Escritorio (Richie Sambora)

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Todo comenzó entre risas, charlas, pizzas y una que otra mirada. 

Cuando Tico me invito a pasar una tarde con sus amigos nunca pensé que seria ni más ni menos con los chicos de Bon Jovi, y es que estaba acostumbrada a sus amigos "no populares", sólo algunas veces había estado con los chicos de  Bon Jovi. 

Era una tarde agradable, los chicos parecían verdaderamente unos niños, muy normales y nada de "humos en la cabeza" por el éxito que tenían. Iba a tomar una cerveza cuando se rozaron nuestras manos, me puse nerviosa y corrí mi mano ligeramente, pero me quede pensando como sería... 

La tarde siguió su curso. Los chicos conversaban en el patio y yo había decido ir a relajarme y centrar mis pensamientos en la oficina que Tico tenia en su casa. Me encontraba frente al escritorio, cuando de repente sentí unos brazos rodear mi cintura, junto con un suspiro sobre mi cuello, muy cerca del lóbulo de mi oreja. Sentí como una corriente me recorrió desde la cabeza hasta los pies. Y sólo me límite a correr mi cabeza para un costado, para darle más espacio a esos labios carnosos que tantas veces había deseado. Él empezó a besar lentamente mi cuello, mientras sus manos acariciaban mi cintura. Sabía quién era, mi cuerpo lo reconoció de inmediato. Tomé sus manos y las acaricie mientras me daba vuelta. Sus ojos lujuriosos y penetrantes me miraban fijamente provocando un nuevo estremecimiento en toda mi piel. Necesitaba tomar el control de esto, por lo mismo, tome su cara con mis dos manos y nos fundimos en el más esperado beso, sentir esos labios moverse entre los míos era digno de repetir una y otra vez. Su lengua recorriendo hasta el punto más recóndito de mi boca.

Debo reconocer que a ese punto, y con sólo un beso, yo ya estaba esperando algo más, sentía hervir mi interior, un impulso quería gritar y pedirle que me hiciera suya en ese momento, sin importarme el dónde ni el si era correcto o no. Lo necesitaba, necesitaba saber que tan bien sabía hacer las cosas Richie Sambora, qué tan ciertas eran aquellas bromas que él hacia.

Parecía que él podía leer mis pensamientos, porque, mientras me seguía besando, sus manos ya estaban tocando mi piel, provocando que mi blanca piel se sonrojara ante su contacto, y se dirigían hacia arriba por mi espalda. No me quede atrás y empecé a acariciarlo, mis manos tocaban su piel, caliente como un volcán, pero calor del que no me quería separar. 

En cuanto quise darme cuenta sus manos ya se dirigían a sacar camiseta, y sus labios carnosos y calientes me empezaron a besar el torso, sentía como se movían lentamente sobre mi y bajaban desde mi boca.

Mis pechos quedaron al descubierto hasta que sus manos los encontraron, él los masajeaba y tocaba mis pezones con delicadeza, lo que generaba que estuvieran turgentes y deseosos de sentir sus labios sobre ellos. Hasta que finalmente se encontraron, sentía como un calor intenso me recorría por dentro, y al pasar por mi sexo se erizaba toda mi piel.

Desprendió mi pantalón y lo bajo delicadamente, mientras yo hacia lo mismo con él. Tome con mis manos lo ultimo que le quedaba de ropa y se la quite. Comencé a besarlo desde el cuello hacia el sur, bajando por esa hermosa piel que mis labios estaban deseosos de sentir desde el primer día que Tico nos presento.  

Mi lengua estaba en éxtasis, enloquecida, circulando por toda su extensión. Mis oídos escuchaban tímidos y casi silenciosos gemidos provenientes de esa boca que había despertado toda esta lujuria.

Richie me levantó y sentó sobre el escritorio, sus manos bajaron mi braga y la quitaron del escenario, corrió mis rodillas alejándolas una de la otra y con una mirada que ha cualquiera haría perder la cordura comenzó a besar lentamente desde el empeine del pie hasta los muslos, me arquee cuando mordió ligeramente la parte interna de mi muslo, lo sentí sonreír sobre mi piel, mientras sus dedos parecían disfrutar el lento camino hasta mi sexo, quemando cada rincón de piel junto a cada nuevo paso. Sentí una explosión dentro mio, como jugaba con sus dedos y su lengua era una sensación indescriptible, me recorría un calor extremo por todo mi cuerpo, que me provocaba perder toda la cordura que,hasta ese momento, pude haber tenido. 

No aguante mas y se lo pedí, pero se negó, a él le gustaba la previa y quería continuar un rato más así... 

Richie me miro, se sonrió pícaramente y volvió donde estaba, sus labios, ahora, recorriendo mi cuello, y siguió con ese perfecto trabajo que estaba haciendo. Ya sentía como mi humedad me recorría y bajaba por mis muslos y llegó el momento, esa explosión interior que hace que los músculos se contraigan, la respiración se acelere y los ojos se nublen del placer. 

Esa primera estocada me generó un sentimiento de placer que sólo quería salir de mi con un grito. Y empezó a moverse, yo ya había visto las estrellas y por cómo se movía y por cómo me sentía pensé que las iba a volver a ver.  Podía sentir que explotaba nuevamente, y no me equivocaba, llego nuevamente el momento, no lo podía creer, él disminuyo el ritmo un poco mientras no dejaba de tocarme y luego aumento los movimientos, cada vez más rápido.

[...]

Nos reincorporamos, nos miramos pícaramente y empezamos a besarnos nuevamente, se venía el segundo round...


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Tenía este y uno más escrito hace algunos días. Se los subo ahora, ya que mañana no tengo clases🙌🙌 pero eso no quita todo lo que tengo que hacer para la universidad🙄🙄🙄🙄😴😴😴 en fin.... Ojalá les guste. 


Living in sin/ One ShotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora