LEYES DE AMOR. SESSHOMARU Y RIN

MI FAMILIA, MI FUTURO

3 años después

Había sido una cesárea exitosa, Rin tenía diez minutos de haber regresado de la sala de recuperación y esperaba ansiosa que le trajeran a su hija, la había visto por un instante segundos después que la sacaran y se moría de ganas de tenerla en brazos. A su lado Sesshoumaru cargaba a Akira que preguntaba a cada minuto cuando podría conocer a su hermanita. Cuando la enfermera entró con un pequeño bulto en brazos, Rin no pudo controlar la emoción y comenzó a llorar de alegría. Poniéndola en brazos de su madre, le dijo que era una preciosidad de niña.

"Los felicito es una muñeca!"
"Gracias!"

Acomodándola para darle pecho, Rin vio con emoción como Akira le pedía a su papá que lo alzara para poder ver a su hermanita de cerca. Los ojos infantiles se abrieron emocionados y con una voz muy queda le dijo a su papá que era muy pequeña.

"Si y muy delicada. Recuerdas lo que hablamos? Debes tratarla con cariño!"
"Te lo prometo papi!"

Con cuidado, Sesshoumaru acomodó Akira junto a Rin para que pudiera ver a su hermanita más de cerca, el pequeño la miraba, miraba a su padre y luego a su mamá.

"Que pasa mi amor?"
"Es linda, igual que tu!"

Rin lo besó en la cabeza diciéndole que lo quería y miró a su hija sintiendo que el corazón iba estallarle en el pecho de la felicidad, segura que la vida no podía ser mejor. Al borde de la cama, Sesshoumaru miraba a su hija maravillado. Cuando la pequeña terminó de comer, quiso cargarla y Rin lo complació feliz.

"Ve con papi!"

Tomándola en brazos como si fuera una muñeca de porcelana, Sesshoumaru la acunó con ternura, dándole besitos en la frente mientras le hablaba muy quedo. Akira aprovechó para abrazar a Rin preguntándole si iba a quererla más que a él, por ser su verdadera madre. Sujetándolo con suavidad por las mejillas, le dio un beso y con una sonrisa le recordó que él era su primer bebé.

"Te tuve desde los tres meses, eres mi bebé!"
"Aunque no haya salido de tu panza?"
"Eso no importa, igual soy tu mamá!"
"Y la otra señora nunca me va separar de ti verdad, el papel que guarda el abuelo dice eso, que siempre voy a estar contigo?"
"Claro que sí, que inteligente eres mi amor!"

Abrazándola emocionado le dijo al oído que la quería mucho, estrujándolo contra su pecho le dio un beso en la mejilla susurrándole un 'te amo' Separándose cuando oyeron a la bebé hacer un ruidito, Rin le dijo al pequeño que mañana regresarían a la casa, pero por el momento tenía que ir con su tío.

"En serio? Genial!"

Emocionado preguntó a qué hora llegaba Inuyasha; soltando una risa, Rin le dijo que en cualquier momento, pidiéndole que se pusiera el sweater y recogiera los carritos que había traído. Más rápido que corriendo el pequeño hizo lo que le pedían y se sentó a esperar. Cinco minutos más tarde, Inuyasha apareció por la puerta con un ramo de globos rosados y lilas.

"Hola, como estas Rin y mi sobrina? Me dijo mi papá que afortunadamente se parece a ti!"
"Jejejeje!"
"Que gracioso!"

Dejando los globos de lado, se asomó para ver a su sobrina y sonrió emocionado. Cuando quiso tratar de tocarla, Sesshoumaru se apartó pidiéndole que se lavara las manos.

"Donde tienes la cabeza?"
"Bueno perdón ni que yo supiera!"
"Es sentido común idiota!"
"Papá no le digas idiota a mi tío!"

Sesshoumaru resopló y con los ojos como dos rendijas balbuceó algo y siguió meciendo a la pequeña que parecía dormir. Con las manos limpias, Inuyasha se acomodó en el sillón junto a la cama y sostuvo a la pequeña, pensando que era la cosa más tierna que había visto en su vida.