Capitulo 27

269 33 0
                                    


En el planeta sayayin Vegueta y su padre llegaban a su palacio

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

En el planeta sayayin Vegueta y su padre llegaban a su palacio

-Bienvenido s sus excelencias esperamos que su viaje allá sido placentera

-Hola Zanco ¿Qué tal todo durante nuestra ausencia?

-Muy bien rey Vegueta ninguna novedad todo esta tal y como ustedes lo dejaron

-Muy bien no podría esperar menos de mi consejero real

-Zanco ¿Dónde está Napa? Necesito hablar con el

-Se encuentra en el andén 15 espera a la comitiva del rey Brocdok para los preparativos de la pedida de mano de la princesa Daiana tal como lo pidió su padre príncipe

-Bien que alguien más tome su lugar y dile que lo espero en mi habitación

Vegueta se dirigía rumbo a su cuarto dispuesto a descansar del viaje cuando su padre lo detuvo

-Espera ¿A dónde crees que vas?

-Ya escuchaste no dije que hirió a mi habitación

-Por supuesto que no lo que tengas que hacer lo harás después ahora hay mucho que hacer para esta noche

-Pero padre

-Ya he dicho, Zanco que Napa no deje su puesto y me avise enseguida en cuanto lleguen los invitados mientras tanto lleva a mi hijo con el sastre para que le prepare una armadura de gala que tiene que verse bien para esta noche

-Como ordene su alteza, por aquí príncipe

De mala gana Vegueta fue tras Zanco a ver al sastre real para prepararse para el compromiso al que él estaba en contra

-Maldita sea

-Más vale que se acostumbre príncipes después de hoy sus obligaciones cambiaran y empezara a prepararse para tomar el lugar

-Y quien ha dicho que yo quiero tomar el lugar de mi padre

-Bueno es lo más lógico yo pensé que usted

-Pues no pienses y deja de entrometerte en lo que no te importa

-Lo lamento mi señor

El sastre real le confecciono una armadura de gala en un segundo a Vegueta quien se miraba en el espejo deseando no estar ahí

-Que le parece mi señor

-No me gusta pero supongo que no tengo otra opción, ¿Ya puedo retirarme a mi cuarto?

-Por supuesto excelencia en cuanto su prometida llegue le avisare

Salió de la habitación con dirección a su cuarto al llegar al abrió su ventana y se sentó en su balcón con la mirada dirigida hacia la tierra deseando solo estar con aquella peliazul que le robaba poco a poco el corazón.


El compromisoWhere stories live. Discover now