Domingo, 25 de febrero del 2018.No entiendo que sucede, todo es tan difuso, siento como millones de cuchillos calientes se incrustan en mi espalda. Siento que una persona invisible me ha empujado por un barranco, mi cuerpo rebota en la tierra áspera, las piedrillas se clavan en mi cuerpo, haciéndome abolladuras y heridas que comienzan a sangrar incontrolablemente.
Mi alma se sale de mi pecho y vuela en dirección desconocida.
Mi cabeza da vueltas, siento punzadas fuertes, como si mi cerebro se incendiara en llamas en su interior.
Trato de encontrar una maldita respuesta, pero p
mis intentos son infructuosos. Tal vez no hay una explicación lógica y él solo quería que se acabara.Y duele, mierda... Duele ver como se escapa de mis manos.
ESTÁS LEYENDO
Anotaciones de una niña pendeja.
Short StoryEscribiré cuando me sienta asfixiada, así que no se asusten si encuentran notas o frases corta venas. Mi corazón dicta a mi cerebro, que manda la orden a mis manos para teclear en la pantalla así que, mi estado de animo influirá de gran manera en la...