Crystallize: El Encuentro

2. Capitulo 8

Al despertar lo primero que vi fue a Ian frente a mí y algunos alterados que me rodeaban. Con la respiración agitada y el sudor frío sabía lo que había sucedido, y lo único que esperaba era que no fuera nada grave lo que habían hecho.

Al calmarme escucho unos fuertes golpes, las camas al igual que algunos alterados estaban flotando en el aire. Varios me miraban con molestia, mientras otros con angustia. El sueño había provocado nuevamente que hiciera flotar las cosas y que congelara el suelo, con la diferencia que en esta ocasión había sido peor.

-¿Qué sucedió?- Me sente en la orilla de la cama con las manos en la cabeza por la fuerte jaqueca.

-¿¡Que paso!? Tú tendrías que saberlo- Me lo dice a gritos un chico que por el enojo se le resaltaban las venas.

-Perdón- Fue lo mejor que se me ocurrió decir- Lo que...

-¡Ya basta!- Exclama Ian con cansancio- Ven- Me ofrece su mano.

Todos entre quejidos y molestia se dispersaron en la habitación y pusieron en pie las camas. No había sido mi intención haber hecho eso y realmente me sentía mal, ya que a algunos chicos los había lastimado.

Saliendo de la habitación él se aferra fuertemente de mi mano y en un abrir y cerrar de ojos aparecimos en la cocina. Era horrible la sensación al tele transportarse, el aire te es insuficiente y sientes como si te succionara. Ian suelta mi mano para ir directo al almacén, toma una taza y un sobre, velozmente me prepara una taza de chocolate caliente. Con la taza en mis manos únicamente observo el chocolate que sacaba vapor y el recuerdo del sueño cae de golpe en mi mente, trato de suprimir el mal recuerdo pero me es imposible, cierro los ojos intentándolo con todas mis fuerzas pero termino congelando el chocolate y la taza.

-Tranquila- Pone su mano en mi brazo, después de unos segundo la quita cuando le quema lo frio- Estas muy fría ¿Por qué estas así?

Descongelo el chocolate y tomo un sorbo de ello, tomarlo me relajo aunque me hubiera relajado más si hubiera estado caliente. Me sentía más tranquila pero no tenía paz.

-Un mal sueño- No quería decirle nada de ello.

-Necesito que me lo digas, solo de esa forma te podremos ayudar- Insiste con su voz dulce y tratando de encontrar mi mirada.

-Solo fue un mal sueño.

-Einer, fue más que eso. Un mal sueño no pone a todos a flotar y a congelar cosas. Kev intento suprimir tus habilidades pero era imposible, solo lo empeoro.

Realmente no tenía control cuando estaba soñando, esto era peor que tenerlos activo permanentemente, porque mis habilidades trabajan por si solas cuando querían, no tenía pleno dominio en ellas.

-Einer- Entra el mismo hombre que había estado dirigiendo la reunión de la propuesta- Te haremos revisión.

-¿Qué? ¿Por qué?

-General Sebastian- Le dice mientras se incorpora.

-No Ian- Aparta la vista de él y la posa en mí- Porque no es normal que a las dos de la mañana te levanten unos gritos porque están flotando sin control y congelan todo a su paso. Es un problema.

Estaba consciente de lo que había hecho y que dañe a algunos pero no fue mi intención, fue un accidente. Me enfurecía que acusarán de tal forma, si realmente hubiera querido dañar a alguien lo hubiera hecho.

-Si quiero evitarse ese problema tendrá que evita que duerma. Fue un accidente- Apriete mis manos contra la taza tratando de contralarme- O me iré para que ya no tenga problemas.