Capítulo 33

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Me despierta el horrible dolor de cabeza que tengo. Es una tensión que recorre toda mi cara hasta llegar a mi nuca. Abro los ojos, la luz blanca que proviene del ventanal me lastima. Vuelvo a cerrarlos. Esteban no está a mi lado. Me levanto, entrecerrando los ojos, la luz es un fastidio, me siento como si me hubiera puesto la peda de mi vida. Salgo de la habitación, me dirijo a la planta baja, no está aquí. Busco en la cocina, el comedor, la sala, su oficina, En todos lados, al parecer no está. Tengo casa sola, una alacena junto a un refri espectacularmente lleno y un equipo de música increíble. Conecto mi teléfono vía Bluetooth al equipo, vuelvo a la cocina, encuentro todos los materiales que necesito para hacer Hot Cakes; harina, leche, huevos, vainilla, cocoa en polvo y Crema de avellanas. Una idea increíblemente pervertida se atraviesa por mi mente. Me sonrojo al sólo pensarlo, mis mejillas se calientan, el hecho de imaginarlo me excita, si tan solo le propusiera untarle Un poco de Crema de avellanas a su miembro para después metérmelo a la boca.... «No Abraham, Olvídalo, pensará que eres demasiado pervertido he infantil» Que calor, Dios. No debería pensar más en ello, estoy en reposo. «Cielos, sería excitante y Morboso...»
Pongo música en aleatorio, La canción Limón Y Sal de Julieta Venegas inunda la cocina.

«Tengo que confesar que a veces, no me gusta tu forma de ser
Luego te me desapareces y no entiendo muy bien por qué
No dices nada romántico cuando llega el atardecer
Te pones de un humor extraño con cada luna llena al mes»

La canción me recuerda a Esteban, con sus cambios de humor, su ira. Me gustaría saber porque tiene toda esa mierda mental. Se una pequeña parte, pero no todo en concreto. «¿La pesadilla y la foto tendrán algo que ver?» tal vez si, por algo no me lo quiere decir, pero hay algo en mi interior que necesita saberlo, entender porque es así y como puedo ayudarlo.

«Pero todo lo demás le gana lo bueno que me das
Solo tenerte cerca, siento que vuelvo a empezar
Yo te quiero con limón y sal, yo te quiero tal
Y como estas no hace falta cambiarte nada
Yo te quiero si vienes o si vas, si subes
Y bajas si no estas seguro de lo que sientes...»

Me da un bajón emocional, pobre de Esteban, necesita ayuda pero no quiere ser escuchado, tiene miedo y yo quiero ayudarlo.

Preparo la mezcla para los Hot Cakes, prendo la estufa, pongo un sartén y un poco de mantequilla, comienzo a colocar la mezcla.  La cocina empieza a oler a vainilla. Mi boca empieza a salivar, mi estómago ruge, Estoy muy hambriento. Hago toda la masa de Hot cakes, cuando están listos los coloco en un bowl, voy a la alacena y saco un plato. Meto los materiales que ya no necesitaré en el refrigerador, mientras coloco los huevos y la leche en su lugar, me encuentro con un montón de fresas. Será un desayuno exquisito. Coloco tres Hot cakes, uno encima del otro, entre cada pan pongo un poco de miel de maple, en la parte de arriba coloco crema de avellanas, fresa en rodajas y azúcar glass, un platillo lleno de diabetes. Saco cubiertos y comienzo a degustar mi monstruosidad de azúcar. 
Corto un trozo y me lo llevo a la boca.
Mmmm... está delicioso y empalagoso a  morir. Termino mi desayuno, lavo los trastes que utilice, ordeno la cocina y voy al piso de arriba. Hay seis puertas en esta planta, me gustaría abrirlas todas y descubrir lo qué hay. Solo conozco el interior de cuatro de ellas. En verdad que esta casa es lo triple de grande que la mía. Decido no irrumpir en las puertas que desconozco el interior. Pero el morbo crece, por un cuarto en especial, que conozco su contenido. Pongo mi mano en la perilla con la esperanza de que no tenga llave, mi corazón se acelera, es como llegar al tache que marca el mapa del tesoro, y detrás de esta puerta esta todo el horno. la giro. Mi corazón se acelera aún más al ver que la puerta se abre. «Oh si, he llegado al Tesoro» Entró a la pequeña habitación llena de juegos y artículos Sexuales. Me pongo como carro de carreras al ver los consoladores, lubricantes, fustas, látigos, veladoras y trajes de látex qué hay. Pasó mi mano por el anaquel lleno de consoladores y vibradores. Me piensa la cabeza, las manos se me hielan de la excitación. Debajo de este, hay tapones anales, en varios colores y formas, incluso hay uno en forma de cola de gato. Wow. Este cuarto es todo emociones y sensaciones, hay todo tipo de cosas Sexuales que no podría alcanzar a nombrar a Todas. También hay ropa interior nueva y sexy. Dios todo es tan caliente. Es ropa ajustada, de Licea, seda y de encaje. Me tiemblan las piernas. Tomo el tapón anal en forma de cola, un calzón ajustado con una apertura atrás y una cuerda.
Esto se va a prender, me siento sexy, Caliente. Espero no le disguste mi plan a Esteban.
Me voy directo al baño de la segunda planta, me miro en el espejo, mi mejilla está un poco menos hinchada que ayer y el moretón está cambiando de color. Menos mal, me veo un poco sexy. Pongo todos los instrumentos en el lavamanos, empiezo a desnudarme a un lado de la bañera. Tomo el calzón y...

Miro por el espejo. Esteban toca la puerta dos veces con su puño cerrado. Está apoyado en el marco de la entrada. Me mira divertido y juguetón. Se me cae el alma a los pies, me pongo nervioso, mis piernas tiemblan, todo tiembla en mi.

—¿Qué piensas hacer?

—Este, pues yo, intentaba, pues.... entre al cuarto y ya sabes, curiosidad.

—Te espero en la habitación en veinte minutos, ni uno más ni uno menos.

Me sorprendo. Mis mejillas están hirviendo.

—Pero tú dijiste que nada de juegos.

—Dije, te espero en la habitación en veinte minutos.

Se aleja del baño dejando más que caliente. Oh Dios...

Placer Entre Lineas: Todo De Mi #2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora