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No se claramente si estoy pensando demasiado o si mi cabeza realmente no tiene nada más que la mirada que él me esta dando justo ahora. Han pasado algunos segundos desde que comenzamos a mirarnos así y se que podría gritar ahora mismo pues jamás había sentido esta sensación, y no saber lo que Steve esta pensando también me pone algo temerosa.

Creí que no podíamos estar más cerca pero se acerca y yo tengo que levantar mi cabeza para poder verlo, toma más firme mis manos y una la sube a hombro y la deja ahí, me siento perdida pues no puedo ni reaccionar completamente, solo se que he comenzado a sonrojarme pues el pone una de sus manos en mi cintura y deja nuestras manos libres entrelazadas.

-Bailarias conmigo? -Dice casi en susurro y puedo notar nostalgia o tal vez tristeza en su voz, el hecho de que no haya música jamás me ha impedido bailar y ahora que él me lo pide no podría negarme.

-Por supuesto, Capitán Rogers- Susurro de vuelta y me acerco acomodando bien mi agarre en su hombro, él sonríe de lado después de un breve suspiro y sin pensarlo yo soy quien comienzo con el baile, podría sentir la música a nuestro alrededor aunque no haya más sonido que nosotros.

Solo son unos minutos los que bailamos, podia sentirme en las nubes, nuestro pequeño baile termino en un abrazo pero la noche aún era joven y ambos sabíamos que no nos negariamos a lo que vendría después.

Comenzó con un beso, fue diferente a las ocasiones pasadas, se podía sentir diferente, su toque se sentía diferente, pero diferente esta vez es bueno a mi parecer. No pasó mucho para que ambos ya no estuvieramos de pie y que lo demás comenzará a estorbar, lo que ocurrió fue hermoso, fue como un sueño, fue el comienzo del fin.

...

Ya no supe más pues me quedé dormida en sus brazos, como me gustaría que asi fuera siempre. Abro mis ojos y lo veo mirando por el gran agujero del techo y puedo sentir como acaricia mi cintura, aún hay estrellas pero se puede ver que el sol no tarda en salir, justo a tiempo para poder estar en esta posición unos minutos más.

-Buenos días- Dice aun mirando en esa dirección, mi mirada debió hacerle ver que he despertado, mi corazón podría explotar de lo rápido que late y latira a partir de esta noche cada que vea a Steve latira mas que como latía antes.

-Buenos días, Cap- Sonrió ampliamente y tallo levemente mis ojos con la mano que hace segundos yacía sobre su pecho- Algún reporte de misión? -Susurro riendo y me acomodo de modo que pueda besar su mejilla.

-Si lo hay, ha sido la noche más tranquila que he tendido desde hace mucho, lo cual me confunde pues fue todo menos tranquila- Gira a mirarme diciendolo con ese tono de gracia que él suele tener- Pero ahora debemos volver, linda- Mi sonrisa paso de ser casi inborrable a casi desaparecer, en realidad olvide todo lo que nos rodeaba, hasta los problemas.

...

Vamos de regreso en la motocicleta, aún el hecho de saber todo lo que viene la felicidad no puede irse de mi corazón, el transcurso desde que nos levantamos hasta subir a la motocicleta fue demasiado agradable, nuestras muestras de compañerismo ahora son más como una complicidad.

Llegamos y todo sigue como lo dejamos, el hecho de volver a entrar me causa dolor pero también el hecho de no volver me dolería aún peor sabiendo que tengo unas cuantas horas antes de despedirme por tiempo indefinido de mi ahora gran amor.

Guerra contra el tiempo [Steve Rogers]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora