Capitulo 12

15 1 1
                                    

Anabelle estaba por dormirse en aquel estante del centro comercial, la gente comesaba a fastidiarla quería tener un arma y jalar del gatillo y no estar sufriendo aquello.
¿Algo peor? Sus datos móviles se habian terminado solo poseía unas cuantas monedas ¿Adonde iria?.
Caminaba por las calles con ese frio que le calaba hasta los huesos. Miro aquella cafetería se veia acogedora para su gusto, ¿Que tanto podria valer un cafe? Mal diciendo por su decisión se adentro ala cafetería y se sentó en uno de los pequeños sillones individuales ¿Hora? 8:30 pm no había llegado asu casa ni un solo minuto supuso que haci serian todos los dias: aburridos y cansados.
Alguien llego a tomar la orden.

- ¿Que desea llevar? - dijo una chica delgada con un formal uniforme y zapatillas de tacón alto -.

+ Un café negro, por favor - sonrió forzosamente -.

- Enseguida vendra su orden, señorita.

Anabelle asintió como respuesta. Escucho a alguien discutir en otra mesa levanto la vista, era un apuesto hombre trajeado hablando por telefono.
Hay que estar ciega si no lo consideras apuesto penso Anabelle embobada con aquel hombre.

-¿Seguiras tirando baba ó resiviras El café? - la voz burlona la saco de sus pensamientos al reconocer la voz ronca-.

+ A-abalam... - el le entrego el café con unos pequeños sobres de endulzantes -.

- ¿Si? - sonrio- Advierto no nos hacemos responsables de objetos perdidos que se reporten en este lugar, ¿Alguna otra cosa a pedir? - Anabelle negó casi al instante- ¿Quiere la cuenta?

+ Primero responde una pregunta. ¿Que haces aqui?

- ¿No es obvio? Este es mi trabajo, sin mas que decir me retiro no se me permite entablar conversaciones con mis clientes, como solo es ese café negro serian $30.

Anabelle abrio sus ojos como platos por el precio, vamos, ¿Tanto un café? Debe de ser una broma penso ella.

- ¿No podra pagarlo Dama? - dijo burlón -.

Estaba apunto de contestarle y una voz bastante gruesa la interrumpió.

- ¡Abalam! - grito aquel hombre alto de tez morena - Te necesito aqui.

Abalam se aproximo a aquel hombre con firmeza, mientras que Anabelle tiraba baba por la gran delicadeza de los pasos de el, tenia que admitir que el traje quedaba perfectamente a su  cuerpo haciéndolo magníficamente sexi. Ella salio de su trance cuando se dio cuenta del regaño que le estaban dando a Abalam.

- Sabes que tienes prohibido entablar conversaciones con los clientes - el estaba cabizbajo - Escuche tus tonos chico. Disculpate con la damisela ¡Ahora! - gruño el hombre y se adentro a una pequeña puerta, mientras que abalam se dirijia en su dirección con un gesto de molestia plantada en su rostro-.

- Perdone Damisela, Como recompensación su compra en este café corre por cuenta mia, Que tenga linda noche - se acerco y susurro-: Resolveremos este inconveniente, esperaras afuera hasta que salga si te vas te ira mal - dicho esto se giro sobre sus talones y se marcho-.

Es malditamente Sexi penso al instante en que tomaba de su café.



Recepción -> Fuera.

Cristales Rotos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora