Microrrelatos no tan micros.

Mucho gusto.

Ambos se estrecharon la mano luego de ser presentados por Samantha con la tipica frase de presentaciones:

-Vanessa él es Alex, mi amigo de toda la infancia que tenia un lustro sin verle!

Alex, Vanessa, mi mejor amiga, y loca como ella sola.

-Mucho gusto Vanessa.

Se adelanta Alex estrechando con su mano izquierda (sí, era zurdo) y mirandola fijamente de forma provocativa.

-Mucho gusto amigo de la infancia de Samantha.

Refiriendose a él con ese pronombre mas por el hecho de que a pesar de haber escuchado su nombre segundos antes ya se le habia olvidado. Quizas por su mala memoria, o quizas por el hecho de haberse perdido en sus ojos hipnotizantes que no hacian más que despertar curiosidad hacia él.

Luego de unos segundos...

-Vanessaaaa!

Replicó por tercera vez Samantha desconectandola de ese momentum.

¿!De qué sabor querrás tu malteada mujer!?

-Con mucho picante...

Contesta ella dejando en evidencia que lo ultimo que queria probar en ese momento era una malteada, o lo que ella habia entendido, unos tacos.

Samantha se levanta suspirando hondo y pidiendo 3 malteadas a su propia consideracion.

-¿Te digo algo? Le dice Alex con intenciones de decirle, aun si la respuesta recibida hubiese sido negativa.

-Lo que quieras!

Sí, esto era amor a primera vista señores! (si es que eso existe).

-Sólo te daré un único consejo, no te enamores de mi.

Estas palabras fueron un balde de agua fria encima de un fuego recien comenzado!

-Ja! Nunca lo haría!

Dice una Vanessa que habia sido descubierta, pero que no admitiria su peculiar amor recien comenzado.

-Pero solo por curiosidad, ¿Porque no quisieras que me enamore de ti? Digo, no es para que te enaltezcas, pero no te considero un mal partido.

(Buen partido? Ja! El simple hecho de pasar una noche con él seria un campeonato histórico, un juego de estrellas, planetas y galaxias convergiendo entre si mientras cientos de estrellas fugaces se reúnen a contemplar la máxima expresión de placer) Pensó ella.

-Bueno, mi historial así lo indica, a mi paso he dejado más corazones rotos que los años que tengo de vida (Alex tenia 24 años), con las lagrimas que han derramado por mi fácilmente se llenarían las fuentes del Bellagio (haciendo alusión a una de las fuentes de agua mas emblemáticas de Las Vegas), quiero que entiendas que soy un nómada del amor, ando por la vida buscando la diosa que haga asentar a este inmortal en el olimpo del amor, aunque creo que al final me convertiré en ateo, no por falta de fe, mas bien por falta de pruebas que sustenten mi fe, por falta de ese amor que sacie este corazón sediento.

Sí, tu que estas leyendo esto pensarias que Alex está pecando de exagerado o poco humilde, pero aunque no lo creas estas palabras fueron las mas moderadas que podria haber utilizado para describirse, era un Casanova en tiempos modernos, la fantasia de toda mujer hecha carne.

-Y si me quiero arriesgar contigo?

Alex sólo sonrie y escribe su whatsapp en una servilleta, colocandola en el medio de la pequeña mesa circular.

-Ya eso queda a consideracion tuya.

Dice mientras desliza suavemente la servilleta al centro del mesa.

-¿Qué haré? Piensa ella.

Tomar su número significaria terminar como una más en su lista, pero también implicaria dar riendas sueltas a sus instintos más pasionales que gritaban ser liberados! Su libertador había llegado!

Bueno creo que...

En ese momento interrumpe Samantha quien trae consigo las malteadas, pero quien al final de cuentas tuvo que beberse la de Lucas ya que tenia que retirarse a una importante cita de trabajo (o como en realidad fue, a la habitación 708 del hotel Hamilton, donde lo esperaria la esposa del Senador local).

-Bueno chicas, me retiro, mucho gusto verte Samantha, me alegra que hayas crecido y ya no seas la tipica enanita, jejeje.

Se despidió con un beso en la mejilla.

Mucho gusto conocerte Vanessa, se despide con un beso igual en la mejilla pero mas lento y cerca de la boca.

-Mucho gusto Alex.

Es lo unico que le dice, mientras lentamente toma la servilleta y la entra en su bolso izquierdo.