Acéptalo de una vez. La única manera de tener éxito es fracasando. Si no estás dispuesto a fracasar un par de veces antes de lograr lo que te has propuesto, ni siquiera lo intentes.
Lamentablemente, es lo que le pasa a mucha gente. Ni siquiera lo intentan. Por el miedo al fracaso se pierden montones de experiencias maravillosas e innumerables satisfacciones, dejan de resolver sus problemas y evitan superar los desafíos que la vida les presenta.
Para no temer al fracaso, debes empezar sabiendo que no será eterno. No lo vivirás una y otra y otra vez. Algunas veces, tendrás que aceptarlo como parte del proceso de aprendizaje; y cuando te hayas golpeado lo suficiente, sabrás lo que no funciona y, por lo tanto, sabrás también lo que sí funciona.
No hay peor gestión que la que no se realiza. La única batalla que seguro se pierde es aquella que no se libra. Lo único ridículo de tener miedo al ridículo es, justamente, aceptarlo como parte de tus emociones.
Sacúdete de encima todos esos pensamientos limitantes y anímate a fracasar, para disfrutar así del camino hacia el logro.
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Susurros para el alma.
SpiritualEl sentido de los miedos y qué hacer con ellos, la importancia de la actitud con la que enfrentas tus circunstancias mas que las circunstancias mismas, la comprensión de el arquitecto de la propia vida es uno y la aceptación de que las cosas son com...