Cuando llegamos al bar me di cuenta de que todo sería diferente a mi anterior vida, aquel lugar no se parecía nada a el anterior que iba, lleno de tranquilidad y señores mayores contando anécdotas, sino que era un descontrol de comida volando, personas corriendo mientras otras se les subían a la espalda y gritaban con una cerveza en la mano, y justo en el momento en que dos mujeres pasaban agarrándose el vestido para que no se les caiga, Alex abrió los ojos y sonrió, las siguió con la mirada, ellas la captaron, y le devolvieron una borracha sonrisa.
-Hoye guapo, nos sigues?- Una de las chicas, pelirroja, bastante linda, se le acerco y acaricio el mentón a Alex.
-Kala..?- Alex giro la cara hacia ella y con los ojos le imploro el pase.
- Me quedare más de lo que crees- Fijo la mirada en él y sonrió- Ve-
Alex soltó un grito no tan alto y la mujer lo tomo por la camisa y arrastro para el bulto de personas.
Kala lo miro desaparecer con una placida sonrisa en el rostro.
-Bueno- Dallas lo miraba también- Eso era de esperarse.
-Sigo con hambre- Kala busco un agujero entre las personas y sin decir nada me tomo de la mano y nos escabullimos por el disturbio de personas, hombros chocaban contra mí tumbándome un poco para atrás, pero ella se mantenía firme, esquivado todas las personas, y cada vez que me alejaba por algún golpe me atraía de nuevo para adelante. Al fin llegamos a una barra colmada de personas y encontramos tres asientos libres, Kala se sentó con rapidez y yo me senté a la derecha, y Dallas, que nos seguía el ritmo con un poco de esfuerzo, a su izquierda.
-Quien dijo que encontraríamos asiento tan fácil?- Decía el mientras la cantinera le servía rápidamente una cerveza, ya que desbordaba de pedidos.
Reí ligeramente por el comentario, ya que habíamos estado un buen rato para hallar lugar.
-Es verdad- Kala le daba un buen trago a su cerveza y miraba las botellas de detrás de la barra, la música del violonchelo y los tambores sonaba muy alta y todos se movían frenéticamente en el lugar, aunque si prestabas atención veías a algunas personas tratando de mantener una conversación en las esquinas, personas besándose sin saber exactamente donde se encontraba la boca y donde la nariz abundaban.
Pase lo demás de la noche hablando con Dallas y Kala, descubrí lo gracioso que podía ser el cuándo se soltaba, nos reímos mucho con los comentarios de ella sobre las historias de su ‘’Primo’’ Que en realidad no es su primo, pero lo descubrieron hace poco, y se toman como tal; me contaron que ellos pelearon mucho juntos, que él estaba cuando ella hacia el Infi a los ocho, y le ayudo a entrar a escondidas, comimos bastante, aunque era difícil porque la cantinera estaba totalmente concentrada y te tomaba el pedido y no le digas algo más, Kala y Dallas comieron bastante, algo que me pareció raro por lo flacos que eran todos en el lugar.
-Y tu Ethan?- Pregunto Dallas luego de que terminaran de contar su divertida historia- Que fue de tu vida?-
-Bueno- Termine de tomar la cerveza y proseguí mientras veía el fondo vacío- Crecí en el campo, mi madre me crio sola, pero mis abuelos siempre estuvieron- Deje el vaso y tome conciencia de las que había bebido, ya que la mesada estaba llena de vasos, que tomamos todos, pero en especial Dallas.
-Bueno- Espeto el – Eine debe estar por ahí buscando algo que besar, y tengo que estar allí-
Nos echamos a reír por enésima vez, pero fue más corto que los de antes.
-Bueno primito- Dijo Kala mientras se levantaba, al igual que él, y se acomodaba la ropa- búscala en el pasillo, porque van a dar las doce, todos entran a la sección-