PrimeraCita♡(1/2)

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Teníamos un serio problema.

Hoy sería la cena más importante de nuestra vida.

Y la casa parecía de locos.

Mamá estaba tratando de hacer spaghetti, mientras que mis amigas y yo estamos en mi habitación.

-¿ Qué te pondrás hoy? - pregunto Karolina arreglando lo que se pondría hoy.

Esa era una buena pregunta, ¿qué me pondría hoy? No sabia.

Los chicos se habían ido a dejar a  Christina y Aspen en el aeropuerto por que Aspen iría a visitar a alguien y Christina tenía una fiesta de Bennefit.

- No lo sé- me paré de mi lugar y fui hacia mi armario para ver que me pondría.

El teléfono de alguien sonó. El de Helena, seguramente era Daniel tratando de hablar con ella otra vez.

Concentrate Shir, ya no te gusta Daniel.

Camine con dirección a la cocina tratando de olvidarme de el estúpido Daniel y su estúpida sonrisa, y sus muy estúpidos ojos encantadores... maldita sea.

- Mamá, necesito ayuda. - solte frustrada.

Ella se acercó rápidamente a mi aventandome una bolsa de papel a su paso.

- De nada- dijo mientras salía de la casa.

Últimamente ella estaba muy ajetreada. Papá no estaba en Los Ángeles por que mi abuela Cloe estaba enferma, así que tuvo que viajar a Canadá.

Subí las escaleras pesadamente.

Mis amigas hablaban por teléfono con los chicos.

De un derrepente las chicas se callaron dejando a los chicos al otro lado de la línea riendo.

-... ¿chicas?- se escucho la voz de Zach.

- Hola- dije acercándome a el teléfono.

- Hey, Shirley- saludaron los chicos.

-Te extraño, bae- fingió llorar Zach.

- No, yo extraño más a Shirley- interrumpió Jonah.

- De que hablan bola de pelados... Yo la extraño más y ella me extraña más a mi, ¿verdad, babygurl?- solte una risita al escuchar a Jack hablar.

Desde que me confesó que le gustaba  estaba muy lindo conmigo. Pero me sentía rara, Por el simple hecho de que yo no sabía si sentía algo por el.

- Callense ya- los interrumpo Corbyn. Por fin alguien decente - Todos sabemos que quien más la extraña es Daniel- Rodé los ojos al oírlo.

Me extrañaba tanto que ni los buenos días me daba.

- Calmense, exagerados, que sólo no nos hemos visto desde, ayer después de la cena, por que cabe mencionar que se quedaron  a cenar- dije rodando los ojos.

- Shirley extraña más a Daniel que a cualquiera de ustedes- soltó Karoline.

Todas empezaron a reír. Que bueno que mis amigas me apoyan y siempre están de mi lado. cof* cof* sarcasmo cof* cof*

Me paré para irme a arreglar a el baño.

Tome mi teléfono y puse la música en aleatoria, Trust Fund Baby. Mundo, ¿por qué me odias?

Mi baño duro, sin mentir, como media hora, y cada maldita canción que transcurrió era de los chicos y sus mashups.

Salí de el baño si no es que más molesta que antes. Pero el problema aquí era que no sabía por que estaba molesta.

Seguro ya me va a bajar.

Afuera ya no se encontraba mis amigas, supongo que se fueron a arreglar.

Tome mi ropa interior y me dispuse a ponermela.

Tenía curiosidad de que era lo que había en la bolsa, así que después de ponerme la ropa interior busque la bolsa para ver que contenía.

Dentro de está había un vestido rosa palo al cuerpo liso de manga larga. Era precioso.

Mire adentro de la bolsa, en ella, aparte de el vestido había un sobre con una cartita adentro:

Querída Shirley:

Espero que uses esto en nuestra cita de el día de hoy, lo mire e inmediatamente me acordé de ti.

Con amor, Daniel.

Maldito, yo trato de olvidarte, y vienes aquí, me compras un vestido, me dices que te acuerdas de mi cuando no estamos juntos, y me firmas "con amor" una carta.

-Aaaaahg- solte un grito.

Me metí al baño algo ¿enojada? Ni siquiera sabía que tenía o que sentía.

Cepille mi pelo y me arregle casi nada la cara.

La puerta de el cuarto se abrió, yo esperaba que fuera alguna de mis amigas o mi mamá, o no se, Shawn Mendes.

Pero en su lugar había un Daniel con una sonrisa, un ramo de flores en una mano y un regalo en la otra.

Su sonrisa se borró al verme, supongo que por que no esperaba a verme en ropa interior.

Soltó todo lo que traía en las manos para llevárselas a los ojos. Debo admitir que sólo verlo asustado por verme en ropa interior, me parecía lo más lindo, puesto que ya lo había hecho antes.

- Lo siento, lo siento, lo siento, lo siento.- decía sin parar.

Tome la bata mas cercana a mi y me enrollo en ella.

Daniel seguía con los ojos tapados, me acerqué a el para quitarle las manos de los ojos.

- Ya puedes ver - dije tomando sus manos.

Este estaba levemente sonrojado, lo mire con una sonrisa juguetona que ni yo sabía que existía dentro de mi.

-¿Eso es para mi?- dije inocente mirando lo que estaba en el piso. 

El seguía con la boca abierta mirándome, en un intento fallido asintió. Me levante de puntillas y deje un beso en la comisura de sus labios.

-Gracias- este seguía parado, ni se movía. 

me quite la bata para ponerme el vestido por encima.

-¿Como se me ve?- 

-Te... te ves.. hermosa- dijo mas relajado.

-Bien, hmm, ¿Ya nos vamos?- el asintió, levanto las cosas de el piso y las puso en la cama.

La primera cita no puede fallar.





Tenías Que Ser Latina- D.SDonde viven las historias. Descúbrelo ahora