The Apartment / Larry Stylinson /

Capitulo 22

-Eso son fantásticas noticias-sonrió apretando la mano de Harry todo su pálido cuerpo se veía amorotonado, era impactante ver su ojo y saber que no podía verlo desde él lo perturbaba, estaba tan brillante y hermoso cuando salió por la puerta y ahora... ahora luce roto en todo sentido de la palabra.

Se ve triste, se ve cansado y gastado, lo vio sonreír solo una vez desde que llego y fue cuando el doctor hablo sobre su completa movilidad en la pierna y que su visión iba a volver a la normalidad con el tiempo, luego de eso se le hizo difícil hacerlo sonreír o reír. Algo que era tan fácil ahora resulta imposible.

Tuvo que salir un momento de la habitación, era demasiado. Se sentía sofocado ahí dentro, tomo su celular y entro al buscador de Youtube, nunca había visto a Harry bailar, y en esos momentos sentía que era lo que necesitaba.

El vídeo comenzaba con él en medio, dos chicas a su lado, pero su visión seguía moviéndose a Harry, usando unos loggins de Adidas y un crop top negro.

La música sonaba, y los tres comenzaron a caminar hacia la cámara, moviendo sus caderas. Todo pasaba tan rápido, sus movimientos eran totalmente perfectos, casi solta un gemido ahogado al verlo comenzar a torcer su cuerpo por completo, su espalda haciendo una curva que parecía imposible pero ahí la estaban haciendo, casi como si fuera la cosa más normal y fácil de hacerlo. Se veía hermoso, con su maquillaje intacto mientras se tiraba al suelo y estiraba sus piernas por completo, bailando al compás de la música, haciendo arte.

No pudo evitar comenzar a llorar, estaba tan orgulloso de verlo ahí bailando como si su vida dependiese de eso, de verlo brillar como la estrella que es. Simplemente era demasiado.

Siempre supuso que era buen bailarín, pero eso sobrepasaba los límites. Quería correr y abrazarlo, decirle lo asombroso que es, lo orgulloso que estaba de verlo bailar, reprocharle por nunca mostrarle su precioso trabajo y que le enseñe a ser tan flexible como él. 

Limpio sus lágrimas, era demasiado. Estuvo a punto de volver a entrar a la habitación cuando volvió a romper a llorar, no podía. Sentía que el aire se marchaba de sus pulmones, cuando sentía que todo iba a estar bien tenía que recibir esa llamada, ojala nunca lo hubiera hecho. Pero ahí están, y siente que la vida es demasiado.

Siente que lo mejor es irse, que hay mucho dolor en el mundo para ser real.

-Es normal-giro su mirada azulada hasta la voz, donde una mujer lo miraba con una sonrisa triste- es normal que te sientas así.

-¿Disculpe?-frunció el ceño mirando a los ojos marrones de la señora.

-Es normal sentirse así, a veces a los familiares les cuesta más que al paciente en si.

-Es solo que... sigo sin entender como alguien pudo hacerle eso, y más por su estilo de ropa. ¿Qué tan enfermo es eso?-soltó un gruñido bajo.

-Los humanos tienden a golpear todo lo que desconocen-miro a la mujer, una doctora, alzara sus hombros- pero es ahora cuando debes mostrarle todo tu apoyo a tu novio, porque va a necesitarlo, demasiado.

-Yo... no se como hacerlo-admitió.

-Primero que nada debes estar presente, el resto vas a notarlo ¿sabes? simplemente fluye.