho tiempo desde la última vez que recibió un abrazo. Levanta sus temblorosas manos y coloca sus brazos torpemente alrededor del chico. Hay un calor extendiéndose en su pecho y de alguna manera se siente bien, pero también tiene miedo. Ya no recuerda la sensación.
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The Comfort Zone - BaekLay
FanficRegla 1 Queda absolutamente prohibido suspender/reprobar alguna clase de la curricula. "Los alumnos de nuestras instituciones son personas privilegiadas, por lo tanto, es imprescindible que aprueben todas las clases impartidas." Regla 2 Respetar...