¿Mejores Amigos? [Mikayuu]

Capítulo 4

—Yuu-chan —grita Mika.

Corre hacia a mí para que salgamos juntos de la escuela.

—Vamos a estudiar a tu casa, ¿No es así?

—Claro Mika —sonrío—. Solo que falta Narumi.

Mika se nota tenso.

—No entiendo por qué te juntas con él ahora, tú nunca te llevaste muy bien que digamos con él.

Suspiro.

—Creo que las personas cambian Mika, y además, en vez de ser tan distantes como antes, tal vez podríamos hablarnos y llevarnos bien, es por eso que acepté su propuesta.

—Pues creo que se llevan muy bien —susurra Mika bajito, pero lo alcanzo a escuchar.

—Hola chicos —dice Narumi llegando por detrás de nosotros.

Cuando llega a mi lado, toma mi mano.

Me quedo inmóvil en mi lugar, con los ojos muy abiertos.

Mika está casi igual.

—Pues vamos, ¿No? —dice Narumi.

Los dos asentimos y empezamos a caminar hacia mi casa.

Narumi va de mi lado derecho tomando mi mano y Mika va del otro lado sosteniendo su mochila con una mano y apretando en un puño la otra.

Cuando llegamos a mi casa, doy gracias al cielo de por fin poder soltarme de Narumi, para poder abrir la puerta. Ya adentro les digo a los chicos que acomoden sus cosas donde quieran.

—¿Tienen hambre? —pregunto.

—Yo la verdad no —dice Narumi sentándose en la sala.

—¿Tú Mika? —lo miro.

—Si tu quieres comer, yo también lo haré.

Eso me hace sonreír, por más estúpido que suene, pero me sonrojo por sus palabras.

—Entonces deja veo que dejaron mis padres.

—Yo te acompaño —dice Mika.

Veo a Narumi de reojo y él voltea a verme con el ceño fruncido, le hago señas de que está bien, así que vuelve la mirada al televisor, el cual ya lo había encendido.

Entro con Mika a la cocina.

—Yuu-chan, no me agrada Narumi —dice serio.

Me acerco a él.

—Se nota —le digo con burla.

—Es muy raro contigo —dice sacando dos platos de la alacena.

Mika ha pasado tanto tiempo en mi casa y tantas veces que ya hasta la conoce como suya propia.

—Creo que sí.

—Parece que quiere ganarme mi lugar de mejor amigo de Yuu-chan —dice con tristeza.

—Nunca nadie te quitará el lugar de mejor amigo —digo y me aferro a su cintura.

Mika me rodea con sus brazos y acaricia mi cabello.

El simple hecho de estar en sus brazos me hace sonreír. Es así como lo quiero tener siempre, a mi lado, no por ahí con otras personas. Sus brazos me hacen sentir seguro y cómodo, es el mejor lugar en el que me puedo encontrar. A pesar de las circunstancias en las que me encuentre un abrazo suyo siempre podrá calmar mis más grandes pesares.

Podría quedarme vario tiempo así, junto a él, pero tenemos que separarnos porque Narumi entra a la cocina.

No lo golpeo solo por qué me está ayudando.

—¿Qué hacen?

Mika se separa un poco de mí, pero no me suelta, mantiene una mano en mi cintura.

—Le recordaba a Yuu-chan que es el mejor amigo que jamás había tenido —dice recalcando la palabra "mejor".

—No me importa eso. ¿Podemos empezar a estudiar?

—Aún no, solo deja comer.

Como junto a Mika entre anécdotas y risas. Me cuenta lo que le ha pasado, y también me habla sobre Akane y como ahora se habla mejor con ella, incluso me dice que ya una vez la acompañó a su casa, eso me pone bastante celoso y molesto.

Pasamos la tarde estudiando y Narumi trata de realizar acciones que le causen celos a Mika, y como lo que me contó antes me molestó, correspondo a las acciones de Narumi. Como la de hace un momento. Estábamos estudiando y el comenzó a hacerme cosquillas, entonces decidí seguirle el juego, y de igual manera yo lo ataqué, los dos sonreíamos, sin en cambio Mika no lo hacía.

Había veces en las que Narumi tomaba mi mano o acariciaba mi mejilla, incluso algo que me sorprendió fue que besó mi mejilla. Está claro que estaba molesto, y que estaba correspondiendo a las acciones de Narumi, pero tampoco pienso hacer sentir mal a Mika, así que cuando miro a Mika me doy cuenta de que está muy enfadado y va a decir algo, cuando suena el celular de Narumi.

Se levanta y se aleja de nosotros.

Entre Mika y yo solo hay silencio.

Después de unos minutos Narumi regresa.

—Lo siento chicos, me tengo que ir —dice—. Tengo un asunto pendiente.

Sale de la casa y de nuevo todo se queda en silencio.

—Creo que quiero golpear a Narumi —dice Mika de repente .

— ¿Por qué?   —le digo desconcertado.

—No lo sé —contesta.

—Eso no es una respuesta.

—No tengo una respuesta contundente para decir porque lo quiero golpear.

Tal vez yo sí la sé Mikaela.