🌹Mi soledad; Tu Esperanza🌹

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Se separaron, no por la falta del aire sino porque unos 5 niños pequeños los miraban fijamente, los dos se avergonzaron, Riven quería esconderse entre la nieve mientras que Yasuo solo cubria su rostro con su brazo mirando al cielo.

— ¿Ustedes son como mis papás?— Pregunto un niño pequeño avergonzando más a la pareja.

— No, son como mis papás.— Respondió otro niño.

— Ellos no son como sus papás, nuestros papás están de aquel lado charlando... Vamos a seguir jugando me aburro ver a los adultos.— Contesto una niña para después ser seguida por los demás niños.

— Los niños son tan tiernos... Como vergonzosos...— Riven miro a su pareja que seguía cubriendo su rostro.— Bueno, tú también eres lindo.— Sonrió ante el comentario, Yasuo la miro y devolvió la sonrisa.

— Riven...— La nombrada miro a si pareja, Yasuo ahora la miraba con seriedad.— ¿Que es lo que haremos con aquella chica?— La albina dejó su sonrisa aún lado, volvió a perderse en el cielo buscando alguna respuesta a aquella pregunta.

— No lo sé... Tal vez deberíamos comenzar por pedirle información a Shon... Por ahora es nuestro único aliado en información y aún cuando nos pidió hacer​ una misión que para nada estábamos de acuerdo.— Yasuo solo chasqueo su lengua, no le gustaba recordar aquello que le molestaba.

— Si tú dices que es nuestro único aliado... No me gusta para nada eso... Podría pedirnos otra misión.— Respondió con un tono serio.

— Ella mataría al objetivo.— Riven parecía estar de acuerdo con Yasuo.

— Aún así... Solo de recordar que alguien te beso no creo que sea buena manera práctica volver a ayudarlo.— Ella suspiró.

— Bien, lo que tú digas... ¿Investigaremos nosotros?— Pregunto​ Riven tratando de encontrar una solución.

— Por ahora es lo mejor...— Los dos bajaron su mirada, cuando de pronto la albina miro a los juegos de los niños, veía como ellos jugaban con una chica un poco grande, el cabello de ella era por casualidad, extraño, sus puntas eran color aquas, largo y color café oscuro.

Era perseguida por los niños con una sonrisa, ella con agilidad se movía todo lo que se le cruzaba.

— ¡Vuelve aquí, te daremos una bola de nieve en la cara!— La chica les sonrió mientras seguía corriendo hasta llegar hacia ellos a lo cual se detuvo y los miro fijamente.

Los tres se miraban con atención, Riven notaba algo extraño en aquella chica... No sabía que era hasta que una bola de nieve dió en su cara.

— ¡Vamos, todos!— Los niños lanzaron más bolas de nieve dejando enterrada a la chica en la nieve.— ¡Ganamos!— Todos los niños se fueron triunfantes mientras que la chica salía de su tumba de hielo.

Ella tomó una libreta además un lápiz que había guardado en una bolsita, escribió algo y se los mostró.

"Lo siento si los interrumpí, es solo que jugaba con los niños y realmente no los ví." La letra de ella en ruso era impecable, parecía como si fuera de ahí pero el color aperlado de la piel de ella la delataba que era extranjera.

— Oh, no te preocupes, no molestaste para nada.— Aquella chica sonrió abiertamente, se levantó sacudiendo su vestido hasta que Yasuo noto algo raro en ella.

El dije que tenía en su cuello, lo distinguía de alguna parte, el vestido de invierno que ella vestía también parecía ser de una familia rica, pero aquel dije aún lo mantenía en duda.