Parte 11

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Mientras peino mi largo cabello, seco mis lágrimas que inconscientemente salieron al recordar todo lo que he vivido, mi celular suena anunciando que tengo un mensaje, sonrío con la esperanza de que sea él, con mi corazón latiendo a mil por hora tomo mi celular y lo desbloqueo.

Número desconocido:

Tiempo es distancia, distancia es recuerdos, los míos, los tuyos, los nuestros.

Rememoranzas de imágenes en blanco y negro, que tu sola presencia lo puede cambiar, o acaso el dulce timbre de tu voz que resuena al tañir de campanas de una hermosa mañana clara y diáfana de mi existir.

Claro, luz, luminidad, arranques de recuerdos extendidos en mi ser que te evoca.... Te espero, no faltes a la cita de nuestro destino, ven a mi muelle.

Alex Suarez

Pdta.: lo siento si te cause problemas con tú mamá... El chico del ascensor

El nudo en mi garganta es cosa del pasado, las lágrimas y la tristeza se han ido, en cambio son remplazadas por una felicidad inmensa y una sonrisa boba

Sin pensarlo dos veces, le respondo

Eylem: no te preocupes, lo peor ya pasó; por cierto, el poema esta hermoso, pero te puedo acusar de plagio

Termino de cepillar mi cabello, una vez listo, tomo el celular y me siento en una pequeña mecedora que está frente de la ventana con vista al hermoso parque, su respuesta no tarda en llegar.

Chico del ascensor: no es plagio, simplemente tomo prestado algunos pensamientos para enamorar a la chica que me gusta

Un grito infantil y un suspiro se escapan de mi boca

<<será que ¿el amor a primera vista existe?

Porque así me sentía con ese chico, enamorada a pesar de tan poco que llevábamos en conocernos, antes pensaba que no podía querer a una persona en tan poco tiempo y un claro ejemplo de eso es Douglas, pero luego miro a Albert y todo cambia, todo en mí, en mi mundo, absolutamente todo cambia.

Eylem: de seguro esa chica caerá rendida a tus pies

Muerdo mi pulgar, esperando con ansias y nerviosismo su respuesta

Chico del ascensor: eso espero, porque esa chica me trae como loco

Sonrío ante su respuesta

Chico del ascensor: pero que mal educado soy, no te pregunté cómo estabas

Chico del ascensor: hola Eylem, ¿Cómo estás?

Eylem: bien, gracias y ¿tú?

Chico del ascensor: ¿Eylem o Samantha?

Chico del ascensor: ¿Cómo estoy? Bueno, me calificaría como un chico bueno, pero algunos dicen que estoy sexy y guapo, así que, así estoy, sexy y guapo o ¿te referías a otra cosa? Porque también puedo responder que en este momento estoy sentado en el corredor de mi casa, viendo un lindo parque que queda enfrente de ella, pero si te refieres a mi salud, bueno, me encuentro bien, hace poco me hice unos análisis y al parecer mis padres tendrán por mucho tiempo a Albert el guapo, sí, ese soy yo.

Un mensaje un poco largo, pero no puedo evitar leerlo una y otra vez y comenzar a reír como una loca, la puerta de mi habitación se abre de golpe, rápidamente meto mi celular entre mi sostén y me levanto de la silla, por dicha la camisa que escogí hoy me queda algo holgada, miro hacia atrás y ahí está mi madre con una cara de inspector, trato de controlar mi pulso y mi nerviosismo a ser descubierta.

Vestida de Blanco o NegroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora